Capitulo IX: Propuesta

967 120 50
                                    

—. Buenos días señorita ___. —Dice una voz a mi lado.

Levanto mi cabeza que estaba escondida entre mis brazos, froto mis ojos y los abro.

—. Buenos días Liam...—Analizo un momento al chico que estaba a centímetros de mi cara con su sonrisa. —. ¿¡LIAM!? —Me pongo de pie de inmediato. —. ¿¡Que está haciendo aquí!?

El rubio tenía un papel que sostenía con su dedo índice y medio.

—. Me encontré al señor y la señora Lacroze está mañana y me invitaron a pasar, cuando llegué la señorita July me entregó la invitación para su boda.

—. Ya me imaginaba que estaba aquí por eso, pero mi pregunta era ¿Como entró aquí?

—. La puerta de su habitación estaba abierta de par en par y el taller no tenía llave, el señor Marco me pidió que la viniera a despertar y me permitió entrar.

Maldito Marco, hace todo con tal de que me quede un momento a solas con William.

—. Oh, ya veo.

Me levanto y luego me miro por el reflejo de la ventana, estaba toda despeinada.

Abro mi ojos como platos y rápidamente me cubro con un sombrero.

—. ¡S-señor William, lo siento, me acaba de encontrar en la peor de las condiciones, disculpe mi desarregalada imagen!

—. ¿De qué se preocupa? Todos los humanos despertamos así, Además.. —Se acerca a mí, me quita el sombrero y desenreda mis cabellos para finalmente dejarlos detrás de mi oreja. —. Lo hermoso siempre está en lo natural.

Tenia que definitivamente aprender en que momento Liam hacia sus comentarios inesperados para aprender a controlar el sonrojo que en este momento adornaba mi rostro.

El rubio suelta una risita, pero luego cambia de tema.

—. Se veía bastante cómoda ¿Como esta su cuello?

Hago un leve movimiento y suelto un quejido, aunque estaba acostumbrada aún así no era buena pocision para dormir.

—. Le dije la otra vez que no era buena forma de dormir.

—. Si, lo se, lo siento, por el cansancio generalmente me duermo aquí.

—. Pues entonces no debería quedarse hasta tan tarde señorita.

Asiento con una sonrisa y mi mano en la nuca.

—. Por cierto, recuerde, solo llameme ___.

—. Oh, si, lo siento, es la costumbre.

El rubio va hacia la puerta y se asoma por el marco de esta.

—. Bueno, la dejo vestirse. —Dice saliendo, pero vuelve a asomarse. —. Por cierto, disculpe que ayer no me haya podido despedir junto con mis hermanos de la mejor manera.

—. No te preocupes Liam, yo fui la que se quedó dormida.

—. La hubiera despertado, pero realmente se veía cansada, pero bueno, ahora sí la dejo.

El rubio sale del taller, se escucha como también sale de la habitación y cierra la puerta.

Me voy al baño y me veo en el espejo, mi apariencia era terrible, de solo pensar que Liam me había encontrado así moría de vergüenza.

Me doy una ducha rápida, salgo con la toalla y me visto en mi habitación, me pongo un vestido simple, lo único que uso como maquillaje es algo para tapar las ojeras.

JUDAS (William James Moriarty x Tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora