Capitulo XXV: Encubiertos

245 48 44
                                    

Al día siguiente me encontraba en un estado deplorable, aparte de no haber dormido nada, mi cabeza seguía hecha un nido de pájaros.

Abro mis ventanas para que entre la luz, me doy una ducha rápida y corta. Veo mis ojos, estaban hinchados, pues anoche pensando en todo había llorado bastante.

Comienzo a ordenar todo, estaba en camisón, no sabía que ponerme.

De pronto unos suaves golpes en la puerta me sacan de mis desgraciados pensamientos.

—. _____, hola, soy Louis.

Corro a la puerta y saco solo la cabeza.

—. Louis, hola ¿Como esta todo? Disculpa que no salga, aun tengo mi pijama.

—. No hay problema... —Se detiene un momento. —. ¿Segura que todo bien? Tus ojos están muy hinchados...

Bajo mi cabeza.

—. Si, solo que anoche por los nervios de la misión no pude dormir muy bien.

—. Pero si es en una semana.

—. Si, es solo que... olvídalo, bajo de inmediato.

El rubio asiente y yo cierro la puerta detrás de él.

Comienzo a vestirme, pero no al mucho rato vuelven a tocar mi puerta.

—. ¿Si? —Pregunto.

—. Soy Moneypenny, Louis me manda que le de esto.

Abro la puerta y me entrega una bolsa de tela, cuando la recibo estaba helada, adentro había hielo.

—. Vaya... —Exclama la pelinegra. —. ¿Esta usted bien?

Le hago una seña a la mujer de que pase, ella entra enseguida y cierra tras de sí.

—. Me siento mal por no haberle podido confesar esto a Louis, sin embargo tengo el temor de que pueda escaparsele con el señor William.

La pelinegra, expectante, abre sus dos ojos oscuros demostrando interés.

—. Anoche... estaba practicando el baile para la misión con el señor Moran cuando me encontré a Liam en el... invernadero.

—. ¿Ustedes solos? Espera... ¿Y de noche?

—. Si, se que no suena nada ético, pero en serio no sabia que estaría ahí, yo estaba decidida a practicar sola.

La pelinegra me ayuda a apretar mi corsé desde la espalda, mientras me dice que continue.

—. Estuvimos bailando, y dijo que me iba a ayudar. Comenzamos a simular como actuar y todo eso, sin embargo la actuación fue muy lejos y... llegó a parecer ser real...

—. ¿Real? ¿A que se refiere con eso?

—. A que si no fuera porque estábamos actuando, tendría la certeza de que... Liam se me confesó.

—. ¿¡QUEE!? —Grita del asombro, tanto que apretó demasiado los hilos del corsé y me dejó sin aire. —. L-lo siento! —Volvió a exclamar sin quitar esa cara de asombro.

—. ¡Es que no lo sé! ¡Si no me hubiera ido corriendo quizás eso hubiera terminado en un beso! ¿William es capaz de hacerlo por cumplir con una misión?

—. Bueno... el señor William está bastante comprometido con sus labores, sin embargo, nunca ha usado relaciones con mujeres para llevar a cabo una misión, me refiero a que nunca a fingido un interés amoroso por un fin en específico.

—. ¡No me des ilusiones!

—. No le estoy dando ilusiones, solo respondo lo que me preguntó. Ya está listo, puede ponerse el vestido.

JUDAS (William James Moriarty x Tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora