La Tentación Prohibida Del Magnate

Capítulo 2. Extraña calor

— ¿Puedo saber cómo lo haré? —Simuló Crystal mostrándose inquisitiva cuando en realidad estaba difusa —no pertenezco al primer mundo ni soy una cara conocida.

Por ahora, claro.

—No te preocupes con solo ver tu imagen cualquiera te relacionará con el pedigrí de una de las más familias más influyentes y aristócratas de nuestra sociedad.

— ¿Qué sucede si piden mi nombre? Definitivamente no relacionarán mi apellido con ninguno de los renombables apellidos de la alta sociedad. —negó con la cabeza, fue una mala idea salir sin preguntar siquiera a Mary el lugar.

—Si eso sucede sacas dinero de ese fino bolso de diseñador que llevas y los sobornas —explicó sin preocupación —además con solo ver ese bolso tuyo los de seguridad te darán libre ingreso al Bar y a todo el Hotel en sí.

¿Es que no entiende que los lugares de millonarios es imposible que sean sobornados?A diferencia de Mary, Crystal si entiende que en este tipo de establecimientos aparte del dinero también importa el estatus social.

— ¿Qué de especial tiene ese Bar? porque no vamos simplemente a otro Club menos exigente? —sugirió, todavía no le convence la idea de ir a un Bar del cual no sabe ni tiene idea cómo es.

—Pensé que querías atrapar a un millonario, e incluso si la suerte está de tu lado un billonario —contestó con una sonrisa pícara.

—Sí pero después de graduarme de la universidad, no ahora que ni he empezado.

—Relájate rubia, pareces una amargada. —refunfuñó Mary rodeando los ojos.

A su parecer, Crystal se estaba convirtiendo en una aguas fiestas.

— ¿Relajarme? estamos camino a un Bar que no es para nosotras sin mencionar que no contamos con los pases ¿cómo pides siquiera que me relaje? —expresó descontenta.

—Simplemente quiero conocer cómo son los Bares de los grandes hoteles de los ricachones. —se excusó. —Como tú naciste en cuna oro no sientes ni tienes la curiosidad de saber cómo es el mundo en que se desenvuelven los millonarios.

Aparte que esta harta de asistir a los mismos bares y Club's de gente común, Mary quiere probar algo diferente y Crystal le dará la oportunidad.

—Crecí entre medio del lujo y del dinero —reconoció la rubia —pero no soy una de ellos, es como si solo fuera una pieza oculta del juego de un importante hombre empresarial o de la mafia.

No sabía que pensar últimamente, todo le parecía extraño. Si su padre no la acepta porque no simplemente deja que haga lo que quiera, porque no le da libertad y valía para que pueda hacer lo que quiera sin miramientos ni represalias.

¿En qué mundo se desenvuelve su padre para que la tenga vigilada y controlada? ¿Hay algún peligro para ella o porque la mantienen así? Son tantas preguntas que invaden su mente que Crystal no se dio cuenta que llegaron al hotel The High Rousseau.

—Llegamos —la emocionada voz de Mary acabó por sacarla de sus pensamientos.

Era un esplendoroso y extravagante Hotel, su magnificencia intimó tanto a Mary que quedó hipnotizada, Crystal simplemente miró al Hotel, sin sorprenderse, estaba acostumbrada al lujo a diferencia de Mary que tenía una expresión maravillada en el rostro , cualquier persona común quedaría absorta y embelesada por un edifico como este.

Era un gran edificio decorado en Oro. El Hotel está diseñado específicamente para deslumbrar, exhibir y disfrutar.

— ¿A qué hora las recojo? —el chófer preguntó a Mary quien seguía presa de su encantamiento.