Stony Omegacember.

Instinto

Steve toda su vida pasó como un Beta. Odiaba la supremacía que la sociedad le daba al género Alpha.

Su padre fue un gran Alpha, pero una porquería como hombre. Cuando supo que él, la igual que muchos infelices, era un Alpha, se negó aceptar esa parte suya. Escondió su casta con supresores por todos esos años y reprimió sus instintos.

Hasta ese momento.

—Tony Stark. —El Omega ante sus ojos era pequeño y perfecto.

El simple toque de sus manos despertó hasta el más escondido de sus instintos. Trago saliva sintiendo como sus colmillo buscaban salir para perforar la perfecta piel canela del cuello, sus ojos se pasearon disimuladamente por el cuerpo; el suyo se calentó.

—Steve Rogers. —Dijo el rubio. Como si el chico quemara, soltó su mano y salió huyendo ante la mirada atónita de sus amigos.

Corrió al sanitario y se encerró en uno de los cubículos. Bajo sus pantalones y libero la erecccion que se formó en sus pantalones.

Gruñó al sentirlo palpitar. En su cabeza se reproducía una película pornografica de ellos dos cogiendo como animales.

Su cabeza le demandaba ir por el pequeño Omega y arrastrarlo hasta su casa, encerrarlo y dejarlo satisfecho. Quería llenarlo, queria marcarlo, quería dejarle bien en claro quien era su Alpha.

"Hay que embarazarlo." Gruñó su Alpha interno buscando salir finalmente después de tantos años.

Dentro del sanitario, su instinto le hizo saber quien era realmente, le hizo darse cuenta que jamás podría reprimir su verdadera casta. Necesitaba ser un Alpha en toda la extensión de la palabra para tener al castaño en sus brazos y en su vida.

Se corrió en medio de un gemido ronco y largo.