Young & Beautiful - Larry Stylinson (traducción)

XXVII

El curso comienza con un poco de éxito para los chicos.

Una vez más, Zayn es la comidilla de la escuela después de que se anuncie que es el primero de su clase, seguido de cerca por Liam.

—¿Cerebro, belleza y dinero? De eso están hechos los sueños —oyó Louis decir a una chica el otro día. Le siguió un torrente de risitas de asentimiento y una breve oleada de náuseas inducidas por la molestia en su interior.

Porque, ¿en serio? Guau.

Poco después de que se imprimiera el boletín escolar (diseñado por el propio Liam, de lo que este se enorgullece cada vez que puede), Louis había tenido la inquietante e incómoda sorpresa de encontrarse cara a cara con el Canciller en persona después de que Zayn le enviara un mensaje de texto para que se reuniera con él cerca de la capilla para almorzar. Allí, entre la hiedra muerta y la piedra antigua y apagada que se alzaba contra un cielo blanco e invernal, había un hombre de rostro severo, alto e intimidante, con el pelo de color carbón salpicado de canas y una piel suave de color canela, cuyo animal espiritual era probablemente una piraña o un vampiro.

Y así, lanzando una mirada de "¿Es esto una puta broma, por qué me haces esto?" a Zayn (que se limitó a sonreír pacíficamente, murmurando frases en voz baja a su padre), Louis se acercó a la pareja.

—¿Louis Tomlinson? —había preguntado Khan Malik, satinado y poderoso y evaluador. Y joder, esto era intimidante, porque un solo movimiento en falso y este hombre podría hacer que Louis fuera expulsado. Posiblemente expulsado del continente. No conocía los límites de los ricos.

—Louis Tomlinson —afirmó Louis, estrechando la mano del hombre y sintiendo sus huesos comprimidos en diamantes por la fuerza del apretón—. He oído hablar muy bien de ti a mi hijo —soltó la mano de Louis y lo miró fijamente con ojos negros y afilados—. ¿Estás en alguna de las actividades extracurriculares de aquí? ¿El periódico? ¿El consejo? No recuerdo haber oído tu nombre.

Bueno, mierda. Qué incómodo.

—Eh, no —dijo Louis, deslizando sus manos en los bolsillos y metiendo la barbilla más dentro de su bufanda estampada—. Soy más bien un observador —mentira—. Pero estaba pensando en ir al club de teatro el año que viene —se encogió de hombros—. Las oportunidades esperan, y todo eso.

Khan Malik asintió con la cabeza, mirándolo fijamente con ojos cercanos y sin pestañear.

—Efectivamente. Bueno, te animo a participar. Estamos orgullosos de exhibir a los estudiantes más brillantes: se reflejan en nosotros como conjunto. Hay una razón por la que tenemos nuestra reputación, Sr. Tomlinson.

Y eso era definitivamente un cumplido y Zayn estaba definitivamente sonriendo con orgullo a su lado, así que Louis chilló un complacido:

—Por supuesto, señor, gracias —antes de que Zayn lo llevara a comer pasta y vino.

Y desde entonces, ha sido "Zayn Malik", "Zayn Malik", "Zayn Malik".

Por supuesto, no ayuda que su madre acabe de firmar para protagonizar otra película de "El Señor de los Anillos" (¿de dónde siguen saliendo?), lo que atrae aún más la atención sobre todo lo que es Zayn Malik y su impresionante linaje. Unas hordas de fideicomisarios aseados sedientos de "fama" se agrupan en torno a él en las fiestas, lanzando joviales invitaciones a sus casas de primavera y a sus banquetes y a sus "esto" y "aquello". Le saludan a gritos cuando pasa por el patio o en los pasillos, le hacen fotos cuando no está mirando, lo miran fijamente con los ojos muy abiertos, entre la reverencia y el juicio y…

Y, para ser franco, a Louis le importa una mierda todo eso. Y a Zayn igual.

Porque su estatus de celebridad es algo que solo sienten los de fuera, no los que están cerca de él, y Zayn apenas pestañea ante la afluencia de atención y los elogios no invitados. Sonríe ante las presentaciones y se desliza entre las masas de ropa de diseño en silencio porque es Zayn. Louis lo observa, mira cómo se pasea por los pasillos sin inmutarse mientras los rumores y los elogios siguen cada uno de sus movimientos.