Cap. 15 • Afrontar •

161 24 3
                                    

— Como le decía, su mismo apellido fue el que realizó aquellos trámites, nosotros enviamos una notificación a sus cuentas para verificar que era usted y respondió con su número de cuenta y código así que otorgamos esos permisos.

— ¡Pero no fui yo quien- agh!

— ¿No hay manera de deshacer esto? — preguntó Christopher.

— La hay, pero al congelar una cuenta de banco y bajar las cifras se tiene que volver a activar la cuenta y para eso necesitamos que vuelva a meter la cantidad de dinero que fue en un principio.

— ¡Y aparte de todo esto ¿Por qué mis cifras bajaron? La semana pasada tenía más de medio millón, aún tenía capital y hoy solo quedé en miles.

— El mismo que congeló su cuenta fue quien retiró dinero que la misma, dejando solo 10.000 AUD.

— ¡Es un pésimo servicio y seguridad la que tienen!

Félix se abalanzó sobre el coordinador y Chris lo detuvo tomándolo de la cintura y jalandolo a la salida.

— ¡Voy a demandar a este banco tan pesimista y sin seguridad!¡Lo haré!

Félix estaba sentado en el pequeño sofá acompañado de Christopher, la lluvia y un humeante café

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Félix estaba sentado en el pequeño sofá acompañado de Christopher, la lluvia y un humeante café.
Sus hijos dormían profundamente en la habitación y ellos conversaban.

— Es que no entiendo ¿Cómo fue que pasó esto?¿Quién tiene mis códigos y números? No puede ser posible yo siempre eh tenido eso en mi cartera.

— Los bancos registran las cuentas y también tienen tus códigos de cuentas — explicó Christopher — Cabe la posibilidad de que.... Te hayan hackeado.

— ¿Pero quién? Todas mis cuentas están en inglés es obvio que nadie de aquí fue y no pudo hacerlo una persona cualquiera yo solo-

El timbre sonó y ambos voltearon a ver a la puerta, Félix salió a ver y Chris fue detrás de él, un sobre blanco estaba en el suelo así que Félix lo levantó y cerró la puerta para luego romper el sobre y ver su contenido.

Aquel papel era una carta de alguien a quien una vez llamó madre.

— Ya se quién hizo todo esto...

— ¿Que?¿Quién?

— La abuela de Chaewon... Mi madre.






— La carta se le fue enviada señora Lee.

— Gracias Raymond, al leerla sabrá que tiene que regresar a menos que quiera perder a su hija, estén al tanto de lo que hace y avísenme hasta cuándo estornuda.

— Si señora Lee.

Félix y Christopher decidieron ir a la cama con sus hijos, mientras Félix acariciaba la cabellera de su hija comenzó a hablar llorando en silencio

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Félix y Christopher decidieron ir a la cama con sus hijos, mientras Félix acariciaba la cabellera de su hija comenzó a hablar llorando en silencio.

— Tengo que regresar — dijo Lee — Me tengo que ir si no quiero que me quite a mi hija...

— Pero tú no quieres hacerlo.

— ¿Y que más puedo hacer? — preguntó Félix decaído.

— Vámonos, ven conmigo, trae a Chaewon contigo tu y yo podemos está juntos. Félix te amo... Te amo en este tiempo que te conozco me enamoré de ti yo... Por favor, ven conmigo y vámonos de aquí, podemos  irnos muy lejos.

Félix jaló a Christopher hasta dar con sus labios, ambos sintieron la tristeza con amor que había en aquel beso.

— Chris... No podemos, no puedo, si me encontraron después de tanto tiempo ¿Que les va a impedir que me encuentren otra vez? Y saldrías perjudicado también, no puedo permitir que nada te pase.

— Entonces yo puedo adoptar a Chaewon, la haré mi hija y así no podrán quitármela ni a ti tampoco.

— ¿Y si pide pruebas de ADN? Christopher esto no tiene remedio... Voy a tener que regresar a Australia mañana mismo o el día que tengan boletos...

— Entonces me iré contigo.

— No, no tienes por qué.

— Si tengo por qué — Christopher tomó las manos de Félix — Tu eres la razón, tu y tu hija... Los amo a los dos como si fueran mi familia, antes de ti no tenía nada, era un viajero con mi hijo sin saber que haber realmente, por obras del destino di contigo y si el quiso que estubieras en mi camino fue por algo, créeme cuando te digo que haría hasta lo imposible por estar a su lado... Y si te tienes que ir me iré contigo por qué se y siento que eres tú la razón de mis días y el resto de mi vida.

— Tengo que afrontar esto solo...

— Vamos a afrontar esto juntos.

Félix sonrió y dejó salir unas lágrimas, lágrimas que Chris limpió con sus manos.
Poco tiempo después, Félix se quedó dormido, Christopher los tapó a los cuatro y los abrazó protegiéndolos de todo el mundo, queriendo estar así por el resto de su vida.

UN VIAJE POR VALENCIA | Chanlix | Donde viven las historias. Descúbrelo ahora