Christopher era un hombre que ama la cultura, no más como a su pequeño hijo, siempre quería probar cosas nuevas, tanto en comida como en aventuras.
Valencia, uno de los destinos más bellos en el mapa de Christopher, sin embargo cuando conoce a un h...
- Papá, si sigues así vas a hacer un hoyo en el piso.
- ¡Estoy entrando en pánico! - gritó Chris asustando a su hijo.
- ¿Por qué? Desde ayer por la noche cuando dejamos a Félix en la entrada de su hotel te pusiste raro, realmente dijiste cosas raras.
- ¿Yo? - preguntó Chris - ¿Que dije?
Daniel lo miró con las cejas alzadas y rió - Pues verás.
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- Gracias por la salida Christopher y también gracias por el desayuno de hoy en la mañana.
- No fue nada en realidad, encontrarse amigos es lo mejor que te puede pasar - sonrió.
- Si tienes razón - rió.
Christopher por segunda vez sintió lo mismo que había sentido al tener a Félix entre sus brazos, con una sola sonrisa podía hacer efectos en el.
- Bueno, muchas gracias por acompañarnos, los vemos mañana - Félix se despidió.
- También me veo mañana - sonrió - ¡Quiero decir!... Buenas noches.
- ¿Okay? - Félix rió y entró con su hija - Adiós.
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- ¿Enserio dije "También me veo mañana?" - preguntó.
- Si eso fue lo que dijiste - Daniel rió - Veías a Félix de la manera en que ese matrimonio se miraba en la plaza - informó.
- ¿Cómo?¿Como enamorado? - preguntó Chris.
- Entonces sabes de lo que estoy hablando - Daniel rió cuando Chris se quedó en trance y luego sus mejillas se colorearon de rosa - ¡Lo sabía!¡Te gusta Félix!
- ¿Y- y que quieres que haga? - preguntó - Nos conocemos hace un par de semanas, no puedo llegar y decirle "Oye me gustas, salgamos" - Daniel puso una cara que decía obvio - ¿Qué? No...
- Solo invitalo a una cita, vayan a las valsas donde me llevaste el primer día aquí, es muy lindo y de noche más, llévalo a cenar al restaurante se tres pisos.
- ¿Seguro? - Daniel asintió - ¿Y si no quiere?¿Y si me dice que no?
- ¡Solo hazlo papá!¿Que es lo peor que puede pasar?
- Si Chaewon, podría ser pero ¿Con quién se quedan ustedes? - argumentó Félix - Hasta donde yo se no se llevan hijos a las citas.
- La señora recepcionista del hotel es un amor, nos podemos quedar aquí con ella pero anda ¡Papi se que te mueres por invitar a Christopher a salir!
- ¡Pero no puedo mi amor, por qué el ya tiene a alguien en su vida ¿Cómo explicas que tiene un hijo?
- Pero si tiene a alguien ¿Por qué no está con ellos?
Félix pensó.
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En la noche de ese día, Christopher se paró en la puerta del cuarto donde se alojaba Félix, sintió un toque en su pierna, era la mano de su hijo dándole ánimos, respiró hondo y tocó la puerta.
La perilla giró y Félix se asomó en la puerta junto con su hija, ambos sonrieron para luego saludar.
- Tu... ¿Quisieras salir conmigo está noche?¿A una cita?
- ¿Yo?¿Contigo?¡Enserio ya te fuiste por ese lado?¡Por supuesto que no!¿Por qué querría salir contigo?¡Eso es lo que me molesta de tener amigos, por qué más tarde se enamoran y te invitan a salir, tengo una hija!¿Que me crees un fácil?
Félix cerró la puerta en la cara de Chan.
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- ¡Papá!¡Papá!
La voz de Daniel sacó a Christopher de su mente, sacudió la cabeza y miró a su hijo.
- ¿Q-que pasó? - preguntó.
- ¡Eso es lo que yo pregunto!¿Que te pasó? Te quedaste viendo la puerta como si fuera la cosa más interesante del mundo! Solo toca e invitalo a salir.
Christopher suspiró y tocó la puerta, al instante una cabellera peli-plata se asomó con una sonrisa.
- Hola Chris - Félix sonrió - ¿Que te trae por aquí?
- Buenas noches Félix... Amm... Perdona el atrevimiento pero yo quisiera saber si te apetecería salir conmigo esta noche - preguntó cerrando sus ojos.
- ¡Si claro! - rió - ¿Nos esperan? Tengo que alistar a Chaewon y yo tam-
- A-ah en realidad - Chris interrumpió a Félix - So-solo seríamos nosotros dos... Una cita.
- Tu y yo- eh... Un momento.
Félix cerró la puerta y volteó para ver a su hija, ambos festejaron en silencio que Chris le pedía a Félix una cita. Luego de el pequeño festejo, Félix tranquilizó su emoción y abrió la puerta otra vez.
- Me encantaría, iré a arreglarme, pasen.
Félix invitó a pasar a los chicos y los dejó en el sofá del cuarto, el fue a la habitación y comenzó a cambiarse. Una cita. ¡Tenía una cita con Christopher!
