- Capitulo 23 -

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No sabia que significaba ese sueño pero al menos dejaria de soñar esas cosas, empezaban a dar algo de miedo. 

Decidi despertar a isa de la manera mas amable posible. 

Exacto le grite en la oreja. 

Ella se resbalo de la cama y ahora se encontraba en el suelo.

Me miro con enojo y sabia lo que tendria que hacer ahora. 

Inicie a correr escaleras abajo descalza, no tuve tiempo de colocarme las pantuflas asi que ahi me veian corriendo por la casa teniendo a una chica demente por detras, no se que le habre hecho para merecerlo. 

Bueno...

No me digas. 

Llegue a la cocina y me escondi detras de la tia Julieta. 

Isa no tuvo mas remedio que guardase el enojo y no hacerme nada y yo mientras  le sacaba la lengua de manera infantil pero madura a la vez. 

Aya ja

No podria dañarme asi que era una victoria. 

-- Niñas ya dejen de jugar, salgan al comedor -- dijo la tia Julieta ajena a nuestra pequeña pero sumamente importante discusion 

Isa solo un poquitin enojada conmigo se dirigio al comerdor que quedaba a fuera. 

Habia una gran mesa con comida como de costumbre y dos Dolores sirviendose comida. 

Muy hermosas pero una se servia mas que la otra y nadie parecia darse cuenta. 

-- Camilo, deja de finjir ser Dolores para repetir -- dijo el tio Feliz en un tono de reproche.

Volvio a ser Camilo y luego se fue con mucha comida. 

Yo me rei un poco y negue con la cabeza. 

Me sente entre Dolores e isa. 

Todos estaban tranquilos mientras que recibian algunas ordenes de lo que hacer en el pueblo y contando uno que otro chiste. 

Hasta que siento una mano en mi muslo. 

De arriba a abajo sobando y tanteando el terreno. 

Dolores ni quien te viera. 

Atrevida. pense

No me quejaba en realidad, era placentero. 

-- Te encuentras bien? -- dijo el tio Agunstin -- te ves roja, estas enferma? 

Ay no. 

Nadie lo noto pero ahora todos me estaban observando. 

Observe a Camilo y miraba como sus cejas subian y bajaban con una sonrisa juguetona. 

-- N-no solo que el calor me ha pegado algo fuerte -- dije nerviosa y parecieron creerlo ya que me pasaron un vaso con limonada con extra de hielos. 

Dolores siguio con su suave masaje pero note que empezo a subir.

Ah no mija, aqui no. 

Le pare la mano y muy pero muy bajito le dije ' aqui no chiquistriquis ' 

Ella se rio levemente y retiro su mano.

Terminamos de comer y fui a lavar los platos. 

-- Luisa te toca ayudarla -- dijo la señora Alma. 

Carajo, no puede ser. 

Señora con todo respeto me cae mal y ahora peor. 

Luisa asintio y a paso silencioso nos dirigimos hacia la cocina con los platos. 

Ecos De Amor (Dolores Madrigal x tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora