Volvieron a adentrarse a la habitación y Zayn volvió a sentarse en la orilla de la cama mientras dejaba sus cosas, por su parte, Liam se sentó y comenzó a comer su mitad de sándwich que le había quedado.
— Bien, Carson es un dolor en las bolas y parece que me odia porque siempre me pone malas notas aunque me esfuerzo en hacer los trabajos de la mejor manera posible. — rodó los ojos. — ¿Por donde empiezo?
Zayn estaba terminando de ver, casi horrorizado los trabajos del castaño. En verdad necesitaba ayuda.
— Por el principio. Lo siento pero, esta todo mal, Liam. ¿Siquiera sabes lo que es lo biología? Porque creo que has creído que estabas en otra materia. — intentó no sonar brusco, pero sus palabras salieron antes de pensarlo mejor.
Payne frunció el ceño y bufó.
— Tampoco me lo digas así. — se quejó girando su rostro de manera ofendida, mostrando un leve puchero.
El moreno lo observó y mordió su lengua mientras agachaba la cabeza y escondía la sonrisa, intentando detener esa sensación en su pecho por aquel simple y estúpido gesto.
— Lo siento. Bien. Te ayudaré a completar esto. Empecemos por el trabajo del sistema endocrino. No has hecho nada en este.
Chasqueó la lengua.
— Ah, es que no entendía lo que tenía que responder. No entendí el tema.
Negó.
— Bien. Entonces, empecemos a completar este. Luego comenzaremos con otro. Creo que una semana y media nos va a alcanzar para completar todos los trabajos.
— De acuerdo. Hagámoslo.
[...]
Los efectos de los calmantes ya habían abandonado su sistema hace ya media hora y realmente estaba sufriendo en esa posición intentó disimular su dolor de la mejor manera posible.
— ¿Has entendido cual es la función del sistema endocrino en nuestra anatomía, Liam? — preguntó, mientras llevaba con algo de disimulo su mano y masajeaba su costado, tratando de alivianar el dolor.
Payne se puso derecho y rascó su ceja antes de asentir.
— Si. ¿Debería escribir todo o solo hago un resumen y ya? Creo que con un resumen corto ya quedaría bien.
Suspiró, odiando la acción al instante y apretó sus dientes.
— Has un resumen pero que sea bien elaborado. — contestó con dificultad. No tuvo más remedio que ponerse de pie. — ¿Te... Te molesta si voy al baño un segundo?
Liam le observó y negó.
— No, ve tranquilo.
Zayn apretó el lugar donde le daban esas puntadas y se apresuró a encerrarse en el baño. Una vez allí, se colocó frente al espejo y con cuidado levantó su camiseta, soltando un jadeo cuando vio los cardenales morados y verdes en el costado de su abdomen.
Apretó sus dientes con impotencia, enojo y dolor. Colton se había pasado esta vez.
Estaba más que seguro que tenía una o dos de sus costillas quebradas.
— Maldito hijo de puta. — dijo con su voz temblorosa.
Se tomó unos minutos para intentar regular su respiración y quitar las traicioneras lágrimas de sus mejillas
Salió de la habitación y con cuidado volvió a su lugar. Ahogando un grito cuando otra puntada fuerte le golpeó.
— ¿Lo has escrito? — preguntó con su voz forzada.
— ¿Hey, estas bien? — preguntó Liam, viéndole con preocupación. — ¿Zayn?
— Estoy... Estoy bien. — carraspeó su garganta. — Solo estoy un poco cansado. Pero sigamos.
Negó.
— No, no. Podemos seguir mañana. ¿En serio te sientes bien? — volvió a cuestionar. — ¿Te duele algo? Sé que has dicho que podrías morirte y que me daría igual. Pero en serio, no te ves bien.
