7 pm.
Me encontraba cenando con papá y mamá. Un rico arroz chino que papá compró en un restaurante no muy lejos de casa. Acompañado con gaseosa. Me faltaba poco para terminar mi cena.
Papá contaba lo que había pasado esa tarde en el trabajo. Héctor, uno de los compañeros de trabajo de papá, le pidió matrimonio a su esposa- compañera de los dos hombres- ramo de rosas y un mini cupcake en el plato que le hacía la pregunta "¿Quieres casarte conmigo caramelito?". La mujer aceptó con lágrimas en los ojos. El almuerzo fue brindado por el jefe, quien estaba feliz por dos de sus trabajadores.
Mamá, por otro lado. Hablaba sobre el supermercado. En la fila, la señora de adelante le decía a la que parecía ser su hija, que estaba contenta por la noticia de que su cantante favorito viniera a su ciudad. Mamá atenta al nombre dió un brinco de emoción. Venía Chayanne. ¿Qué tiene ese hombre para volver locas a las mujeres?.
Ni idea.
Preguntaron cómo me iba en la universidad. Les dije que bien, y la verdad es que si me iba bien.
Mí teléfono vibró.
Un mensaje.
-Me retiro mis queridos bellos padres. Feliz noche- abrazando a cada uno.
La pareja me dió sus buenas noches con un cálido abrazo acompañado.
Ya en mi habitación, desbloqueé el teléfono y al entrar a Whatsapp, la notificación de mi serie me llegó. Eran nuevos capitulos. La tentación me ganó.
10 pm.
Ví tres capítulos. Mundial la serie, se puso más interesante que nunca. Paso los canales y dejo caricaturas animadas. Agarro el teléfono nuevamente. Me tapo con el cubrecamas, tengo frío. El mensaje que me llegó era de un número desconocido.
Desconocido: Hola
Yo: ¿Quién eres?
Desconocido: Alguien
Yo pensé que era algo.
Yo: ¿Quién eres?- vuelvo a preguntar.
Desconocido: ¿Pista?
Visto.
Desconocido: Una sola palabra
Visto, otra vez.
Desconocido: Agrega mi número Hielito
Ah. Sí. Zander.
Yo: Hola Zander, ¿quién te dió mi número?
Zander: Averígualo
¡Usó mi palabra contra mí!. Que astuto.
Claro está que Omar y Dahlia no darían mi número sin consultarme.
Da igual, ya lo tenía
Fiu fiu
Adiós consciencia
Zander y yo hablamos un buen rato sobre la vida, estudios, nada interesante. Su humor y carisma eran estupendos. Me reía demasiado al otro lado de la la pantalla.
11 pm.
Empezamos a enviar audios. No me gustaba mi voz en los audios, parecía la voz de una niña de once años. Pero con Zander, era la excepción.
En cambio, la voz de él es perfecta. Si presencial era espectacular imagínate en audio...
Le hablaba sobre la serie que ví hace un rato. Dijo que no tenía idea de cuál era. Pero que la descripción de esta se escuchaba misteriosa al yo explicársela.
12 pm.
Yo: Son las doce Zander
Zander: Si no me dices no me entero
Yo: Buenas noches
Zander: Buenas noches McCloud ;)
Tres horas y cuatro minutos estuve chateando con el chico. Me hizo sentir tranquila. Apenas nos estábamos conociendo pero, siento que conectamos con muchas cosas.
Una persona no se conoce de la noche a la mañana, la confianza no es algo que se pueda depositar en cualquiera. Pero Zander Walker contaba su vida en resumen y yo la mía. Salía un tema y respondíamos de lo más normal. Las preguntas no eran incómodas, chatear con él no era aburrido.
Apago la luz dejando la lámpara encendida. Cubro mi cuerpo con el cubrecamas. Cierro los ojos para tratar de dormir y dejar que mi mente viaje por lugares conocidos o desconocidos.
Sonó una notificación. Instagram.
Zander_W Te empezó a seguir
Al parecer alguien andaba stalkeando.
Mi dedo pulgar toca su perfil.
Catorce fotos publicadas. 2k seguidores.
La curiosidad invadió mi mente. Salgo de la app para irme a la otra. Pulso el primer chat.
En línea.
Yo: ¿Sigues despierto?
Zander: Pensé que ya estabas dormida Hielito
Yo: Iba a dormir cuando una notificación de Instagram me llegó. Tu notificación mejor dicho
Zander: ¿Stalkeando McCloud?
Yo: ¿Qué? No, mucho menos a tí
Ajá
Zander: Bueno acosadora, el sueño me invade. Hasta mañana
Yo: Tú eres el que revisaba perfiles privados
Zander: No vayas a soñar conmigo Hielito
Zander
Última vez a las 12:32 amDesactivo el wifi y cierro los párpados. Mis horas exactas de sueño fueron interrumpidas por aquel chico.
En fin, solo fue una simple conversación con un estudiante de Clarksin.
Y nuestro futuro esposo
Cállate
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Cuando la Imaginación se Desborda
RomantikHay cosas buenas como otras malas. Hay personas que les gusta adentrarse en otra realidad para salir de la suya. Hay veces que es mejor solo imaginar. Esta es la historia de Tammy McCloud y Zander Walker. Unos jóvenes viviendo la vida al máximo y am...