26🌸Algodón

70 13 1
                                    

- ¿Otra vez?

Tanjiro se revolvió incómodo. Aoi sabia que venia una excusa de camino acompañada de la terrible mueca que realizaba el Kamado cuando intentaba mentir, y sinceramente ver esa mueca al menos una vez a la semana era demasiado para sus ojos.

- No importa, déjalo pasar.

Agradeciendo la comprensión de Aoi, Tanjiro realizó una leve reverencia antes de dejar que su atolondrado amigo pasara a la enfermería.

- Deberías cuidarte – comenzó Aoi, percatándose de que el jabalí ni la miraba – ya que – protestó en voz alta – ni me escuchas. ¿Qué fue esta vez?

Torceduras, rasguños, fracturas.

¿Lo hacía intencional? Pero si se trataba de Inosuke tenía derecho de dudar.

Era por Tanjiro? Últimamente cuando su amigo hacía de las suyas, él se limitaba a retirarse para hablar con Kanao. Y si Inosuke no traía alguna herida, solo se trataba del chequeo mensual de ambos.

Cuando levantó la cabeza ya cansada de tener que dudar de ambos, una mirada estaba fija en él.

- Rasguño – mencionó sin gritar. Lo que confirmó a Aoi su teoría – Acabo de ignorar al “rey de la montaña” y no grita… no grita desde hace una semana… ¿La medicina que tomó el mes pasado era incorrecta? No… Según Hinatsuru-san una vez Zenitsu consiguió que Inosuke se desempeñara como subordinado suyo para algo acerca de unas termas. ¿Intentará algo parecido para acercarse a Nezuko-chan sin interrupciones?

Escuchó un bufido cerca de ella.

Sea lo que sea, tentar su suerte era algo arriesgado. La paciencia de Inosuke era demasiado pequeña.

- ¿La herida está en tu brazo? – cuestionó antes de pedirle que se retirara el vendaje que Nezuko le había colocado. – un vendaje bien hecho, como era de esperar de mi discípula.

Inosuke abrió la boca comenzando a protestar.

- Le dije a Tanuko que no era necesario. Estuve en peores condiciones y las heridas se me curaban tranquilamente con la respiración total. Esto es solo un rasguño – recordando como Nezuko prácticamente lo amenazaba de que no probaría tempura de por vida si no iba con Aoi, Hashibira tembló – ¿Quién fue el idiota que dijo que los amables no dan miedo cuando se enojan? Inosuke-sama partirá en mil trozos al imbécil que dijo eso.

Aoi asentía a todo sin darle mucha importancia. Pero cuando vio la herida.

Sintió miedo y dolor ajeno de tan solo mirarla.

- Esto no se acerca para nada a un rasguño

La herida no era de urgencia extrema... pero si era preocupante.

- Cómo… - aún consternada por la cortadura - ¿Cómo paso?

-          Exploración – fue la respuesta del año.

Una visita una vez a la semana.

Exactamente una semana, era demasiada coincidencia ese tipo de respuesta.

Se daría una semana libre para ir a enseñarle a Nezuko como tratar esas heridas.

- Inosuke, si me respondes con sinceridad esta pregunta – colocando alcohol en la herida de forma cuidadosa, sujetó sus manos seriamente - te prometo dar tempura cuanto quieras.

- ¿Cuánto quiera? – preguntó Inosuke con los ojos brillantes.

- Cuanto quieras, ¿Es una promesa? – propuso con la intención de resolver eso lo más pronto posible.

Fictober🌸 Demon Slayer 🌸2021🌸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora