Capítulo 2: Dios ¿Me extrañaste?

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99 días antes de la lesión. Casa de Diana del Castillo. Lyon, Francia.

Seguí a Valentia hasta entrar a mi casa, no me sorprende pero absolutamente nada que ella sepa como entrar por donde y como.

1. Porque ella está en este momento siendo mi jefe de seguridad y siempre hace las cosas perfectamente bien desde el inicio.

2. Dumas construyó esta casa, debe espiarme a diario con el Athos.

Al cruzar la puerta veo a mi novia hablar con alguien pero desde mi posición no logro ver bien quien es, así que decido llamar su atención antes de llegar al recibidor donde ella se encuentra hablando con la misteriosa persona.

Gigi. – Digo logrando que voltee a verme y cuando lo hace veo a la mujer que el día anterior estuvo por aquí perturbando mi paz mental.

Sus ojos se clavaron automaticamente en la mujer a mi lado, por un lapso mayor al que pasa alguien reconociendo personas aisladas. 

No sé porqué, sentí como si se conocían...

Usted otra vez. – Hablo mientras veo a Valentia llegar pararse a mi lado y reírse de mis palabras. – Creí que había quedado bastante claro, que no quería verla por acá.

Valentia MacQuoid. – Comenta ella ignorando completamente lo que acababa de decir.

Valen estaba ahí solo ignorando el hecho de que esta mujer que supuestamente ella no conocía, ya le caía muy mal, para que su sonrisa no se viera falsa. 

Estoy segura que esa es la técnica que usa en este instante, porque es su favorita.

Si soy yo. – Comenta estirando su mano hacia la mujer. – ¿Me conoce por empresaria o por expresidiaria?

Helena Honefoss. - Dice la mujer sonriendo a las palabras que Valen acaba de pronunciar. - Soy socia de tu padre, un porcentaje menor...

Ian ni suele ser mi persona favorita. – Responde esto riendo bastante sarcástica esta vez. 

Se le ve.

Luego de eso se instaló un silencio incomodo en la sala. Automáticamente mis ojos fueron hacia Gigi intentando entender cómo es que la dejó entrar, así sin más nuevamente a la casa. Y reparé en lo particularmente bella que luce, llevaba una falda de tuvo negra y una camisa naranja con un escote increíble. 

Ok acabo de recordar porque ella me gustó tanto desde el primer segundo que la vi. 

Mi mente viajaba en aquella maravillosa mujer que estaba ahí solo pidiéndome disculpas con la mirada, hasta que comienzo a escuchar esa desagradable voz de nuevo.

Diana la verdad, vine a disculparme por mi actitud el otro día. – Comienza la mujer mayor en la sala a hablar. – Sé lo duro que debe ser esto para ti. - Continua mientras comienza a dar pasos hacia mí. - Mi actitud fue terrible, de verdad lo siento...

Vale la disculpo – Hablo sarcástica. – Ahora puede irse. - Finalizo señalando la puerta detrás de nosotras. 

Valentia automáticamente se colocó defensivamente delante de mí a medida que veía a la mujer acercarse.

Quiero que sepas de mi boca nuestra historia, quiero ayudarte a recordar. - Comenta viendo a Valentia y sonriendo por su movimiento dando un paso atrás. - Solo dame 10 minutos – Finaliza casi suplicante.

Natt dijo que podría hacerte bien. – Habla Gigi por primera vez desde que llegué. – Mi amor por eso está aquí yo la llame, habla con ella. - Dice bordeando a ambas mujeres para llegar a mi lado. - Por mí.

La última obsesión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora