Profesor Stark

CAPÍTULO 19

Cuando Steve despertó se encontró con la no tan grata sorpresa de que el genio no estaba con él, suspiró con pesadez.

———Joven Rogers, el señor Stark fue a darse un baño y me preguntó ¿que si gustaba ordenar algo para comer?———

———Mmm... no sé... pide algo que a Tony le guste——— respondió el rubio

———De acuerdo———

Steve miró con detenimiento las escaleras dudando si subir o no, moría por ver al genio, habían sido tan solo pocas veces lo momentos lujuriosos y Steve moría por tener más que eso, pero sabía que Tony no daría su brazo a torcer tan fácilmente con ese tema, suspiró con pesadez resignandose a conseguir algo más por parte del genio.

Tony iba saliendo de la ducha tarareando su canción favorita y bailando en el proceso.

———Bailas bien——— lo halagaron.

———Mierda——— dijo por el susto y suspiró de alivio al observar de quién se trataba ———Rogers no hagas eso, casi me provocas un infarto——— lo regaño y Steve sonrió.

———Le dije a Jarvis que ordenará algo que te gustará——— informó.

———En ese caso almorzaremos hamburguesas——— dijo con una sonrisa, Steve miró de pies a cabeza al genio y este solo traía una bata de baño y una toalla.

———¿Estás bien?——— preguntó el genio.

———Si, es solo que nunca he podido ver bien tu reactor——— dijo con algo de vergüenza, Tony sonrió con dulzura y se acercó al rubio, Steve lo miró confundido.

———Adelante, puedes verlo——— dijo con nerviosismo, la cara de Steve era de asombro y con las manos temblorosas abrió parte de la bata dejando al aire el reactor.

Steve lo miró con detenimiento, no era capaz de entender cómo era su total funcionamiento, pero lo único que sabía era que eso mantenía vivo al genio, Steve lo tocó con delicadeza temiendo lastimar o dañar algo, siguió delineando hasta que una pequeña idea cruzó por su mente, abrió un poco más la bata, se inclinó y besó el reactor y susurro un "gracias" Tony estaba completamente embobado con el gesto, era la primera vez que no sentía asco por esa parte de él, siempre pensó que Steve odiaria esa parte, pero era todo lo contrario, no puedo evitar abrazarlo, Steve correspondió el abrazo y estuvieron así por un largo rato, hasta que el genio recordó que no traía nada y rápidamente se separó del rubio.

———Bésame——— susurro el rubio.

Y él no pudo resistirse más y besó con mucha devoción aquellos labios que sin el más mínimo esfuerzo lo provocaban. Aquel beso comenzó lento demostrando la devoción que el genio sentía por el rubio, demostrando lo mucho que lo quería, Steve gimió al sentir la suave lengua del genio rozar sus labios y sin pensarlo abrió su boca dándole acceso, la lengua de Tony exploró toda la cavidad bucal del rubio, ganando leves gemidos. Una vez Tony se separó del rubio lo miró con evidente confusión, era obvio que esperaba mucho más que ese beso.

———Me cambiaré para que podamos ir a comer——— dijo con mucha normalidad el genio, cuando trató de alejarse el rubio tomó de su bata.

———Tony...——— lo llamo.

———¿Dime?———

———Quiero hacerlo——— dijo con firmeza, el genio se paralizó al escuchar aquello ———Quiero hacerlo contigo——— repitió.

———No——— respondo de forma cortante.

———¿No?——— respondió con incredulidad.

———Ya dije, por cuestiones legales no puedo hacerte nada, no hasta que cumplas 18 después de eso podremos hacer todo lo que quieras——— respondió.

———Tony, por favor, soy muy consciente de la situación soy yo quien te lo está pidiendo———

———Pero soy yo quien toma la última palabra y mi respuesta es no———

———Pero...———

———Pero nada——— lo interrumpió ———Tú mismo dijiste que los adolescentes son hormonales y que se dejan llevar——— Steve lo miró con enojo ———Enojate todo lo que quieras, pero no cambiaré mi decisión———

———Bien——— respondió el rubio de forma cortante para después salir de la habitación.

Tony se dejó desplomarse en la cama, esa discusión había agotado toda su energía y el poco raciocinio que le quedaba, Steve lo estaba tentando demasiado, pero no se podía dejar llevar, tenía que mantenerse sereno y con los pies sobre la tierra.

Cuando Tony llegó a la sala se percató que el rubio no se encontraba, suspiró con pesadez, en verdad se había molestado con él, pero no podía hacer mucho en ese caso, es un adolescente y es lógico que se moleste cuando no consiguen lo que quieren, Tony masajeo su cien, Steve le daría más problemas de migraña de los que padecía, suspiro y optó por trabajar en algún proyecto con tal Steve entraría en razón tarde o temprano y regresaría a sus brazos...