🦴 5 🦴

4.3K 235 18
                                    

Al día siguiente tuve que tirar a Lydia de la cama para que lograse levantarse.

— Lydia, sé que eres un genio andante, pero debemos ir a la escuela — le dije una vez que se levantó

— Lo sé, lo sé —

Mientras íbamos en su auto recibí una llamada de Stiles, al parecer ellos ya estaban allí.

— . . . ¿Verdad que debe de quedarse encerrado por la luna llena? — dijo Stiles al otro lado del celular

— Si, Scott, Stiles tiene razón, sigues siendo... ya sabes — me giré a ver a Lydia que estaba poniéndose labial

— Enserio, no es como la vez pasada, no me siento igual — comenzó a decir Scott, desesperado

— Ah, ¿eso incluye la necesidad de matar y mutilar personas? — ironizó mi hermano

— ¿Cómo nosotros? —

— Juro que no tengo la necesidad de matar ni mutilar personas —

— ¿Sabes? Dices eso ahora, pero cuando la luna llena salga y con ella los colmillos y las garras y haya muchos aullidos y todos corramos. Eso es muy estresante para nosotros — dijo Stiles desesperado, también

— Conclusión: si te vamos a encerrar — dije desde mi asiento del auto de Lydia

— Si bien, me siento más controlado ahora porque todo va bien con Allison —

— Si Scott, ya sabemos que todo va bien con Allison — dijimos frustrados

— Muy bien — repitió con una sonrisa

— Si, gracias. Lo sabemos —

— De verdad, muy bien — hizo un sonido raro, al igual que su voz

— Bien, de acuerdo, entendemos — le gritó Stiles

— Pero por favor ya cállate antes de que queramos matarnos y mutilarnos nosotros mismos — Stiles río del otro lado mientras yo intentaba no vomitar

— Bien, de acuerdo. ¿Consiguieron algo mejor esta vez? —

— Si mucho mejor — 

Escuché como Stiles abría su casillero al mismo tiempo que una cadena caía, o al menos eso se escuchaba. El sonido duró varios minutos, se podían escuchar las risas de los demás jugadores de Lacrosse y del chicle que el entrenador masticaba mientras hablaba.

— Una parte de mi tiene duda, la otra parte dice que saber será más perturbador de lo que nunca jamás imaginé, así que, solo me alejaré — 

No lo evité y solté una risa, haciendo que Lydia se asustara y su delineador se corriera.

Me miró muy mal, demasiado mal.

— Muy bien — dijo Stiles apenado

— Sabia decisión entrenador — le dije mientras me seguía riendo

— Tú cállate y llega pronto — sin más me colgó

— ¿Te he dicho que tu hermano es raro? — mencionó Lydia mientras estacionaba su auto

— No, pero es algo que sé desde hace tiempo —

Al bajarnos del auto nos encontramos con Allison.

— Hola — nos abrazó a ambas por los hombros

— Hola, cuñada — 

Me gustaba llamarla así, aunque no lo fuéramos.

Cielo Sin Estrellas [Isaac Lahey y tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora