Capítulo XXIV

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Harry dejó también la pluma. Acababa de predecir su propia muerte por decapitación. Naum esperaba a que Scamander leyera su trágico mes, pero a ella no le interesaba.

-¿Qué hay en la caja?-inquirió Scamander, señalando hacia ella y devolviendo el pergamino al chico.

-Es curioso que lo preguntes-dijo Hermione, dirigiéndole a Ron una mirada desagradable.

Levantó la tapa y les mostró el contenido. Dentro había unas cincuenta insignias de diferentes colores, pero todas  con las mismas letras: «P.E.D.D.O.»

-¿«Peddo»? -leyó Harry, cogiendo una insignia y mirándola-. ¿Qué es esto?

-No es «peddo»-repuso Hermione algo molesta-. Es pe, e, de, de, o:«Plataforma Élfica de Defensa de los Derechos Obreros.»

-No había oído hablar de eso en mi vida-se extrañó Ron.

-Por supuesto que no —replicó Hermione con énfasis-. Acabo de fundarla.

-¿De verdad?-dijo Ron, sorprendido- ¿Con cuántos miembros cuenta?

-Bueno, si vosotros os afiliáis, con cinco-respondió Hermione.

-¿Y crees que queremos ir por ahí con unas insignias en las que pone «peddo»?-dijo Ron.

-Pe, e, de, de, o -lo corrigió Hermione, enfadada-. Iba a poner «Detengamos el Vergonzante Abuso de Nuestras Compañeras las Criaturas Mágicas y Exijamos el Cambio de su Situación Legal», pero no cabía. Así que ése es el encabezamiento de nuestro manifiesto. -Blandió ante ellos el
manojo de pergaminos- He estado documentándome en la biblioteca. La esclavitud de los elfos se remonta a varios siglos atrás. No comprendo cómo nadie ha hecho nada hasta ahora...

-Hermione, métetelo en la cabeza -la interrumpió Ron-: a... ellos...les... gusta. ¡A ellos les gusta la esclavitud!

-Nuestro objetivo a corto plazo-siguió Hermione, hablando aún más alto que Ron y actuando como si no hubiera oído una palabra- es lograr para los
elfos domésticos un salario digno y unas condiciones laborales justas. Los objetivos a largo plazo incluyen el cambio de la legislación sobre el uso de la varita mágica y conseguir que haya un representante elfo en el Departamento de Regulación y Control de las Criaturas Mágicas.

-¿Y cómo lograremos todo eso?-preguntó Harry.

-Comenzaremos buscando afiliados-explicó Hermione muy contenta-. Pienso que puede estar bien pedir como cuota de afiliación dos sickles, que darán derecho a una insignia, y podemos destinar los beneficios a elaborar panfletos para nuestra campaña. Tú serás el tesorero, Ron: tengo arriba una hucha de lata para ti. Y tú, Harry, serás el secretario, así que quizá quieras escribir ahora algo de lo que estoy diciendo, como testimonio de nuestra primera sesión.

Hubo una pausa en la que Hermione les sonrió satisfecha, y Harry, _____(Tn) y Naum permanecieron callados, divididos entre la exasperación que le provocaba Hermione y la diversión que le causaba la cara de Ron, el cual parecía hallarse en un estado de aturdimiento.

-¿Le dirás?-susurro Naum hacía Scamander.

Ella negó con la cabeza. Su amiga estaba entusiasmada con su movimiento por defender a los Elfos, que no podía hablar con ella para hacerle entender que la naturaleza de esos seres es para servir a los magos. El silencio fue roto por un leve golpeteo en la ventana.

Harry miró hacia allí e, iluminada por la luz de la luna, vio una lechuza blanca posada en el alféizar.

-¡Hedwig!-gritó, y se levantó de un salto para ir al otro lado de la sala común a abrir la ventana.
Hedwig entró, cruzó la sala volando y se posó en la mesa, sobre las predicciones de Harry.

-¡Ya era hora!-exclamó Harry, yendo aprisa tras ella.

-¡Trae la contestación!-dijo Ron nervioso, señalando el mugriento trozo de pergamino que Hedwig llevaba atado a la pata.

Harry se dio prisa en desatarlo y se sentó para leerlo. Una vez desprendida de su carga, Hedwig aleteó hasta posarse en una de sus rodillas, ululando suavemente.

-¿Qué dice?-preguntó Hermione con impaciencia.

-¿Harry?-pregunto _____(Tn)

La carta era muy corta, y parecía escrita con mucha premura. Harry la leyó en voz alta:

Harry:

Salgo ahora mismo hacia el norte. Esta noticia de que tu cicatriz te
ha dolido se suma a una serie de extraños rumores que me han
llegado hasta aquí. Si vuelve a dolerte, ve directamente a Dumbledore. Me han dicho que ha sacado a Ojoloco de su retiro, lo que significa que al menos él está al tanto de los indicios, aunque sea el único.

Estaremos pronto en contacto. Un fuerte abrazo a _____(Tn), Ron y Hermione. Abre los ojos, Harry.

Sirius

Harry miró a los cuatro chicos frente a el, que le devolvieron la mirada.

-¿Que viene hacia el norte?-susurró Hermione

-¿Regresa?-murmuro Scamander

-¿Que Dumbledore está al tanto de los indicios?-dijo Ron, perplejo-. ¿Qué pasa, Harry?

Harry acababa de pegarse con el puño en la frente, ahuyentando a
Hedwig.

-¡No tendría que haberle contado nada!-exclamó con furia.

-¿De qué hablas?-le preguntó Scamander, sorprendida.

-¡Ha pensado que tenía que venir!-repuso Harry, dando un puñetazo en la mesa que hizo que Hedwig fuera a posarse en el respaldo de la silla de Ron, ululando indignada-. ¡Regresa porque cree que estoy en peligro! ¡Y a mí no me pasa nada! No tengo nada para ti-le dijo en tono de regañina a Hedwig, que abría y cerraba el pico esperando una recompensa-. Si quieres comer tendrás que ir a la lechucería.

-Hedwig-le llamo la chica-, toma, siempre los cargo conmigo.

La lechuza gustosa acepto el dulce que le tendía la chica Scamander, lo trago viendo con aire ofendido a Harry y volvió a salir por la ventana abierta, pegándole en la cabeza con el ala al pasar.

-Harry... -comenzó a decir Hermione, en un tono de voz tranquilizador.

-Me voy a la cama-atajó Harry-. Hasta mañana.

Todos lo vieron subir, estaba molesto. Ron le siguió, dejandoles a las chicas con Naum, quien preguntaba constantemente que pasaba y sobre todo quien era Sirius Black. Las chicas le contaron la historia de su ultimo año y Naum entendía poco a poco aun sorprendido de que incluso en Londres la seguían los problemas.

-¿Crees que se le pase pronto?-pregunto Hermione antes de irse a la cama

-No lo se-dijo Scamander sentada en la suya-, Harry es una de las personas que es un tanto impredecible, hay días en donde se vuelve loco de repente.

Su amiga asintió metiéndose entre las sabanas, ella le siguió y así ambas terminaron otro dia en la escuela.

La Chica Scamander y el Cáliz de Fuego.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora