Ella, profesora de infantil, él, perfilador del FBI. Son novios desde que tenían veinte y ahora van a dar unos pasos más.
Spencer va a presentar después de cinco años a sus compañeros de trabajo y ella, le va a presentar a sus compañeros de trabajo...
-¿Arianna Danvers?- pregunta mi ginecóloga y me levanto nerviosa- puede pasar, también si alguien la acompaña.
-Tranquila amor- dice Spencer en mi oído y asiento, ya no tiene escayola en la pierna, el disparo ya no tiene marca en su abdomen, pero aún necesita estar en reposo una semana más.
Pasamos a la consulta, nos sentamos en dos sillas y Spencer me da la mano.
-Señorita Danvers, cuando te hicimos la prueba pensabamos ya que no podías tener por una cosa que vimos, pero ayer desapareció, hicimos de nuevo el proceso y si, puedes tener hijos- me da un sobre, miro a Spencer y me abraza- veo que queréis tener hijos, ¿pero estáis seguros de dar una buena vida a un niño o niña?
-Si, estamos muy seguros- dice Spencer y ella asiente.
-Pues me encantaría estar en el proceso de tu embarazo Ari- me pasa una tarjeta- llama a este número cuando quieras que te haga una prueba...
-Gracias- digo sonriendo, meto la tarjeta en el sobre y salimos de la consulta.
Salimos del hospital, nos montamos en mi coche y respiro.
-Amor, que puedes ser madre- dice sonriendo y yo asiento- ¿te apetece ir a ver a mi madre?
-Claro cariño, pero volvemos pronto que tú deberías estar descansado- digo mirándole y el asiente.
Arranco el coche, pone el a Vivaldi y yo niego rotundamente.
-No pienso conducir una hora con Vivaldi- digo tensa y el se ríe.
-Es un disco con canciones que te gustan a ti y a mí, para tener un momento cada uno- dice sonriendo y yo asiento.
Termina de sonar la canción y pasa a una de las mías; me rehúso de Danny Ocean (multimedia).
-Me rehúso a darte un último beso, así que guardarlo, guardalo...- me río por lo siguiente y Spencer me mira raro- no te voy a traducir lo que dice.
-¿Te acuerdas aún del español?- pregunta sorprendido y asiento.
-Eso nunca se me va a olvidar- digo sonriendo y él asiente.
Se empieza a dormir, me fijo en la carretera y cuando me quiero dar cuenta ya estoy aparcando en el garaje del sanatorio y despierto a Spencer.
-Amor ya estamos aquí- le doy un beso en la frente y abre los ojos.
-¿Quieres pasar o te quedas aquí?- pregunta adormilado y yo sonrió.
-Me quedo aquí, se lo sensible que está y no quiero poner a nadie incomodo.
-Amor, mi madre creo que solo te recuerda a ti, cada vez que vengo pregunta por ti.
-Entonces venga- apago el coche, salimos y le cierro.
Entramos al edificio, vamos a la recepción y una chica le guiña el ojo.
-Hola Spencer, tu madre está esperándote- dice sonriendo la chica y yo la miro sería- me a dicho que se siente muy orgulloso de ti.
-Por que la dije por llamada que me había comprometido- dice sonriendo y me da la mano- Laila, te presento a mi prometida Ari.
Me mira con una mirada de que si las miradas matasen estaría muerta.
-Bueno, ya sabes dónde es- dice la chica sonriendo mientras le mira y el me guía.
Vamos a la sala de visitas y veo a Diana jugando al ajedrez.
-Jaquemate- dice Spencer y su madre la mira.
-Que corte de pelo te has echo- dice como cuando intenta saber quién es y yo bajo la mirada.
-Hola mamá- dice Spencer y ella sonríe.
-Hola Spenc- dice sonriendo, se abrazan y luego me mira- Hola Ari.
-Hola- saludo con la mano y ella sonríe.
-Que bonico el anillo, se nota que mi hijo te adora- dice sonriendo y yo asiento- por cierto, me contó Spencer lo de la cita con tu médico, ¿voy a ser abuela?
-Si, vas a poder ser abuela- digo sonriendo y ella asiente contenta.
-Aun que se me vayan olvidando las cosas, me voy acordando todavía, así que ver a mis nietos, sería algo increíble.
-Mama, aún no nos hemos ni casado, da la tiempo- dice Spencer sonriendo y ella asiente.
-¿Habéis puesto fecha?- pregunta y niego.
-Mañana la ponemos más tranquilos- digo sonriendo y ella asiente.
-Me gusta la sonrisa que tenéis los dos, pero Ari, ¿si sale un niño o una niña cómo Spencer le cuidarias?
-Con toda mi alma señora Reid- digo sincera y ella asiente.
-Como me cuida a mi- dice sonriendo Spencer y yo asiento.
-¿Os vais a mudar juntos?- pregunta de nuevo y miro a Spencer.
-Esa es la sorpresa mamá, hemos dado otro paso, vivo con ella- dice sonriendo y Diana sonríe de oreja a oreja.
-Genial chicos- dice sonriendo y yo asiento.
-Hey hola Spencer- dice otra chica sonriendo y me mira sonriendo- debes de ser su prometida, un gusto conocerte, soy Vee.
-Arianna- digo sonriendo y nos damos la manos unos segundos.
-Bueno, venía a ver qué tal iba Diana, la toca comer dentro de poco- dice mirando a los demás internados y se fija en uno- Jorge no mires así a la futura Reid.
-Genial Diana, tu familia se agranda- dice el chico viniendo a nosotros y mi suegra asiente contenta- hola soy Jorge.
-Arianna- digo sonriendo y él asiente.
-Un nombre muy bonito, para una chica preciosa- dice sentándose en frente de Diana y yo me pongo roja.
-Spencer mejor llévatela antes de que te cambie por otro- dice Vee y yo me río.
-No le cambiaria por nada del mundo- digo contenta y Spencer me abraza por la espalda.
-Haceis buena pareja chicos, ahora sí me disculpais tengo que llevarlos a comer- mira a Spencer- el sábado ya empezamos con un medicamento más fuerte.
-Vendre más de seguido- dice sonriendo y ella asiente.
-Pero también cuida de tu chica, que no me importa no verte durante dos semanas- dice Diana y yo sonrio.
-Mama, también tendré momentos con ella- la da un beso en la frente y me da la mano.
-Bueno, pues nos vemos otro día Ari- dice sonriendo Diana y yo asiento.
Salimos de allí, nos metemos en el coche y nos vamos a casa.
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