Capítulo 5.

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Capítulo 5: Pudín.

Los guardias de seguridad de la entrada apenas los vieron, sonrieron y no pusieron resistencia para dejarlos entrar, miraron a Harry pero Ben pronunció un "viene con nosotros" con los labios y asintieron.

El lugar se mantenía bajo la oscuridad, con apenas unas luces en el techo que iluminaban muy tenuemente las mesas, había una barra enorme y detrás de ésta había un bar de filas y filas de botellas de licor, un escenario se encontraba al extremo contrario del sitio donde habían unos jóvenes con instrumentos, moviendo cables y afinando. El ambiente estaba dominado por una gran nube de humo de cigarrillo y el olor a alcohol por todas partes de pronto se hizo extremo

—Ouh, hogar dulce hogar— la voz de Niall a sus espaldas los asustó a todos pero rieron cuando captaron lo que había dicho.

— ¿Cómo fue la mudanza?— preguntó Harry una vez que Niall le alcanzó el paso.

—Fue todo bien, no terminé de acomodar mis cosas realmente porque me dormí un rato— Harry rió.

—Bien, mañana será otro día para acomodar— sugirió Harry.

—Mañana Niall tendrá resaca— Lilo estaba a su lado con un cigarrillo casi inexistente colgando de sus labios.

—Sabes que eso no pasa, Lilo— de pronto la barra ya estaba frente a ellos, cada quien tomó un lugar en los bancos. Niall miró a Harry, se notaba nervioso—. ¿Qué ocurre, Ha?

— ¿Eh?— una pizca del Harry despistado—: Oh, no ocurre nada.

—Espera a que conozcas a Liam— sonrió Niall.

— ¿Liam?

—Es el dueño de éste sitio de perdición, el hermano de John. Son iguales pero a la vez tan diferentes. No sólo la edad— rieron.

— ¿Ellos se llevan bien?

—De maravilla. ¿Qué no ves? Hasta el nombre de sus negocios es parecido, ambos venden bebidas-

—La diferencia es que los clientes en el negocio de John son hipsters y los que visitan mi negocio son ebrios sin causa, como Niall— la voz de un tipo había interrumpido a Niall, un hombre joven estaba detrás de la barra. Tenía buen aspecto y su rostro resultaba levemente familiar, con labios rellenos, ojos tiernos y cabello castaño.

— ¡Oye! Sólo vengo una vez a la semana— reclamó el chico fingiendo haberse ofendido—. Haré como que no insinuaste que soy un maldito alcohólico y te presentaré..., Harry, te presento al causante de mi dependencia alcohólica -la cual es imaginaria, obviamente-..., Y Liam, te presento al British idiot, pero los amigos el decimos Harry.

—Diablos— murmuró Harry divertido, le tendió la mano a Liam y éste le dio un apretón de manos—. Niall no hace buenas presentaciones.

—Por eso me agrada...— Liam rió.

—A mí también— Niall los miraba con una cara muy seria mientras golpeaba la barra con sus dedos.

— ¿Puedes dejar la holgazanería y ponerte a trabajar, Liam?— Liam rodó los ojos ante las palabras de Niall— ¡Sírveme alcohol!

—Dios mío, Niall. ¿Qué les traigo, chicos?— preguntó al resto y estos le dijeron, luego el castaño se dirigió a Harry—: ¿Qué te traigo, Harry?

—Eh... Yo..., Tomaré lo que tome Niall— todos jadearon al escuchar la respuesta.

—Chicos, que tome lo mismo que tomo yo no quiere decir que va a tomar la misma cantidad, no sean paranoicos— Niall rodó los ojos y Liam rió.

British idiot. |L.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora