RETO OMEGAVERSE 2021

Día 23: Ojos de cachorro- Bunny

Summary:

Butters convence a Kenny de ir a la feria de la ciudad aunque él no tenga dinero usando sus poderosos y hermosos grandes ojos de cachorro. Kenny no puede pensar siquiera en decir que no.

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Habían estado discutiendo toda la mañana sobre cuáles serían los planes para su primer aniversario. Esta vez Kenny estaba algo corto de efectivo, más de lo usual porque a Karen le habían pedido dinero en la escuela para algunos nuevos proyectos y a Kevin no le había alcanzado el dinero por pagar las últimas mejoras del cuarto de su hermana.

Butters había planteado ir a la feria desde que vio el anuncio en la televisión de su habitación. Kenny no estaba muy convencido, no tenía dinero para disfrutar ningún juego con su Omega, ni siquiera tenía dinero para poder disfrutar de alguna chuchería del lugar porque en esos sitios el precio de la comida chatarra era más elevado que en cualquier otro lugar del pueblo.

—¡Vamos Kenny, yo invito esta vez!— Butters rogó, tomando a su Alfa por la parte superior de los brazos y sacudiéndolo para mostrar su entusiasmo.

—¿Por qué no sólo vamos al parque? Es más tranquilo y las frituras no cuestan más de 10 dólares.— Kenny mencionó, intentando que Butters dejara su necedad por la feria.

Tenía que admitir que igual quería ir, pero era más su prejuicio sobre qué dirían sus amigos si se enteraba que su Omega le pagaba las cosas porque él seguía siendo demasiado pobre para poder darle algo digno.

Butters frunció el ceño. No era como si quisiera forzar a Kenny a pagar con lo que no tenía, entendía perfectamente que su Alfa tuviera responsabilidades familiares que eran una prioridad para él por el momento, de verdad que lo entendía. Karen era la hermana menor de Kenny y tanto él como Kevin la amaban mucho. Incluso él se llevaba bien con ella ahora y a ella parecía agradarle bastante Butters.

Sin embargo no le gustaba que Kenny lo rechazara por vengüenza usando como excusa el no tener dinero por Karen y los altos precios de la feria. Bien, sí era algo un poco más caro que afuera, pero no tanto como para que sea imposible ir. No le quedaba otro remedio y miró a Kenny fijamente con una sonrisa traviesa antes de que este entendiera que lo que haría sería su respuesta para ganar/ganar.

—¡N-No te atrevas, Leo!— Kenny exclamó apurado, intentando evitar que Butters usara su arma secreta.

Pero eventualmente a Butters no le importó. Sus labios formaron un adorable puchero y sus pupilas se dilataron isocóricamente, reflejando la luz en pequeños puntos, haciéndolos irresistibles ante la mirada alfa de Kenny.

—Por favor, déjame invitarte a la feria sólo esta vez, Ken.— Butters suplicó nuevamente, asegurándose de sonar tierno e inocente para ganarse la afirmación del alfa.

Kenny gruñó, claramente intentando resistirse. Pero no pudo. Soltó un suspiro resignado y asintió derrotado.

—Bien, iremos a la feria ... Pero quita esos ojos de cachorro, me es imposible decirte que no con esos ojos mirándome de esa manera.— Se quejó el rubio alfa. Luego sonrió, cuando los brazos delgados y cálidos de su Omega lo rodearon en un abrazo de amor infinito y felicidad.

¿Cómo podría negarle algo a su precioso si lo miraba de esa manera tan insistente y lastimera? No era un alfa de piedra, era imposible resistirte a esa mirada tan característica de los omegas. Pero no estaba enojado, está bien, no le gustaba que Butters gastará su dinero en él, pero sabía que aceptando igual lo hacía feliz y cuando tuviera dinero se lo recompensaría. Mientras sólo le quedaba disfrutar su noche de aniversario con su Omega, disfrutar el maravilloso año que habían vivido juntos.