Tienes que dejarme ir

CAPITULO 2

La lluvia bañaba la aldea entera. Para cuando me di cuenta ya no había absolutamente nadie en las calles.

-Si sigues aquí te enfermaras- la voz de mi sensei me sobresalto. 

No lo esperaba.De hecho era la última persona que quería ver en esos momentos.

-No lo senti- murmure.

-Lo sé- se rasco la nuca-¿Esta todo bien? Estar tan sumida en tus pensamientos no es propio de ti- sentí sus pasos acercarse posicionándose a mi lado.-¿En qué piensas?

-En todo. En todo lo que ha sucedido hasta ahora. Sasuke con Orochimaru. Naruto con el maestro Jiraiya. Todos están tan...lejos...-la lluvia no parecía que fuera a detenerse, es más, a cada segundo se incrementaba- Kakashi-sensei ¿Puedo preguntarle algo?- vi como asintió de reojo- ¿Para usted qué significa la palabra hogar?

Cerré los ojos disfrutando del sonido de la lluvia al tocar el suelo, mi maestro soltó un suspiro para luego contestar.

-Interesante pregunta- una leve sonrisa se formó en el rostro del peliplata- Creo que llamas hogar al lugar en donde te sientes seguro, rodeado de la gente que amas y confías.

"Un lugar donde te sientes seguro" "Rodeado de la gente que amaba y confíaba"

En definitiva no me sentía segura en Konoha y con lo que leí era mas que obvio que me habían engañado toda mi vida, lo cual decía que tampoco podía confiar en ellos.

Ninguno cortó el silencio que se volvió a acentuar entre los dos, ni siquiera cuando me acompaño de regreso a mi casa.

-Kakashi-sensei- lo llame en un susurro casi inaudible.

Me giré hacia él y de improviso envolví mis brazos alrededor de su torso, lo cual lo tomó por sorpresa ya que se puso rígido unos segundos antes de devolverme el abrazo.

-Ha sido un gran maestro para mí- dije aferrándome más al peliplata.

-Tranquila Sakura- me acarició el cabello- Cualquier cosa que te preocupe, recuerda que yo estaré aquí para ti.Todo estará bien.

Desde que Sasuke se fue y Naruto lo siguió hace un año, sentí un vacío dentro de mi que Kakashi-sensei siempre trataba de llenar.

Él se había transformado en una especie de hermano mayor, preocupándose por mi y cuidándome en muchas ocasiones, aunque si no nos veíamos mucho ya que desde que me convertí en chunin la hokage en vez de mandarme a misiones fuera de la aldea siempre me mantuvo dentro de esta, muy por el contrario el Hatake pasaba muy poco tiempo dentro de la aldea, ya que estaba de misión en misión y a veces no lo veía hasta un mes lo cual aumentaba mi soledad.

Me separé lentamente de él y vi su único ojo visible curvarse hacia arriba por lo que supuse que me sonreía.

Después de unos segundos en silencio se despidió con la mano bajando lentamente las escaleras que daban hacia el final de mi casa hasta desaparecer completamente de mi vista.

Tal vez esa seria la ultima vez que lo vería.

Iba a abrir la puerta cuando esta se abrió estrepitosamente dejando ver a mi madre.

-Sakura- me estrujó entre sus brazos- Al fin llegas-

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-Kakashi- su voz denotaba extrañeza.

Se alzó de la silla acercándose lentamente a la ventana a su espalda, mirando la tormenta que se desataba afuera con aire preocupado.