Poesia Erotica con Jeon Jungkook||+¹8©

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Tan caliente me encontraba en este momento que no me importaba si despertaba a Jeon, eran alrededor de la media noche, mi mente lo único que pensaba era en la polla de mi novio, la necesitaba, en este momento sueno tal como una verdadera necesitada sexual.

Pues nena eso estás aparentando— me regaño

Mis pensamientos no me ayudaban para nada, solo se rondaban de Jeon y yo en la cama totalmente desnudos con su falo dentro de mi, rompiendo como en verdad lo necesito.

Metí mi mano abajo de mi shorts, dando leves caricias a mi intimidad, abrí más las piernas para darme más acceso.

Mi mano hacia círculos en mi clítoris, que se siente verdaderamente maravilloso, masturbe y masturbe, para llegar a más metí dos dedos dentro de mi, mis gemidos no eran callados por mi, y no importa, el placer que me estaba dando era realmente satisfactorio, las espamos estaban llegando y me retrorcia haciendo un leve movimiento —pero notorio— de la cama.

—No crees que deberías estár durmiendo, nena— dijo carraspeando la garganta.

Me asuste, a lo que di un pequeño brinco—Oh dios, Jeo.

—¿Quieres ayuda, linda?

—Deja de llamarme así, me pone demasiado y no ves como estoy—dije tomando la manta para cubrirme, pero jungkook se adelantó, me la quito de un tiron y la aventó a algún lugar de la habitación, se metió en medio de mis piernas quedando con un buen acceso.

Recorrió de un languentazo toda mi feminida, yo solo deje salir gemidos y tome fuertemente la almohada, después de tanto, tuve mi primer orgasmo dejando todos mis fluidos en su cavidad bucal.

Se levantó un poco de la cama para poderse sacar el shorts tan ligero que traía, para luego retirase su ropa interior quedando desnudo, busco algo, saco un preservativo y se lo colocó, jugó un poco con su falo en mi entrada, causando que me mojara mas y sin más se introdujo en mi, comenzó con los movimientos rudos a lo que gemidos sincronizados salían de nuestras bocas, la cama rebotaba con la pared, causando un ruido frustrante, que era lo menos que importaba ahorita.

Me tomo de las piernas para cargarme y me estampó contra la pared, para así seguir con las embestidas con ritmo.

—Me encanta lo apretada que estás — gruño en mi oído

1 embestida...

—¡uhm.! Tus tetas— apretó uno de mis pechos

2 embestidas..

—correte mami—

Y 3 embestidas...

Fue lo único que falto para que me corriera, al igual que el, se sentó en la cama, y me puso encima de el, acurrucada en el hueco de el cuello de Jeon quedé, mientras que l peinaba un poco mi cabello.

—La próxima vez, despierta me de una forma menos ruidosa, nena

—Dios basta Jeon— un leve golpe y baje, me coste, y al instante sentí el calor de Jeon a mi lado.

—Preciosa, no es cierto, me gustan tus gemidos.

(

Capítulo editado)