Mal padre!

Odiame si eso te hace feliz.

Esa tarde en el café para sakura fue solitaria.
Tenía la cara un poco apagada.
Tenía dos días preocupada por sasuke.
Sasuke era todo lo que podía pensar.
-te ves cansada- advirtió la señora Chiyo desde la puerta del local.
Llovía a cántaros.
-con este clima no habrá un solo cliente.
La chica pelirrosa permaneció ensimismada lavando los trastes.
Los huesos de la señor dolían a causa del frío.
Saco un cigarro de su delantal y comenzó a fumar. Un muy desagradable hábito pero ya nada podía hacer. Acostumbraba fumar todo el tiempo.
Sakura comenzó a barrer el lugar.
Era una chica muy limpia, nadie le tenía que decir sus labores. Ella era Capaz de hacer cualquier cosa necesaria para mejorar el local, de eso se había percatado la Sr., sobra decir lo bien educada que era.
-deja eso, ven a ayudarme.
Sakura dejó la escoba y se acercó al acto. La señora intentaba bajar la cortina.
-solo un poco más.
Ambas eran unas debiluchas pero se las arreglaron muy bien para bajarla.
-es enorme el charco que ya se hizo a causa de la lluvia.
-lo se. Es por eso que ya vamos a cerrar.
-de verdad??... Aún es temprano. Apenas son las 6:30
-lo se. Debo hacer unas cosas y aprovecharé esta tarde.
Vuelve a casa sakura. Mañana es tu día de descanso.
-de verdad?- dijo la pelirroja muy muy contenta.
-claro que si.
La señora chiyo estaba muy contenta con sakura. Había resultado una gran empleada. Por lo que no dudo en sacar un par de billetes para pagar la semana trabajada.
-te veré el lunes.
-muchas gracias.
Había sido su primer sueldo. Sakura guardó muy bien ese dinero. Debía ahorrar cada centavo.
A las 7 de la noche estuvo fuera del local con un paraguas verde agua en mano y nada que hacer.
Tomo el subterráneo. Y sin querer pronto estaba en el barrio donde vivía sasuke.
Se preguntó si sería muy impertinente de su parte llegar sin previo aviso.
Y entonces estuvo allí parada frente a la casa de sasuke. Sin atreverse a acercarse de manera dubitativa.
Y luego apareció la mamá de sasuke.
-sakura-Chan?
Las mejillas de sakura se pusieron tan Rojas que no pudo ocultar la vergüenza.
-buenas tardes- hizo una graciosa reverencia.
-sasuke está en su cuarto, pasa.
-yo... solo será un momento.
-está bien. El realmente está muy aburrido, te veré después sakura-Chan voy de salida... tomate tu tiempo.
Sakura dejó su paraguas a la entrada de la casa y luego de agradecer a la señora mikoto subió las escaleras hacia el cuarto de sasuke.
Toco con suavidad y como no obtuvo respuesta  se animó a entrar.
Sasuke estaba en su cama profundamente dormido.
Estaba acostado de lado, un mechón de cabello caí sobre su mejilla izquierda.
Se veía tan lindo, se limitó a sentarse en una silla que estaba aún lado pues fue incapaz de despertarle.
Miró por encima del escritorio. Permanecían los apuntes que le había traído dos días atrás.
Al parecer ni siquiera los había revisado.
El cuarto comenzaba a oscurecer. La tv estaba prendida en un canal de videos.
Cerró los ojos momentáneamente. Estaba cansada, y luego los abrió cuando escucho un leve quejido de sasuke.
Es como si tuviera malos sueños. O es que le dolía su brazo.
Se acercó preocupada hasta él y se sentó en la alfombra para poder darle un par de palmaditas en la espalda.
Luego de que se tranquilizó recargó su cabeza a su lado en el colchón, su mano tocó con suavidad la de sasuke y pronto se sintió cómoda y muy soñolienta, volvió a cerrar los ojos hasta quedarse profundamente dormida.
No pasó mucho para que sasuke sintiera la presencia de sakura.
Ella estaba allí como un sueño. Estaba cuidando de él.
-sakura estás aquí- susurró y luego se arrepintió de hablar. Pues no quería despertarla.
Se levantó de la cama sin hacer ruido. Y luego hizo un gran esfuerzo por cargar a sakura con su mano sana y subirla a la cama.
Ella parecía estar tan cansada que no despertó. Ni aunque la movió no despertó.
La tapo con su cobija y procedió a acostarse a su lado  y abrazarla como cucharita.
El clima era frío. Afuera llovía.
Pero adentro era cálido, muy cálido, el ruido de música de fondo hizo que ambos cayeran en un sueño profundo.
Estaba abrazándole de aquella pequeña cintura.
El cabello de sakura olía delicioso.
Y así pasaron un par de horas.
Tantas que cuando sakura despertó creía que estaba en su cuarto. Y luego cayó en cuenta que el pelinegro la tenía bien abrazada.
-sasasa...Ske-Kun... que horas son?
Sasuke se movió hasta tocar su celular que estaba sobre el buró.
-Son las 3 de la mañana.
-Dios mío!!! Dios!!! Me tengo que ir.
-son las 3, como piensas llegar a esta hora?? No hay transporte.
-no lo sé!! Caminando supongo- dijo parándose de la cama exaltada -Mi madre me matará!!!
Llega alrededor de las 6 de la mañana.
-está bien. Vamos a tu casa, te acompaño.
-seguro? Dios esto es tan vergonzoso. Me pregunto si tú madre sabe que yo...sigo aquí.
-no creo. No está.
-no está? ...es un alivio. No quiero que me vea salir de aquí... está bien si me acompañas?- Pregunto apenada.

Sakura tomó su mochila y Sasuke le pasó una chamarra del armario. Una muy abrigadora.
-ponte esa chamarra.
Sakura se puso la chamarra con gorra color negro. Luego se acercó a ayudar a sasuke a sobre poner la otra chamarra gris.
-por suerte esta amplia y puede cerrar con tu brazo doblado.
-es incómodo pero no es tan malo.
Cerraron la casa y luego salieron a la calle.

La noche era muy bella. El cielo completamente despejado se veían las estrellas y una luna nueva.
La falta de actividad cobraba estragos en las horas de sueño de sasuke. Prácticamente cualquier  momento del día podía tener sueño, insomnio por las noches.
Justamente a ese momento se sentía con toda la energía del mundo.
Caminaron por las calles desoladas. El ambiente era húmedo.
Sasuke estaba particularmente serio.
-por que no dices nada?
-no tengo nada que decir.
-siempre hablamos de todo y esta vez estás tan callado.
-ya te lo dije.
-tsk. Si no quieres hablarme me puedo ir sola.
La había llevado al límite. Sakura estaba tan molesta.
Se había adelantado dejando a sasuke detrás cuando en eso pasó un taxi.
Sasuke le había echo la parada.
-sakura sube.
Había entornado los ojos y estaba dispuesta a irse caminando a casa. Pero pensándolo mejor llegaría más rápido en el taxi y regresaría a sasuke en el mismo viaje y no tendría que preocuparse más por el.

-es tarde ya- mencionó el taxista una vez que ambos estuvieron dentro -de no ser porque traen un bebé no les habría hecho parada.
-muchas gracias.
La gente siempre observa a Taisei.
-Son una pareja joven.
-no somos pareja- aclaró sakura con molestia.
-no lo sabía. Lo siento.
-claro que es mi hijo también. 
-oh vaya están distanciados.
-no nos llevamos bien- aclaró sakura.
-es porque ella prefirió los sentimientos de otro.
-qué?
-por favor no peleen despertarán al bebé.
-cual bebé? Este muñeco!?
-qué! Me quieren tomar el pelo?!!- el auto paro abruptamente cuando sakura destapó a taisei. Aquello parecía una broma de mal gusto.
-bajen de mi carro.... Bájense ya!! Locos, dementes!!
El taxi se había esfumado. Apenas habían sido un par de cuadras mas las que avanzaron.

-ahh eres ridícula y tonta- dijo sasuke bastante molesto por el show que acababan de montarse en el taxi.
-véte a tu casa Uchiha. Llegaré sola a casa.
"Uchiha", Cuando estaba muy molesta así le llamaba.
-sabes que no me importaría dejarte a la mitad?!- alardeo.
-bien adiós.
-pero eres tan molesta- y aún seguía detrás de ella. Porque había algo que le impedía dejarle a medio camino sola.
-está bien. No nos hablemos ya nunca más.
Así que decidió ignorarla y tan solo acompañarla a su casa. Caminaba atrás de sakura y ella iba tan enojada.
-nunca nunca- sakura seguía buscando pelea, insistentemente.
Y cómo nada era suficiente, cual niña, comenzó a lloriquear en busca de un poco de atención.
Se estaba volviendo tan mimada??
El llanto de sakura para sasuke no fue desapercibido, era como una pequeña espina clavada en la mano.
Había perdido de nuevo?! Sasuke estaba de nuevo dispuesto a rendirse y ser el perdedor en esa absurda pelea.
Tomo de la mano de sakura para detenerle.
-suéltame!- pronto estaba ella entre sus brazos.
-ya no me vas a hablar?- susurró en su oído.
-waaa waaa- lloriqueaba -ya no. Nunca.
Sasuke limpio las lágrimas con su mano sana
-no llores... lo siento.
-ya no te buscaré- Su corazón se arrugó de solo escucharlo.
-no haré apuntes para ti. No los valoras... waaa waaa...
Sasuke se sintió mal por hacer sentir mal a sakura, solo entonces pudo ser sincero.
-estaba frustrado... Han pasado dos semanas, he estado frustrado por no poder verte... te habías olvidado de mi.
Las lágrimas de sakura mojaron su chamarra.
Acaricio su cabeza con suavidad.
Y sus miradas se conectaron con total honestidad.
-no pude visitarte. Realmente estuve muy ocupada.
-ni siquiera me llamaste.
-no quería molestarte.
Le había tomado de la mano y juntos reanudaron el camino, era una avenida principal. No habían carros, cada local estaba cerrado.
-es molesto no saber nada de ti... Tu teléfono estuvo apagado mucho tiempo...
No quiero estar lejos de ti.

Las palabras de sasuke eran tan cálidas. Demasiado cálidas.
Y sakura pensó que el realmente le extrañaba.
-me extrañaste?
-muchísimo.
Sus manos se habían entrelazado con fuerza.

Es esta la fuerza del destino?
Es la fuerza del amor.

-fin del episodio-