Si no hubiera nacido

Tiempo de rencor

Park se encontraba frente a varias cajas con sus aliados despedazados, vio a Byul con el agujero en el pecho y sintió ganas de  destruir todo, luego vio la nota de Kim Taehyung y su enojo acrecentó, se encontraba postrado a una cama su pierna estaba aún inmóvil, se sentía frustrado y lleno de odio, pues después de tantos años aún no lograba que su cuerpo respondiera como antes, aquella mordida en la espalda con el tiempo había Sido curada superficialmente, pero las secuelas no se iban. Tomó su espada y atacó a uno de los mensajeros, este solo le servía por miedo como todos los demás alfas, pues pese a que Chanyeol hubiese perdido aquella batalla, aún su voz de mando podía hacerte morir.

— ¡Son pedazos de mierda! ¿Acaso nada pueden hacer bien? Jong-In quiero que empieces los preparativos para atacar en dos meses la aldea de ese mocoso insolente.

— Padre, aún no estás al cien por ciento de  tus habilidades... La medicina está funcionando, si nos precipitamos podrías perderlo todo. Sé que no esperabas esto, yo también confié en el plan de Byul, sin embargo la aldea de Kim oculta algo más y debemos descubrirlo antes de atacar a la ligera.

— Soy lo suficientemente fuerte como para vencerlos... La droga afectará a Taehyung y asesinara a su propia manada.

— Te equivocas, no hay forma de vencer a Taehyung si no obtenemos el don de mi hermano.

Chanyeol vio a su hijo y se acercó con dificultad, cuando lo tuvo cerca le dio una bofetada, Jong-In se sintió estúpido, su padre aún lo trataba como un esclavo y no como hijo. — No necesito de esos fenómenos, si logramos infectar a Taehyung acabaremos con todo esto. ¡Obedece!

Ante la voz de mando de su padre Jong-In salió del salón encontrándose con su esposa, Jun Hee lo vio y se acercó a acariciar su rostro. Este la tomó de la muñeca y la jaló lejos del salón hasta sus aposentos. La soltó y se dejó caer en el sofá, se sentía impotente ante su padre, no entendía como su voz de mando podía dominarlo con  tanta facilidad, Jun Hee se acercó y se inclinó quedando a su altura, este acarició sus mejillas.

—Déjalo, huyamos de esto... Tu padre cada día está más demente y no es justo que cargues con todo.

— No puedo, es mi padre y ya perdió dos hijos.

— Por su ambición y no por tragedia, asesinó a tu padre... Jong debemos salir de esto... ¿Has escuchado lo que se dice del omega de Kim?

— Si padre pone sus manos sobre él lo vencerá, es un monstruo y más ahora que se ha llenado de esa energía tan oscura y tenebrosa, puede corromper la sangre del omega con solo una mordida. 

— ¿Se ha convertido en un Salvaje? Eso es peor, estoy esperando y si fuera un omega o beta estará en peligro... — su esposo desvió su mirada hacia otro lado, Jun Hee no quería seguir bajo el dominio de Park, había perdido todo por su culpa, su madre omega había sido asesinada por las reglas de Park acerca de las omegas quienes eran un estorbo y su hermano era esclavizado por la aldea, pues era omega varón más aberrante para Park. — Si tú no me ayudas y sigues apoyando a tu padre no me volverás a ver.

— ¿A dónde irías Jun Hee? Debes ser obediente a tu alfa o pagarás como lo hizo tu madre.

— ¿Me amenazas con la muerte? Estás equivocado si piensas que te dejaré lastimarme... Me enamoré de ti y sé que me amas, pero tu padre es un maldito virus que contamina  a todos con su odio, asesinó a sus padre, hermanos y esposo, es un ser maligno que te arrastrará como una corriente que desgarrará tu alma. 

— No te atrevas a juzgar a mi padre pues su sangre corre por mis venas... Lograré obtener a mi hermano y conseguiré que destruya a Kim.

— Él no es como tú... Siempre fue un niño que cuidaba de los demás, un niño que casi pierde su inocencia por tu padre... — Hee se acercó a su esposo agarrándolo de los brazos, lo veía con una mirada suplicante, este la vio con sus ojos en furia. — ¿Acaso no lo ves? Jong, te lo pido por nuestro cachorro... Alejémonos de tu padre y de toda esta miseria, te amo, pero no arriesgaré a mi bebé.