Capítulo 34

8.6K 806 92
                                    

Mehmet

Desde que kosem regreso al palacio había estado yendo a sus apocentos con frecuencia, iba en la mañana para desayunar, me quedaba un rato con ella aunque yo era él único que hablaba, ella solo respondia con *si o no* depende de que le preguntara, también almorzaba con ella y en la noche también iba, ella estaba volviendo a ser la misma de a pocos, tenía que ser cuidadoso con lo que hacía o decía, le había mandado todo tipo de regalos cuando se fue, pero ahora también le estaba mandando regalos, creo que podría llenar toda una habitación con todos los regalos que le di y no era una exageración.

- Su majestad - un aga entro en mis apocentos - la señorita Hadan está afuera, pide verlo - me informó.

- Ahora no puedo, tengo que ir con kosem.

Estaba emocionado, kosem había aceptado ir conmigo a dar un paseo al jardín así que no podía dejar pasar esta oportunidad, quizás hoy por fin ella vuelva a ser la misma de antes conmigo.

- Se lo informaré - salió, pero antes de que yo pudiera salir para ir con kosem, alguien entro a mis apocentos sin anunciarse - Lo siento su majestad, no pude detenerla - Dijo y yo le hice una seña para que saliera.

- No puedes entrar aqui Hadan - le dije serio.

- Me disculpo su majestad, pero lo extrañaba, no me ha llamado desde hace 2 semanas - dijo triste.

Bueno, kosem había regresado hace 2 semanas y había estado completamente concentrado en hacer que me perdone, me había olvidado de kadan, de todas maneras no la necesitaba, kosem había vuelto.

- No te volveré a llamar - le dije serio - si eso es todo lo que tienes que decir, estoy apurado así que sal de mis apocentos - ordené.

- ¿Hice algo malo su majestad? ¿Por qué ya no me quiere ver? - preguntó dolida.

- Sabes la razón, todos en el harem lo dicen ¿No? Ellos no mentian - dije tranquilamente.

- ¿Kosem? - preguntó, frunci el ceño molesto por como la llamó.

- Sultana, ella es una sultana y tienes que tenerle el respeto que merece así que o eres respetuosa con ella o te mando al calabozo.

- ¿Como puede pedirme eso? Por su culpa usted ya no me queire ver

- ¿Su culpa? Tu fuiste la que quiso creer que podías ser algo más que una compañía para mi mientras kosem estuvo fuera - le dije molesto.

La primera vez que la ví fue de espaldas, yo la llame kosem y la abracé por qué pensé que era ella, pero no lo era así que ella sabía desde el principio que yo la veía por qué me recordaba a kosem.

- Yo solo quería que usted me amara - lloro.

¿Por qué lloraban? Nurbahar era igual, era estresante que lloren mientras hablan.

*Tu lo haces con kosem* me dije a mi mismo, bueno yo era el sultán podía hacer lo que quisiera, aparte era preferible rogarle a qué se vaya, solo de pensar en eso me da escalofríos.

- Nunca podría hacer eso, la única que está en mi corazón es kosem así que tú fuiste la que se imaginó cosas que no eran ¿Crees que no se que les decías a las criadas que serias la próxima sultana? - dije serio

- Eso es mentira, yo solo decía que me ganaría su corazón por qué eso es lo que yo quería que usted me quisiera tanto como quiere a la Sultana Kosem.

- No puedo querer a otra mujer que no sea Kosem y si lo hiciera, cosa que es imposible, nunca podría quererla tanto como quiero a kosem, kosem es mi vida y mi único amor - aseguré.

- Puedo cambiar eso - aseguró - solo deme la oportunidad - se acercó a mí, pero retrocedi.

- Hadan y....

- Mehmet, te estás tardando much... - kosem entro en mis apocentos, pero cuando vio a Hadan se quedó callada - ¿Quien es? - preguntó confundida, estaba aliviado de que no se enojara.

- Soy la preferida del sultan - le respondio a kosem.

- No es mi favorita - aseguré - es Hadan - le dije sabiendo que ella sabría quién es, kosem sonrió.

- ¿Hadan? - fingió no saber quién era -Oh - hizo una expresión como si acabara de recordar algo, me encantaba ver esas expresiones, eran divertidas - Ya la recuerdo, la que se parece a mi ¿Verdad? - sonrió.

- No me parezco a ti, soy mucho mejor que tú - Hadan se acercó a ella molesta, pero kosem no retrocedió como yo, se quedó parada en su sitio y puso esa mirada retadora que tanto me encanta - soy la única mujer que logró estar con el sultán mientras tú estabas fuera, regresaste aquí por qué tuviste miedo de perder al sultán, todo el mundo sabe eso - Hadan sonrió.

- Fue su... - no pude terminar mi oración por qué me interrumpieron.

- Silencio - kosem me ordeno sería, estaba molesta así que era mejor quedarse callado.

- ¿Como puedes hablarle así al sultán? Nadie puede darle órdenes - dijo Hadan molesta.

- ¿No puedes darle órdenes a mehmet? - preguntó confundida - ¿Cómo puedes ser mejor que yo entonces? - sonrió.

- ¿Crees que el sultán te va a obedecer? - le dijo hadan aún molesta.

- Mehmet - me llamó - espérame fuera - ordenó con una sonrisa.

Tenía dos opciones:

Obedecía lo que kosem me ordeno o simplemente lo ignoraba, la segunda opción posiblemente moleste a kosem y eso provocaría que todo el esfuerzo que hice para que me perdonara se perdiera.

Bueno no tuve que pensarlo mucho por qué ya estaba llendo hacia la puerta para salirme.

- Te esperare en los apocentos de Mihrimah tengo que hablar algo con ella - dije antes de salir.

Si, kosem podía darle órdenes al sultán en sus propios apocentos, no importa como lo vea esto nunca me dejara de parecer ridículo, pero ¿Que puedo hacer? No quiero que kosem se vaya se nuevo y me deje aquí o que me ignore como antes, ya tuve suficiente de eso.

Un Amor Entre ÉpocasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora