Capítulo 54

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Kosem

Tenía 5 meses de embarazo y ya me sentía mejor, aún tenía miedo de salir a pasear por que sentía que le pasaría algo a mi bebé, mehmet había dicho que debería salir por qué ya estoy estable, pero aún tengo miedo, me parece chistoso que antes no quería que saliera, pero ahora si quiere que salga, esa vez que le dije que me levantara, no lo había hecho y yo me había enojado tanto que no le hable durante un día, desde ahí él cumple con su palabra cuando dice que me despertará aunque aún dice que le es difícil despertarme por qué me veo como un angel cuando duermo.

Ahora voy a darle una sorpresa, voy a ir a sus apocentos a verlo, normalmente me quedaría en mis apocentos echada, pero hoy me siento bien para caminar aunque sea un poco.

- Sultana - Melek entro a mis apocentos - ¿Está bien? - preguntó preocupada cuando me vio levantada de la cama.

- Estoy bien, iré a ver a mehmet es todo - sonreí.

- ¿Quiere que la acompañe? - preguntó mientras se acercaba  a mi.

- No, estaré bien, tú cuida a los niños, iré a verlos junto con mehmet.

- Está bien sultana - sonrio y salió de mis apocentos.

Me dirigí a la puerta, estaba nerviosa y aún asustada por qué pasará algo malo si me levantaba, pero la doctora había dicho que el bebé ya estaba fuerte y yo también.

Mientras caminaba muchos me veían sorprendidos, bueno, no había salido de mis apocentos por 5 meses así que era normal que me vieran así, mi vientre ya se notaba más, me encantaba acariciarla, era mi pasatiempo favorito y el de Mehmet también, él le hablaba con mucha frecuencia, mehmet juraba que este bebé era una pequeña sultana.

- Vengo a ver al sultán - dije a los guardias de la puerta cuando llegue a los apocentos de mehmet.

- El sultán está ocupado sultana - dijo uno de ellos.

- Quiero verlo igual.

Me acerque a la puerta, creo que ellos querían detenerme, pero todos sabían que mi embarazo era delicado entonces quizás tengan miedo de intentar detenerme y que pase algo, así que con toda la tranquilidad del mundo entre a los apocentos, nadie me detuvo.

- Mi hermana es una sultana y tú no eres nada a comparación de ella, será mejor que cuides tus acciones si no quieres acabar mal.

Escuché a mehmet gritar y me hizo asustar por momento.

- No era mi intención sultán - respondió una mujer.

Aunque la chica decía eso, no se le notaba arrepentida, mehmet miro furioso a mi dirección, pero cuando vio que era yo, su semblante se tranquilizo por completo y en sus ojos había algo de temor, se acercó a mí.

- ¿Estás bien? ¿Por qué estás aquí? Me hubieras llamado si querías salir ¿Melek te acompaño hasta aquí? - preguntó rápidamente.

No le respondí por qué seguía viendo a la mujer, parecía sorprendida de que mehmet actuará así de un momento a otro.

- Estoy bien - tranquilice a mehmet cuando deje de ver a la mujer - vine sola, quería darte una sorpresa - dije sonriendo.

- Ya veo, pero deberías haber venido con compañía  - me dió un beso en la frente.

- ¿Que paso? - pregunte interesada en la situación y dejando de lado el anterior tema.

- No pasa nada - dijo, pero no pudo evitar dirigirle una mirada molesta a la mujer.

- Puedo esperar, me sentaré en la cama.

Salí de su agarre y fui a sentarme en la cama mirando a ambos, él dudo un momento, pero al final termino acercándose a la chica, supongo que para que no lo oiga, pero aún podía hacerlo.

- Espero que te haya quedado claro - le dijo a la mujer molesto.

- Lo tengo claro su majestad.

Aunque decía eso, no se veía para nada arrepentida, podría jurar que ella volvería a hacer lo que sea que haya hecho.

- Beli bey se casara con Mihrimah, eso ya está dicho, se perfectamente que Bali bey no tiene nada que ver con lo que pasó, pero si te atreves a volver a hacer algo que haga llorar a mi hermana, te mataré ¿Oíste? - preguntó.

¿Bali bey? ¿Mihrimah? Yo no sabía de eso y me interesaba.

- No lo haré de nuevo sultán, yo solo me deje llevar por mis emociones, no volverá a pasar.

- Tus emociones pueden llevarte a la muerte si siguen asi - murmuró más bajo, pero aún así lo escuché.

- Mehmet - lo llamé, quería preguntarle qué pasó - ¿Que fue lo que pasó? - pregunté.

- No paso nada - dijo tranquilo.

Bien, si él no me quería decir, ella si me lo diría, la mire.

- ¿Que paso? - pregunté, pero esta vez a ella.

Ella no hablo, tan solo me miró mal, siento que ella me odia y ni si quiera me conoce, al parecer tampoco me diría nada.

- Bien, como nadie me quiere decir, me iré - me levanté con cuidado.

- ¿No te ibas a quedar? - preguntó mehmet con voz triste.

La mujer parecía más que sorprendida y era comprensible, hace menos de 1 segundo mehmet estaba completamente furioso y ahora está con el semblante caído.

- No, no me quieres decir que pasa y sabes que me interesa mucho eso - trate de cruzarme de brazos, pero con mi vientre hinchado por mi embarazo era algo difícil y nada cómodo.

Mehmet junto los labios tratando de no reírse, lo mire mal, sabía que me veía chistosa, pero no quería que se ría cuando estoy tratando de ser sería en este tema.

- Está bien - dijo cuando logro calmar sus ganas de reír, volteo a ver a la mujer e inmediatamente se puso serio - puedes irte, pero estás advertida y esto traerá una consecuencia.

Ella asintio, hizo una reverencia y antes de irse me lanzó una mala mirada.

¿Que le había hecho? No recordaba hacerle nada, no le tomaré importancia de todas maneras.

- ¿Entonces? - voltee a ver a mehmet y él suspiró.

- Esa mujer beso a Bali bey, Mihrimah los vio y malinterpreto las cosas, de hecho yo también por poco y ejecuto a Bali bey cuando me enteré, pero alguien los había visto y testificó que fue ella quien se lanzó a Bali bey, él la separó de inmediato.

Lo de ejecutar a Bali bey era comprensible, Bali bey y Mihrimah estaban comprometidos hace unas semanas, Mihrimah era una sultana, la única hermana del sultán mehmet, así que la ejecución es el menor de los castigos.

- ¿Por qué no me enteré de esto? - pregunté.

- Fue hace unos días nada más y Mihrimah prefirió no contarte eso por qué sabía que te precuparias.

- Aún así - me queje - al menos tuvo a la sultana Hurrem para hablar, ella también hizo algo ¿Verdad? - pregunté curiosa.

- No la deje hacer nada, esta algo enojada conmigo.

- Entiendo - murmure - pero esa mujer, no parecía para nada arrepentida - dije mi opinión.

- También lo creo, por eso la expulsarme del palacio - dijo con simpleza.

- Deberías hacerlo ahora.

- Lo haré rápidamente, pero primero quiero pasar tiempo contigo - se acercó a mí y me rodeo la cintura - ¿Ya te sientes mejor? - preguntó.

- Si, mucho mejor.

Mehmet acaricio mi vientre abultado y se agachó para dar un pequeño beso.

- ¿Vamos a dar un paseo? - preguntó y yo lo mire algo asustada - no pasa nada, yo estaré contigo - dijo suavemente.

Asentí y fuimos juntos a dar un paseo, gracias a alá, no paso nada, yo y mi bebé estábamos en perfectas condiciones cuando fuimos a ver a sus hermanos, por fin podía tener un poco de paz, realmente quería pasar este embarazo totalmente tranquila, pero la sultana hatice dejo una pequeña dificultad cuando se fue, ya está siendo superada, pero aún tengo temor de que pase algo con mi bebé.

Un Amor Entre ÉpocasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora