Capítulo 49

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Kosem

Mehmet había echo una gran fiesta cuando nos enteramos del embarazo, él espero a que yo despertara para dar las noticias los dos juntos, ese gesto me encantó, fue muy considerado de su parte, la sultana Hurrem y Mihrimah estaban muy contentas con esa noticia.

Todo estaba bien, pero yo tenía un problema.

No me soportaba a mi misma, solo había pasado 2 semanas, pero ya me sentía de mal humor y siempre quería estar haciendo algo, el problema estaba en que mehmet no quería que hiciera nada, comenzaba a irritarme.

- Solo quiero ir a dar un paseo - no sé cuántas veces repetí lo mismo.

- Puedes lastimarte - mehmet respondió.

- Solo iré a caminar ¿Que podría pasar? - le pregunté molesta.

- Puedes caerte y lastimarte o puede agarrar esas rosas que tanto te gustan y hacerte daño en las manos.

- No pasará nada y aparte ¿Que tienen que ver las manos con el bebé? - pregunté confundida.

- Nada, pero no quiero que te lastimes con nada - dijo serio, decidí ignorar eso, no quería pelear ahora.

- La Sultana Hurrem y Mihrimah irán conmigo - dije tratando de convencerll

Él me miró dudoso, pero al final con un par de besos y caricias logré convencerlo de que me deje ir al jardín.

(...)

- Creo que lo de mehmet es normal, recuerda que con tu anterior embarazo fue igual - comento Mihrimah cuando ya estábamos dando un paseo.

- Lo sé, pero en este embarazo me siento demasiado estresada - me queje.

- De repente este bebé saldra con carácter fuerte - dijo divertida la sultana Hurrem.

- Seguro que si - suspiré cansada.

- ¿Sabes algo de la sultana hatice madre? - preguntó Mihrimah.

- Solo que después de que saliera de los calabozos estuvo tranquila, me pregunto por qué mehmet encerró a hatice - respondió la sultán a hurrem.

Acabo de recordar que yo tampoco se el motivo por el cual mehmet encerró a la sultana hatice, olvide preguntarlo.

- Mihrimah ¿Sabes algo? - pregunté.

- ¿Ah? - preguntó confundida - ¿Yo? No se nada, estoy igual que ustedes - se encogió de hombros - ¿No sé lo preguntaste?

- Lo había olvidado con todo lo del embarazo, pero le voy a preguntar luego.

- No creo que eso sea necesario - Mihrimah sonrió - me refiero a que ella ya salió del calabozo ¿Para que le preguntaras? Ya no tiene sentido.

- Tiene razón - dijo la sultana Hurrem.

Había algo raro en este asunto de todas maneras le preguntaré a mehmet más tarde.

(...)

Estaba yendo a los apocentos de mehmet para hablar sobre el motivo por el cual encerró a la sultana hatice cuando alguien se me cruza en el camino.

- Sultana - saludó una mujer que no conocía.

- ¿Quien eres? - pregunté confundida, estaba un poco a la defensiva por qué quizás sea alguna criada de la sultana hatice.

- No le haré daño sultana, no se preocupe - sonrió.

Esa sonrisa no me había gustado para nada, en estos momentos quería que Melek esté conmigo, yo tenía la costumbre de ir sola a los apocentos de mehmet así que ahora mismo estaba sola y si ella me ataca posiblemente sea demasiado indefensa ante ella y no por qué yo quiera, si no por qué no me atrevo a hacer algún movimiento que pueda lastimar a mi bebé.

- Si tienes algo que decirme prefiero que sea en otro momento - comencé a caminar de nuevo.

- Sultana - esa misma mujer me cogió por la muñeca y yo rápidamente me safe de su agarre.

- ¿Cómo te atreves? ¿Sabes que el sultán puede matarte por esto? - pregunté molesta.

- Solo quiero que me escuche.

- Está bien, pero alejate de mi - ordené.

Ella dió unos cuantos pasos destras de mi y yo pide tranquilizarme.

- Se que se pregunta por qué el sultan encerró a la sultana hatice, yo se lo diré, lo que pasó fue que la sultana hatice hizo una pequeña fiesta para el sultán para que pase un buen momento y se relaje en esa fiesta esta yo - se señaló a si misma - fui un regalo de la sultana hatice para el sultán mehmet - sonrió, esto no me gustaba nada - pensé que el sultán me rechazaría por qué todos dicen que no está con nadie más que no sea usted, pero el me aceptó, déjeme decirle que usted es muy afortunada por tener al sultán como esposo - suspiro triste - aunque me aceptó esa vez dijo que sería la última vez que lo haga por qué la mujer que ama es usted, pero realmente no me quejo por qué también dijo que quizás se vuelva a repetir, con su permiso me retiro sultana - dijo con una sonrisa y desaparecio rápidamente de mi vista.

Solté todo el aire que ni si quiera sabía que había estado reteniendo, caminé lentamente hacia mis apocentos con los ojos llorosos, no quería ver a mehmet ahora, probablemente comenzaría a gritarle que era un mentiroso y muchas cosas más, quería calmarme por qué posiblemente este sea un plan de la sultana hatice y yo no dejaría que ella logrará su objetivo.

Hacer que peleara con mehmet

No, no lo haría, sabía que mehmet no sería capaz de esto, jamás me engañaría así que tengo que tranquilazarme y pensar bien las cosas antes de hacer o decir algo que solo ayudaría a completar los planes de la sultana hatice.

Llegué a mis apocentos y me senté en el borde la cama tratando de calmarme a mi misma, sabía que lo que dijo era una mentira, pero no pude evitar que un pequeño sollozo saliera de mi labio, quizás sea por el embarazo que estoy más sensible lo único que si se es que mi llanto fue tan fuerte y tan largo que incluso llegué a dormirme del cansancio.

Un Amor Entre ÉpocasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora