IV

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Bajaron del Uber y Brisa entró sin emitir sonido seguida por Angie la cual cerró la puerta luego de entrar. Antes de que Brisa pudiera llegar a su habitación, Angie la tomó del brazo para detenerla.

-Bripsi, hablemos. -Murmuró Angie y soltó a su amiga en cuanto se dió la vuelta.

-¿De qué? -Respondió Brisa y elevó una de sus cejas mientras se cruzaba de brazos.

Angie aguanto las ganas de reírse de su amiga, ahí estaba la Brisa caprichosa y orgullosa que solía aparecer cuando bebía de más.

-No sabía que me estabas buscando, pensé que estarías con Tomás bailando, por eso me fui a tomar algo y también por eso me quedé con Fio.

-¿Fio? Bue, no importa ya está. Sólo me enoje porque me dejaste re sola.

Brisa se dió vuelta y nuevamente intentó irse a su habitación, pero una vez más Angie la detuvo.

-Perdón, Bri. Te juro que pensé que te quedabas con el boludo ese.

-¿Cómo me voy a quedar con él si yo estaba bailando con vos? -Brisa se soltó del agarre de su amiga y finalmente se fue a su habitación. Se quitó la ropa y se metió en la cama. Estaba abrumada por sus sentimientos, celosa y enojada. ¿Qué hacía Angie con esa chica? ¿Y por qué había estado tanto tiempo lejos de ella? En aquel momento el alcohol no le dejaba ver con claridad que Angie era solamente su amiga y no tenía derecho a reclamar nada.

Mientras tanto, Angie salía del baño bastante confundida. ¿Brisa estaba celosa? ¿Por qué no se había quedado con Tomás? La peliazul suspiró y entro a su habitación para cambiarse, se colocó uno de sus pijamas y volvió a la sala para debatir si volver a intentarlo pedirle disculpas a su amiga o dejarlo para mañana. Su teléfono vibró sobre su cama y lo tomó para ver quién le escribía. Se sorprendió al tener un mensaje de Martina y otro de un número desconocido.

M_ Angie, como está Bri? Hace mucho no la veía tan sacada, no sé que pasó pero cuidala.

Número desconocido_ Angie, soy Fío. Te escribo para que tengas mi número. Un beso.

Angie claramente se centró en el mensaje de su amiga y de inmediato le respondió.

A_ Mar no se que pasó, yo la deje para que bailará con Tomás y me fui a una barra porque no quería interrumpirlas a ustedes.

M_ Te fue a buscar y te vió con una mina, y ya sabes que se pone re celosa aunque no lo diga, boluda. Creo que se enojó porque la dajaste con el idiota de Tomás, pero ya fue. Anda a buscarla así se le pasa.

A_ Gracias Marti.

Angie agradeció la información que si amiga le había enviado. Siempre bromeaba con Brisa sobre los celos que sentían por la otra cuando estaban separadas, pero aquella escena más que una broma se sentía totalmente real. Ojalá, pensó Angie y sin dudarlo abrió suavemente la puerta de la habitación de su amiga.

-Bri, ¿estás despierta? -Murmuró Angie mientras se acercaba a la cama donde su amiga estaba totalmente tapada. Cuando llegó a su lado de sentó en la cama y sintió como Brisa se movía dejándole espacio o quizás alejándose de ella. Optó por creer en la primera opción y levantó las mantas para acostarse con su amiga. Aquello no era algo inusual, la mayoría de los días dormían juntas luego de quedarse dormidas viendo una serie o charlando hasta tarde.

Angie se recostó y se puso de lado para ver si Brisa estaba despierta, se sorprendió al ver a la castaña también mirándola fijamente.

-Perdón, An. -Murmuró Brisa y Angie no pudo evitar soltar un suspiro de alivio.

-No me pidas perdón, no hiciste nada malo. Fui yo que te dejé sola.

-No, yo que armé tremenda escena, en serio perdón.

Angie negó con la cabeza y fijo su mirada en la de su amiga, se veía tan dulce y cansada a la vez.

-¿Me vas a decir por qué te pusiste así? Las chicas dijeron que tomaste bastante y vos no sos de tomar más de unos vasos. -Angie estiró su brazo y colocó su mando sobre el de Brisa para dejar leves caricias allí.

-No. Vamos a dormir, estoy cansada y me duele la cabeza. -Brisa se dió la vuelta dándole la espalda a su amiga. Angie en cambio suspiró y decidió continuar la charla, seguramente está noche no lograría que Brisa le dijera más, se conformaba con poder dormir abrazada a ella. Se acercó más a su amiga y paso un brazo sobre su cuerpo para abrazarla. Sintió como Brisa tomaba su mano y cerró los ojos para intentar dormir.

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Siempre fuiste tú. - BrangieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora