Treacherous♛s.m.

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-¿Aló?-Contesté mi celular.-Mamá, te dije que iría con Faith a sus clases en el club...Pero si tú nunca vas al club...Vale...¿Castigada?...No estoy con ningún chico, mamá.-Shawn rió y giré los ojos.-Vale voy a la casa, adiós.

-¿Y...?-Me preguntó mi mejor amigo con una sonrisa burlona, a lo que yo le contesté con un golpe en su hombro.

-Tengo que ir a casa, mi madre decidió que hoy sería un buen día para ir al club; Faith no supo mentir así que me ha pillado.-Me encogí de hombros.

-Yo quería estar contigo.-Hizo un puchero y me abrazó más cerca.

-Lastima, tengo que volver a casa.

-¿Sabes que te quiero mucho?

-Me lo dices 100 veces al día ¿Cómo no voy a saber?-Reí y despeiné su cabello.

-Es que me gusta decirlo.-Sonrió y besó la parte interior de mi brazo.

-¿Por qué no puedes querer a otras chicas aparte de mí y Faith?-Le pregunté curiosa.

-Sí puedo. Quiero a mi mamá y a mi hermana.

-Bueno, ¿Qué tal a otra chica? Así como una novia, no sé.

-Estás loca, ya te dije que Shawn Mendes no tiene novias.

-Vale. Me voy.-Me levanté de la cama pero el me jaló de vuelta a esta y caí sobre su pecho desnudo.-¡Shawn!-Reproché.

-Dame un beso.-Sonreí y le hice caso, besé su mejilla.-Gracias, adiós, ¿Quieres que te lleve?

-Lo menos que quiero es que mi madre se entere que estaba aquí.

-Claro, suerte.-Se burló antes de que saliera por la puerta.

[...]

El taxi me dejó frente a mi casa, solté un gran suspiro antes de abrir la puerta. Vaya regaño que me tocaría.

Cuando entré a la casa, mi madre estaba sentada en el sofá usando su ropa de oficina.

-Hola, mamá.-Saludé y me senté en el sofá frente a ella.

-Me encontré a Faith, me dijo que estabas en el baño-Supuse que habría dicho una tontería.-y te esperamos por 20 minutos hasta que decidí llamarte.

-Lo siento.

-¿Dónde estabas?-Me preguntó con voz aterradora.

-Estaba en...eh...-Mientras pensaba en una excusa, se escuchó algo romperse en la cocina. Mi madre me miró extrañada, esperando que yo supiera que había sido. Me limité a encogerme de hombros.

Cuando escuché el grito de mi madre decidí ver que sucedía, fui hasta la cocina y vi que su jarrón de dos mil dólares estaba en el piso.

-¿Tienes idea de quien hizo esto?-Me gritó. Negué con la cabeza, mi madre se agarró sus rubios cabellos y fue al teléfono.

La seguí, ¿Me excusaba?

-Mamá, ¿Puedo...-Ni siquiera me dejó terminar la frase.

-No me interesa con quien hayas estado, sólo ve a tu habitación y estás castigada este fin de semana. Quiero que recuerdes que tu reputación es muy importante...-¿Insinuaba que me había estado acostando con alguien?-Ahora largo, tengo que ver el seguro de mi jarrón.

Subí a mi habitación, castigada el fin de semana no era nada malo. Y creo que fue buena idea dejar la hoja de calificaciones sobre la barra de la cocina, así la verá y la firmará sin molestarse por algo.

Estoy segura que estará más preocupada por recuperar los dos mil dólares que por mis calificaciones.

Y si mi padre la ve, no pasa nada. Sólo buscará el lugar de la firma y subirá a dormir, pues el trabajo lo tiene agotado.

Sonreí para mi misma cuando me recosté en mi cama, claramente me había escapado de esta.

-¡Psst! ¡Psst!-Escuché desde mi balcón que estaba cerrado con llave.

Lo abrí y vi a Shawn agachado allí.

Pues claro, ¿Quién sino Shawn Mendes arriesgaría su pellejo por mi?

Sonreí y lo dejé pasar.

-¿Estás loco?-Me carcajeé lo más silenciosa que pude.

-Tenía que hacer algo, no podría revelar la identidad de tu novio.-Sonrió cuando se sentó en la alfombra naranja de mi cuarto.

-¿Mi novio?-Se señaló a sí mismo con ambos pulgares. Sonreí y aguanté una risa.-Pudiste haber buscado otra manera, mi madre está loca por su bendito jarrón.

-Fue algo improvisado, acababa de llegar.

-Gracias, Shawn.

-Para eso están los amigos, Mony.-Odiaba cuando me llamaba por ese apodo.

-Harmony.-Le corregí.

-Mony es tierno.

-Yo no soy tierna.-Le dije cuando arrugué mi nariz.

-Lo eres, completamente.

-Pues desde ahora seré ruda y vestiré de negro.-Shawn se fijó en mi atuendo; unos shorts blancos y una blusa floreada de tirantes.

-No te creo ni pizca de eso.-Rió y lo acompañé, yo tampoco me lo creía.

-Ya es hora de que te vayas, mañana estoy segura que mi madre me llevará al trabajo sólo para asegurarme que no me vaya a otro lado.

-¿Te das cuenta que siempre terminas corriéndome de tu casa?-Me dijo cuando se levantó de la alfombra.-Ahora mismo bajaré y me presentaré con tu madre.-Corrió hasta la perilla de la puerta pero lo detuve antes.

-Shawn, mi madre está furiosa.

-No importa, se alegrará cuando vea este guapo rostro.-Sonrió y me hizo rodar los ojos por centésima vez en el día.

-Si tu bajas y le hablas, le diré que tú has roto el jarrón.

-¿Y...?

-¡Y te va a demandar, carajo!-Le alcé la voz lo suficiente pero no tanto como para que mi madre llegara a escuchar.

-Vale, me voy.-Iba a besar mi mejilla pero hubo un raro momento en que yo giré mi rostro y sus labios tocaron los míos 2 segundos.

Cuando nos separamos, Shawn estaba muy rojo y yo estaba desconcertada.

Había sido un accidente, un beso en la mejilla mal coordinado que ha terminado a ser en los labios ¿No?

-A-Adiós.-Me dijo antes de salir por el balcón.

Toqué mis labios, estaban cálidos.

Mierda, ¿Por qué ha pasado eso?

Somos amigos, no he sentido nada. Shawn no me gusta.

Faith ama a Shawn y no la puedo traicionar.

¡No es por Faith! Es por mi, no puedo estar con un chico que toma a las chicas como un maldito juego.

Si ese beso provocó algo en mí, me aseguraré de eliminarlo.

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Sí, me basé en Expelled durante la parte del jarrón :)