Diluc admiro la mirada confundida de Scaramouche, lo había notado, su halcón fue herido luego de que partió con su carta, no era un gran daño es verdad, pero si era notorio para él, conocía a su ave de pies a cabeza, cada pluma de sus alas eran cuidadas por el mismo.
Pero decidió callar, si el heraldo intercedió la carta no debió encontrar nada raro, pues aún se mantenía con vida, por lo que mantener su fachada de un subordinado servicial y amable que adoraba a su superior seguía intacta.
- No es agresivo con aquellos que no considero amenaza - comento casualmente, admirando su entorno mientras guiaba al ave para que se mantuviera manso, podía notar que apenas ver al heraldo su animal se tenso, erizado ante la presencia del amenazante ser, pero esto no era más que otro método para ganar la confianza del heraldo, solo a él le permitirá tener contacto con su preciado animal, aunque aquello internamente le disguste, revolviendo con fuerza su estómago.
Según la información recolectada de alguno de sus infiltrados, la marioneta ahora frente a sus ojos había comenzado a tener una actitud agresiva y repelente con sus compañeros heraldos desde hace algunos años, se rumorea que todo empeoró luego de un incidente en el laboratorio de Dottore, del cual como consecuencia Scaramouche estuvo en cama por cerca de un mes, a sus ojos parecía que ambos tuvieron una fuerte pelea, pero por la falta de daños que presentó Dottore, temió que fuera un incidente de otro tipo.
También se le reporto lo poco que el baladista llegaba a confiar en sus empleados, ninguno tenía su confianza suprema, se le informó que detrás de ese suceso parecía haber otro incidente, pero nada del que pudieron averiguar, pues venía siendo una situación que surgió desde casi la llegada de Scaramouche a la base Fatui, y gracias a su solitaria vida era difícil confirmar donde estaba la mayoría del día, debía comenzar a buscar formas de vigilarlo sin descuidar sus deberes, dentro de poco partirán a otra nación para seguir haciendo misiones, estaba seguro, fue una parte de la poca planeación que lograron averiguar sus agentes antes de ser ingresado como un nuevo miembro bajo el mando de la Diosa cryo.
Era fácil para él deducir que el contrario cuanto más trabajo deje en sus hombros más tiempo tendrá libre, tiempo que posiblemente use para estudiar la gnosis, descuidarlo no era una opción, debía buscar la manera de poder hacerse con el escondite de su objetivo, una vez tuviera la gnosis podría retirarse de toda esta locura.
- ¿Desea alimentarlo? - ofreció luego de notar más calmado al hombre más pequeño, pareciendo incluso más ameno a la hora de mimar a su halcón.
Scaramouche dudó un momento, conocía la amabilidad con la intención escondida de ganarse su favor solo por conveniencia, pero esta parecía muy diferente, no podía pensar en algún motivo más por él que su inferior le permitiera algo como eso, incluso aunque se lo ordenará, el sentimiento de que este acto era genuina amabilidad era tan satisfactorio, aunque no lo era.
Era una amabilidad tan falsa y sucia, tan mentirosa, y lo más encantadora de esta es que el baladista no parecía notarla, ya tenía un buen puesto, un buen sueldo, una buena posición, no veía un buen motivo por el que su inferior hiciera eso, no podía notar con sus inocentes ojos que el premio a codiciar era su confianza, y una vez que la diera, no había vuelta atrás, esa sería su perdición.
- Es agradable - susurró sonriendo con debilidad, sin notarlo cada vez se mostraba más vulnerable al pelirrojo, tal vez porque era la primera vez que alguien no parecía ser una pieza de cristal falsa que iba a lastimarlo, tal vez porque estaba hambriento de cariño, llevaba tanto tiempo sin sentir algo de amor.
Desde que Ei le desprecio y lo dejo a su suerte, odio el sentimiento de estar vivo, tan solo y abandonado, sin nadie en el mundo, sin ninguna compañía real, leal. El sentirse apartado a sido un sentimiento con el que aprendió a vivir, su personalidad nunca estará a disposición para hacer feliz a todo el mundo, no de nuevo, nunca más permitirá ser usado solo por caprichos.
Su cabeza se contradice en mil preguntas de pensamientos ilusorios, el odio, el amor, el dolor, el rencor de la soledad, sus lágrimas, aunque pocas notorias brotaron sin su permiso, ser tan vulnerable ante alguien no es un deseo suyo, prefería usar sus sarcasmos y lengua venenosa para mantenerse en una soledad segura, Incluso aunque odiara el frío de la soledad en la que se encerraba, era mejor que el frío de la camilla donde Dottore lo dejaba luego de usarlo.
Tan repugnante, odiaba tanto ese sentimiento, el frío era lo peor para él y eso lo hacía preciado, porque le recordaba su realidad, ese eterno frío siempre estaría con él, porque estaba solo, y siempre lo estaría, porque hasta su creadora lo condenó a aquella horrible realidad, no iba a arriesgarse a que otro rechazo más.
Sin darse cuenta de nada más que sus pensamientos intrusivos, sintió como un calor cómodo llegó a su mejilla, acunando con dulzura su rostro, limpiando con delicadeza sus perladas lágrimas bajo un pulgar tan encantador al tacto.
- Vayamos adentro mi Lord - suplicó con voz profunda, trayendo a la realidad al de menor estatura, con un tacto tan adictivo que el baladista no resistió a seguir la casi orden que le dio su inferior.
Diluc lo noto, ese hombre estaba tan hambriento de tacto, no tardo mucho en derrumbarse a su alrededor cuando mostro intenciones "sinceras", solo sonrió internamente, era lo que necesitaba, la pieza que le haría saber cómo llegar al corazón del heraldo, como llegar a la gnosis.
Le sabía algo mal el hecho de que tendría que jugar y utilizar a su ahora vulnerable contrario para poder hacerlo, no podía evitar la amargura de su bilis subir al ver como se derrumbó en lágrimas de dolor puro mientras asentía a la idea de pasar un momento lleno de "cariño" con alguien, Pero valía la pena con solo saborear el sabor de la victoria sobre Fatui y las corruptas almas que conformaban sus filas.
---------------------
Headcannon del día: Cuando Scaramouche comienza a llorar sin motivo Diluc debe mantenerlo en su pecho y mimarlo para hacerlo sentir amado, porque el motivo de sus lágrimas siempre será el sentimiento de soledad que lo acecha.
ESTÁS LEYENDO
permítame servile - Diluc / Scaramouche
FanfictionLa mejor manera de poder ayudar al viajero y recolectar información de manera precisa era infiltrarse en Fatui directamente, para desgracia de Diluc debía de lidear con el heraldo perteneciente a inazuma. [Nota: Aquí no sé sabe que Scaramouche robo...