capítulo 26, heraldo miserable

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El movimiento brusco del carruaje despertó al subordinado y su heraldo, los giros descontrolados de la cabina empujo a ambos cuerpos contra el techo, luego contra el suelo, Diluc se aferró con fuerza al cuerpo de Scaramouche luego de que su cabeza golpeara contra la ventana, no entendía que estaba pasando, ¿Los habían atacado? Se supone que solo estaban viajando con personal de confianza que debían proteger al sexto heraldo, ¿Cómo paso esto? Un quejido salió de su cuerpo cuando su espalda se golpeó contra una de las sillas, podía escuchar los gritos de Scaramouche y el gato, la marioneta estaba obstinada en no dejar escapar al animal de la seguridad de sus propios brazos mientras intentaba decirle algo, pero no podía entenderlo bien, un pitido intermitente en su oído lo impedía, el pelirrojo tampoco podía ver a su halcón, ¿Tal vez había salido a volar después de que se durmieron? Tenía la costumbre hacerlo, iba a dar una vuelta y luego regresaba, pero no pudo pensar más en eso, otro golpe especialmente fuerte en su cabeza le hizo perder el conocimiento, viendo completamente negro.

El siguiente momento donde pudo abrir los ojos vio como estaba por fuera del carruaje, en el suelo, el pequeño minino estaba a su lado, sintió su cabeza sumergida en dolor, intento moverse, pero no podía sentir su cuerpo, uno de sus ojos se estaba manchando con sangre, ¿Era suya? Intento buscar con la mirada al heraldo, habían caído a un barranco, la estructura se deshizo en la dura caída, destrozando el techo que ahora se encontraba a unos metros, arrancado del armazón principal, escucho los lamentables relinchos de los caballos, algunos estaban intentando levantarse, otros estaban terriblemente quietos, enfoco su mirada lo más lejos que pudo, ahí estaba el cuerpo del conductor, inerte, esta no era su ruta para llegar a Fontaine, estaba seguro, ¿Por qué se habían desviado? La sensación de peligro le lleno el pecho, comenzó a mover su cuerpo frenéticamente, intentando hacer reaccionar sus piernas.

Tosió un poco de sangre, manchando el suelo, cuando logro levantarse pudo divisar a la marioneta, intentando sacar algo del destrozado carruaje, era la pequeña caja que estaba debajo de su asiento, era la gnosis, ahora estaba seguro, ¿Qué más tendría tanto valor como para hacerlo entrar a la desordenada estructura plagada de cristales y tablas de madera rotas? Se movió en su dirección, el más pequeño parecía no tener la fuerza necesaria para sacarla, los asientos se habían salido de su lugar, aplastando obstinadamente la caja debajo de ellos.

- T-Tenemos que salir de aquí, alguien nos atacó, no es seguro este lugar - tartamudeo, pasando detrás del heraldo y apoyándose en los asientos, usando toda la fuerza que pudo encontrar para mover las sillas, sintiendo como algunos de sus músculos se tensaban, dándole campó al heraldo para tomar la caja.

Dejo escapar un jadeo que desgarro su garganta, estaba más herido de lo que temía, su espalda gritaba por un descanso, por volver a recostarse en el suelo. La marioneta se mantuvo en silencio, observándolo despiadadamente, con una mirada juzgadora, dolida, intentando encontrar algo en él.

- ¿No has causado tu esto? ¿No son estos tus planes para conseguir lo que buscabas? - cuestiono venenoso, pero podía notar como sus ojos se teñian con las lágrimas, estaba temblando, la acusación dolió en su alma, pero sabía que tenía fundamentos para hacerlo.

- No mi lord...yo...yo no sé qué diablos paso aquí - agarro su costado con dolor, hablar costaba más de lo que pensó.

- ¿Cómo sé que no es una trampa? - sonaba tan molesto, incluso desesperado, levantándose para encararlo, podía ver sus piernas ensangrentadas, la piel sintética se había roto, dejando fluir no solo el líquido carmesí, si uno color lila.

- Tengo que volver con el objeto que busco intacto...incluido yo mismo... esto mi señor...es una estúpida forma de no solo de arriesgarme a destruir lo que busco, si no de suicidarme en el camino - tuvo que hablar pausado, sus pulmones se sentían cada vez más llenos, pesados, no sentía que el oxígeno estuviera llegando a ellos, otra tos y más sangre cubrió su mano, ¿la caída había colapsado sus pulmones?

El heraldo pareció meditar sus palabras, respirando con fuerza, parecía no estar herido gravemente, aunque debía atribuirlo a que su propio cuerpo sirvió como escudo para el más pequeño, un espasmo acompaño otra tos, no pudo resistir el seguir en pie, dejándose caer al suelo, las arcadas llegaron a él, había mucho sangre, estaba vomitando demasiada sangre, pero si se permitía ser positivo era mucho mejor esto, ya lo había vivido antes, cuando cazaba en solitario a los Fatui luego de su pelea con Kaeya, era peor cuando tenía una extremidad rota, intento invocar a su claymor, necesitaba abrir su pecho para liberar la presión en sus pulmones, ya no podía respirar más, sentía como las esquinas de su visión se oscurecían, realmente estaba mal, antes de poder hacer algo sintió las manos más pequeñas sujetándolo y recostándolo en el suelo, pudo ver un brillo morado cubrir el rostro del heraldo, sus ojos se llenaron de negro, había perdido la consciencia de nuevo.

La segunda vez que pudo recuperar la consciencia estaban en una cueva, se encontraba en el suelo, con la cabeza en las piernas del heraldo, desde su posición podía ver como Scaramouche tenía fija su cabeza en la entrada de la puerta, sus manos estaban en su cuerpo, una en su frente, otra en su corazón, podía sentir como enviaba pequeñas olas de magia en él, era electrizante, pero se sentía mucho mejor.

- Tenías razón, estábamos en peligro allá afuera, una tropa vino a buscarnos, tuve que matarlos a todos - la voz del heraldo era un susurro, se tomó un momento antes de mirarlo fijamente - Los envió Dottore.

Silencio de nuevo, sintió como su rostro era manchado por las lágrimas del heraldo, también podía sentir el temblor en su cuerpo, intento reincorporarse, el dolor pincho en sus articulaciones, pero decidió ignorarlo, al menos podía respirar.

- ¿Sabes porque nos seguían? - No le sorprendió que un ataque de este nivel viniera de una persona tan deplorable como el segundo, pero no podía encontrar una razón para ello, ¿Tal vez Dottore descubrió como él que Scaramouche tenía la gnosis electro?

- No lo sé, ellos no lo sabían, solo tenían la orden de llevarme con ellos - Un suspiro tembloroso escapo de los labios del de ojos índigo, llevando la mano a su pecho intentando calmarse.

- Debemos irnos de aquí, no tardaran en mandar a más hombres a por nosotros - vio a su alrededor, el pequeño gato estaba recostado en lo que parecía ser su abrigo, seguramente robando la calor de su visión, Scaramouche debió quitárselo para atender a su heridas.

- No tengo idea de donde estamos, ni de dónde ir, estamos solos, algunos de los carruajes que nos acompañaban estaban más atrás, a unos metros de aquí, también los empujaron a este barranco, todos están muertos, no sé qué paso con el resto - lagrimas cayeron con más fuerza, incrementando los temblores, parecía intentar mantener la compostura, pero Diluc lo sabía, estaba tan angustiado como él - Pude perderte, casi mueres, si no hubiera tenidos mis poderes estarías con la muerte - Un sollozo ahogado broto, seguido por muchos más, quebrando el corazón del pelirrojo.

- Está bien, estoy bien, sigo vivo, estamos juntos - lo abrazó con fuerza, atrayéndolo a su pecho - Hay que buscar un punto de tele transporte, debería haber alguno por acá, siempre hay uno cerca, se cómo usarlos, el viajero me enseño a utilizarlos - La sola mención del rubio causo tensión en los hombros del más bajo, pero decidió no decir nada - así podremos ir a un lugar más seguro.

- ¿Cómo cuál? ¿A dónde se supone que iremos? Dottore está buscándome y no tengo idea de porque, va a encontrarme donde sea - podía sentir la impotencia en su voz, mirándolo fijamente, angustiado hasta los huesos.

- No en Mondstadt, mucho menos en viñedo amanecer, los Fatuis no tienen poder allí y nadie va a decirme que no a tenerte allí a mí - y con eso decidió quitarse la máscara, dejando a Scaramouche por fin ver al completo su rostro.

Solo los sietes sabían que había perdido la cabeza por culpa de este obstinado heraldo.

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Bueno, aquí les traigo otro capítulo, aproveche y cambie la portada de la historia ¿Qué opinan de la nueva?

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⏰ Última actualización: Sep 06 ⏰

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