En cuanto lo vio salir de su habitación puso manos a la obra. Se acomodó en el mueble en una postura que transmitiera pereza, fingió interés en el móvil y subió el volumen del video que estaba viendo.
Souichi fue directamente a buscar agua a la cocina, encontró a su co-habitante demasiado pacífico.
«Sospechoso...» pensó mientras lo miraba a través del vaso de cristal.
—Senpai...
—¿hmm? — respondió mientras lavaba el vaso.
—¿me ayudas?
Souichi se secó las manos y empezó a sentir una atmósfera rara. Agudizó sus sentidos y percibió el audio de su móvil.
—¿a qué? — dijo con los brazos cruzados y una ceja elevada.
"Dividimos el cabello en tres grandes secciones, es importante seguir el mismo patrón y aplicar la presión suficiente para que no se escurra la trenza..."
Mientras Morinaga evadía la mirada de su senpai, este se mordía una uña con aparente concentración en lo que estaba viendo en su móvil.
—necesito que me ayudes con algo. Kanako me ha pedido peinarla el fin de semana para su fiesta y necesito practicar con alguien.
—¿y por qué la vas a peinar tú? — le exigió con leve molestia.
Morinaga despegó la mirada del tutorial, le afrontó con seriedad y una pizca de perseverancia.
—¿quién más la podría peinar?
—mi tía...
Ambos se miraban con desafío tratando de encontrar una falla en el argumento del otro.
—¿te acuerdas dónde va a estar el fin de semana? — le respondió Morinaga alzando una ceja en señal de victoria.
La tía Matsuda le avisó a su sobrino de su viaje al cual Kanako no quiso ir porque su fiesta era ese fin de semana, por lo que tomaron un acuerdo y la chica se quedaría con su hermano.
—es cierto...pero, ¿por qué tú?
Quería buscar una posibilidad para ganar y librarse de quién-sabe-qué tenía planeado aquel tipo.
—¿acaso tú la vas a peinar?
Souichi se desplomó y aceptó su derrota.
—mierda...— bufó aceptando su destino, sea cuál sea — ¿qué hago? — cuestionó de mala gana.
Morinaga se contuvo de sonreír para no espantarlo.
—ven, siéntate aquí. Practicaré trenzas contigo—. Lo acomodó en el sillón y buscó su móvil para ver nuevamente el tutorial.
Y sonrió al sentir la suave y rubia cabellera de Souichi-san entre sus dedos.
