❋EPISODIO 22❋"en el mas horrible jardín"

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*en este cap se trataran temas +21 (no segg), si eres susceptible a escenas como estas, pueden avanzarle a la historia*

"en el mas horrible jardín"

Mylen Sharon

2019, 11 de marzo

Tenia mucho en mente para esta semana, la presentación, tareas, festival, trabajo.

Incluso Alex está un poco raro, pero no tan diferente como lo usual. 

hoy a las 12 de la tarde iría a la universidad para la prueba, esperaba que eligieran a Ian sobre los demás, tenia buena mano para los instrumentos.

Estaba preparando un sándwich para calmar mi estomago lo que restaba del día, mientras tarareaba una canción de Disney que había escuchado más temprano en mi celular.

—me haces uno, porfavor.

Llego detrás de mi Alex y paso ambos de sus brazos por mi cintura con pereza, decidí no levantarlo y como dije, Alex podría dormir un día entero si así lo quisiese.

—¿con o sin lechuga?

El hace una mueca mientras recarga su barbilla en mi hombro, su pecho se pega a mi espalda y sus pies chocan con los míos, quitando mi capacidad de caminar.

—sin. hoy no quiero lechuga.

—hoy ni nunca, imagino —digo burlona.

—me conoces bien —responde acercando sus labios a mi cuello y dejando pequeños besos alrededor del área.

Me voltea frente a él y acerca su cara sorpresivamente, debido a mi altura debo mirar hacia arriba con torpeza, y antes de que pegue nuestros labios meto un sándwich en su boca deteniéndolo, el pone mara cara, se quita el pedazo de comida y mastica con tranquilidad.

—debo irme, tengo prueba.

—bien, igual no quería un beso, mas bien, deseaba tanto el sándwich que te confundí con uno.

—me da tanta gracia tu comentario, sigue diciendo cosas así. —estaba segura de que volvería a refutar así que le di un corto beso en sus labios, y termine alejándolo antes de que se intensificara.

Porque lo conocía ya lo suficiente.

Tomé mi celular y corrí hacia el elevador dejando a la gente asustada que pasaba a mi lado. Llegaba un poco tarde.

Llegue al aula con algunas gotas de sudor recorriendo mi espalda, Ian me esperaba dentro.

—señorita, es vuestro turno. —bien, ahora sí que estaba nerviosa. Yo no tocaría la pieza, pero esperaba pasara para mi calificación.

El es bueno tocando, pensé miles de veces para tranquilizarme.

empezó a tocar la pieza con la partitura sobre el piano, empezó la melodía con un toque ligero, suave y melodioso, como si bailaras en un cuento de fantasía con el amor de tu vida.

Y por mi mente, solo un instante corrió una viva imagen creada por mi subconsciente. Yo bailaba muy alegre en un campo floreado, junto a nada mas y nada menos con la persona a la que metí un sándwich en su boca.

Para cuando volví a la sala donde la musca dejo de sonar con rapidez, la maestra veía sorprendida a Ian, como si nunca se hubiera imaginado escuchar eso.

—¿Quién la ha escrito? —Ian me señalo como si fuera la culpable de una atrocidad.

—señorita mylen, ¿ha escrito usted la pieza? —asentí con la cabeza, la verdad es que no, solo tome unos cuantos papeles de partituras que escribí hace años cuando lo tocaba, ahora ni loca podría escribir algo así.

Una flor de otoño (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora