XVIII. Maldivas

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Bora

Abrí los ojos, la luz se colaba por la ventana, me moví solo un poco para tomar mi celular, eran casi las 10 a.m. me gire y visualice a Ada, estaba profundamente dormida y como no si apenas habíamos dormido.

Salimos por la noche y aterrizamos apenas en la madrugada, luego nos trasladamos al resort y apenas si pudimos dormir.

Había estado pensando por varias semanas a qué lugar iríamos de luna de miel, no sabía si le gustaría a Ada, pero después de ver su cara, lo feliz y emocionada que estaba, puedo asegurar que le encanto el lugar.

Maldivas fue uno de los lugares que elegí para nuestra luna de miel, sé que a Ada le encanta la playa y que mejor lugar que este para estar tranquilos sin que nadie nos moleste, además que tiene unas vistas increíbles.

Se removió en su lugar y abrió lentamente sus ojos aun bostezando.

-buenos días -dijo después de unos segundos.

-buenos días -respondí con una sonrisa.

-¿Qué hora es? -preguntó.

-las diez

-¿Qué? -abrió los ojos y se sentó en la cama, quitando los restos de sueño. -Bora ya es muy tarde.

-¿tarde para qué? -pregunte restándole importancia.

-tenemos que recorrer el lugar, sabes a donde hemos venido ¿no?

-Ada, no nos quedaremos aquí solo hoy, tendremos más días para recorrer el lugar, podemos quedarnos aquí -dije atrayéndola a mí.

-buen intento -dijo separándose y poniéndose de pie. -date prisa, quiero ir a la playa.

-¿no se supone que venimos a nuestra luna de miel?

-sí, pero no voy a perderme estas hermosas vistas, además a ti te tendré por muchos años más, no sé cuándo vuelva a venir acá -dijo entrando al el baño.

Me levante con resignación, sería un día muy largo...

***

-es muy hermosa la vista ¿no? -me pregunto con la vista hacia enfrente.

-por supuesto, pero me encanta más otra vista -dije bajándome las gafas mirándola.

Estaba postrada en una camilla tomando el sol, con un traje de baño que hacia contraste con su piel y unas gafas de sol.

Me miro por el comentario pero no me dijo nada.

-escuche que hay muchas actividades deportivas, tal vez podamos hacer algunas -dijo aun con la vista al frente.

-¿ah sí, y como que te gustaría hacer? -pregunté.

-no lo sé, el kitesurf tal vez, o el bodyboarding, bucear también me gustaría o un paseo en canoa.

-¿estas segura que sabes nadar al 100%?

-ya te lo dije, tome un curso de natación, estaba por terminar pero lo tuve que dejar porque tenía mucho trabajo y no podía ir. Además no lo hare sola, habrá profesionales a mi lado y estarás tu para que me cuides -me miro.

-bien, como quieras -dije rindiéndome, no podía pelear con ella sabiendo que perdería.

***

-y bien ¿qué vas a pedir? -le pregunté a Ada mientras revisaba la carta.

-no lo sé, estoy indecisa, todo se ve delicioso.

-welcome, good night. What are you going to order? -preguntó el mesero.

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