XI. ¡Feliz cumpleaños Ada!

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Ada

El ruido de la puerta me despierta.

-¡iyi ki doğdun Ada!, ¡iyi ki doğdun Ada!¡iyi ki doğdun! ¡iyi ki doğdun! ¡iyi ki doğdun Ada! -entraron cantando mis tías, mi cuñado y Selin.

-feliz cumpleaños kızım, que Allah te proteja siempre.

-gracias tías -respondí.

-felicidades amiga, mis mejores deseos para ti -dijo Selin dándome un abrazo.

-vamos, levantate, el desayuno está listo.

No había tenido tiempo de hablar con mis tías, sobre la empresa y que mi jefe era el nuevo socio de Bora, aproveche para contarles todo lo que había pasado, como me dijo que no me guardaba rencor y que ahora éramos amigos, que vendrían a cenar en la noche.

Mi celular sonó, era un mensaje de Bora.

"¡feliz cumpleaños Ada! Nos vemos en la noche".

Sonreí, respondiendole el mensaje.

"gracias, aquí te espero".

Les dije a mis tías que tenía que ir al trabajo, pero llegaría a tiempo para la cena.

Llegué a la oficina y no había nadie, era raro porque la mayoría ya debería estar, iba a mi oficina cuando prendieron las luces y salió Kaan con un pastel seguido de todos los demás.

-¡iyi ki doğdun para la mejor amiga de todo el mundo! -dijo Kaan acercándose.

-gracias a todos.

-pide un deseo y sopla la vela.

Cerré los ojos y pedí un deseo, no puedo decirlo porque si no no se cumple.

-te deseo toda la felicidad del mundo, y que llegues muy lejos amiga, es bueno tenerte, te quiero mucho -me dijo Kaan abrazándome.

-gracias, también te quiero -dije correspondiendo su abrazo.

Fuimos a mi oficina y había ramos de flores, chocolates, y muchos regalos más.

-¡vaya! si que la gente te ama, mira cuántos regalos.

-la mayoría son de los socios y los clientes.

-de acuerdo, entonces el fin de semana iremos a tomar algo, ya que no celebraremos hoy, lo haremos el fin y antes de que digas algo, no aceptaré un no por respuesta.

-sabes que el alcohol y yo no nos llevamos bien -la dije.

-lo sé, puedes tomar agua si quieres, yo me tomaré las tuyas, el punto es que vayamos a algún lugar ¿Si?

-mmm.. de acuerdo, iremos el fin -le dije sonriendo.

-yees -dijo haciendo señales de triunfo.

-señorita Ada -el sonido de la puerta nos interrumpió.

-¿Si, qué pasa?

-traen un pedido para usted -me dijo la secretaria.

-adelante, hazlo pasar.

Entro un hombre con un ramo de rosas muy grande, con un oso de peluche al centro.

-¡wooooow! -dijo Kaan sorprendido

-me puede firmar aquí de recibido por favor -me dijo el hombre.

-gracias.

-¿Quién te lo mando? -preguntó Kaan intrigado.

-no lo sé. Ahhh espera, aquí trae una tarjeta.

-¿Serán de Bora?

-no lo creo, el sabe que no me gustan las flores que son arrancadas -dije abriendo la tarjeta.

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