Mi esperanza

Capítulo 15

Su cuerpo estaba cansado, su mente agotada y él solo se quedó tirado en el suelo viendo el cielo nocturno, el plazo de una semana que dio estaba por cumplirse y él en verdad estaba enojándose con la mujer, sus ojos se cerraron y él recupero el control sobre sus emociones, luego estaba Orochimaru, sabía que tendría que enfrentarlo y lo iba a matar sin importar que, esa era una realidad, el chakra de Kurama lo cubrió y le dio tres colas, no podía pasar de ahí, ese era su límite en ese momento, límite que planeaba romper de un modo u otro.

- ¿Te dejaste drogar? – él pregunto viendo a su mareado maestro.

-Más que dejarme, me engaño – el hombre respondió mientras se ponía de pie por su cuenta – localízala.

-Entendido.

Ellos habían planeado partir solos, sin embargo, Shizune se unió a ellos después de que despertará de su estado de noqueo y se preocupará por su maestra, él dirigió el camino, su capacidad sensorial encendida al máximo y trabajando horas extra, entonces su oídos captaron el sonido de un potente golpe y aceleró, corrió tan rápido como le fue posible siendo seguido por los dos adultos, la mujer apenas siendo capaz de seguirle el paso al chico.

-Que conmovedor, el equipo vuelve a reunirse – Orochimaru exclamo con un tono sarcástico – también está el niño zorro.

Sus ojos se volvieron rojos mientras el patrón del uzugan aparecía alterando la forma de su pupila y sin esperar alguna señal él saltó al ataque, ni siquiera se detuvo cuando dos serpientes fueron convocadas y se lanzaron en su contra, guiándose por el enojo en su interior, él solo dejo que las invocaciones lo atravesaran mientras el suelo era quebrado bajo sus ataques, con un salto él quedó delante del sanin enemigo, su mirada enojada estuvo en contraposición con la sonrisa divertida, fue entonces que el rubio sonrió con diversión.

- ¿Te molestan tus brazos? – él cuestionó, su sonrisa se amplió cuando vio el ceño fruncido de Orochimaru.

Una rápida patada fue bloqueada con dificultad y el sujeto salió volando bajo una fuerza que llego a parecerse a la de Tsunade, una mano rodeada por chakra celeste atravesó su espalda y salió por su pecho, sin embargo, no hubo daño alguno, solo un rasengan que impactó en el abdomen antes de enviarlo a volar por la propia potencia del ataque, el cual destruyó incluso la tierra a su alrededor.

- ¿No fuiste muy impulsivo, Kabuto? – él pregunto con una mirada ligeramente enloquecida, deseaba acabar con el sanin, el otro no le importaba más allá de un simple enemigo.

-Sí, lo fui, pero ese simple jutsu no me...

El chico solo vio como el subordinado del sanin caía arrodillado al suelo, su mirada entonces cambio de objetivo, una ligera capa de chakra rojo burbujeante lo rodeo junto a tres colas que brotaron de la parte baja de su espalda, sus sentidos gritaron y él se movió hacia un lado, pero no lo suficiente, pues cierta espada se encontraba atravesando su hombro derecho, su mano apretó la hoja del arma, rompiéndola bajo su gran fuerza, el resto de la espada cayó al suelo y su mirada comenzó a ser borrosa.

-Lux – Naruto llamo, el zorro apareciendo de su sombra – apoya a Jiraiya y mata a esa maldita serpiente.

-Como ordene, Naruto-sama – el zorro contestó antes de comenzar a crecer, viendo como el niño caía inconsciente – tú, mujer sanin, si sigues guardando algo de orgullo como médica, no lo dejarás morir, Jiraiya, hagamos esto.

Aceptando las palabras del zorro, Jiraiya saltó sobre la cabeza de Lux, sus manos pasando por sellos antes de que su pecho se inflará y una ráfaga de fuego saliera de su boca siendo mejorada por una de viento que salió de la boca del enorme zorro, el mar de llamas voló hacia el sanin de las serpientes y un combate entre lo tres comenzó, en algún momento el jefe de los sapos, Gamabunta, Katsuyu, la babosa de invocación de Tsunade y Manda, el jefe de las serpientes aparecieron, resultando en un tres contra uno visto de cierta manera.