Mi esperanza

Capítulo 23

Los ojos rojos miraron a los ámbar de pupila cortada, el sitio se lleno de una impresionante presión y ante el rostro inexpresivo del chico llego como respuesta la sonrisa divertida del sanin, los nueve apéndices cubiertos en chakra azul oscuro apuntaron en dirección del hombre, el cual comenzó a moldear su chakra para cualquier tipo de ataque que el rubio pudiera enviarle, Naruto tampoco se había quedado atrás, su chakra se disparó incrementando cualquier característica física que pudiera ser utilizada en combate.

- ¿Dónde dejaste a Sasuke? – él cuestionó con su rostro todavía inexpresivo.

-Kukuku, parece que el niño zorro todavía no entiende la decisión de su ex compañero de equipo.

-Si golpearlo es no entender su decisión está bien por mí, pero yo te voy a golpear en nombre de Jiraiya, así que prepárate.

En cuestión de un parpadeo el chico apareció delante del sanin, su mano derecha convertida en una garra a causa del chakra que envolvía su extremidad, el golpe hizo que el viento se moviera con violencia y Orochimaru saliera volando con su cuerpo habiendo sido destrozado en varias partes, sin embargo, a pesar de ello otro salió de la boca del primero, se encontraba completamente ileso y sorprendido, pues la velocidad que el chico manejo fue superior por mucho a la que espero en un principio.

Una sonrisa algo enloquecida apareció en el rostro del chico, sus colmillos quedaron a la vista, las marcas de bigotes en sus mejillas se hicieron más agresivas y sus ojos brillaron en un tono carmesí mientras el patrón del uzugan parecía girar, una inusual ira lo abordó, la marca en su pecho brillo bajo su ropa, decidiendo que solo necesitaba un poco de cordura para no atacar a sus compañeros, Naruto dejo que sus emociones tomaran un poco más de control sobre sí mismo, el azul oscuro se volvió todavía más ominoso y con él decidido a cubrir el trabajo de su maestro, solo miro de reojo a Kabuto.

-Duérmete – él dijo con el patrón del uzugan girando y metiéndole en algo más poderoso que un simple genjutsu.

Con eso dicho su concentración quedo puesta sobre Orochimaru, los nueve apéndices que se movían como si tuvieran mente propia volvieron a apuntar hacia el sujeto, no importó que fuera lo que el sanin estuviera hablando, el chico ya no era consciente de esas cosas y con su mano derecha colocada en el suelo, sus rodillas dobladas y su otra mano levantada como una garra dispuesta a cortar, se movió a una velocidad incluso mayor a la de antes, el puente se rompió bajo su avance y lo último que el invocador de serpientes entendió fue que había sido mandado a volar.

En su interior, dos ojos rojos miraron con poder mientras más chakra era enviado, ahora que no hería a su jinchuriki gracias a lo ocurrido en su pasado, Kurama ofreció todo su poder a su segundo amigo, sin preocupación alguna, chico y bijuu dejaron cualquier duda de lado y con ello solo hubieron dos objetivos, uno, frenar al sanin que tenían delante, dos, proteger a los que estaban detrás, siempre podrían mantener una ligera vigilancia sobre Sai, pero eso podría esperar, entonces, con marcas naranjas que aparecieron alrededor de los ojos de Naruto, árboles comenzaron a crecer y con ello parte del puente fue destruido y el combate entre dos ninja de clase S comenzó.

La mitad del puente en la que antes estuvieron Orochimaru y Kabuto ya no se encontraba y sobre una rama él estaba parado, con la espalda pegada a un árbol estaba el sanin, al cual le faltaba un brazo, entonces los dos desaparecieron en explosiones de velocidad, unos segundos después se vio a lo lejos como una zona del bosque explotaba, el puño del chico estaba enterrado en el suelo donde un enorme cráter había aparecido y, a pesar del daño, césped comenzó a crecer bajo el potente chakra que chico y bijuu se encontraban emanando.

Los apéndices volaron hacia Orochimaru con tal de no darle el más mínimo respiro, no dañando el suelo más de lo que lo había hecho, estos se movieron con poder, el aire siendo desplazado por el movimiento de cada cola mientras una esfera negra aparecía entre las manos del chico, chakra azul y rojo combinándose en perfecto equilibrio, marcas rojas recorrieron la capa de chakra, la forma de un remolino se formó en las palmas de sus manos, decidiendo tomar en serio al sujeto fue con todo desde un principio.