【Capítulo 35】

60 8 3
                                    


Punto de vista de Leonor:

«Justo ahí Leonor»

Dijo Silvia indicándome el lugar exacto de la ubicación de la corona.

—Entendido

Con mi velocidad me acerqué, pero justo antes de pasar por encima de una roca que estorbaba en el camino, tuve una sensación negativa, así que di un paso atrás y...

(Explosión)

Tal como presentí, no era buena idea, aquella roca enorme que estorbaba, exploto totalmente.

Me alejé bastante rápido del lugar para evitar que partes de la roca me impacten por el estallido.

(Sonido de múltiples pasos acercándose)

Al parecer esto fue una trampa hecha por varias personas, ¿en serio aún hay gente haciendo equipo a estas alturas de la competición?

Pensé al escuchar pasos de varias personas.

—Vaya, vaya, ¿aquello que veo acaso es una jovencita?, que suerte tenemos, ¿no muchachos?

Dijo un hombre caminando hacía mi dirección, mientras el polvo de la explosión, empezaba a dispersarse.

«Son cuatro hombres»

Me informó Silvia.

Una emboscada eh...


***


Punto de vista de un participante:

—Se ve jugosa...—Lamiéndose los labios—.

Dijo mi compañero Dick.

—No te confíes maníaco de mierda

Le indiqué.

Aquella chica al parecer no está escapando a pesar de saber que vamos a por ella, ¿acaso tiene pensado pelear contra nosotros?

Me puse a razonar.

—Aléjense de mi camino, les avisó, se arrepentirán si quieren pelear

Declaró la jovencita.

—¡Ayy...! —Fingiendo miedo—. Que susto... ¡tus amenazas me atemorizan!

Le respondí tratando de provocarla.

Ahora mismo, todos estamos en posición, uno de mis compañeros a mi izquierda y el otro a mi derecha.

(Estrepitoso sonido)

Fue entonces que sentí una inexplicable sensación de presión, por reacción levanté la mirada y vi como la jovencita se dirigió hacia nosotros, antes de que pueda reaccionar para dar instrucciones a mis muchachos, ella ya estaba frente a mí.

¡Qué rapidez!

(Sonido de trueno impactando)

Una patada rebosante de electricidad, me impacta de llenó en la costilla.

Salí volando cinco metros de mi posición, para culminar tocando tierra de manera brusca.

—Mierda...—Sangre chorreando en el suelo—.

La sangre salía de mi boca fluidamente, esa chica no es normal, ¿Qué mierda fue eso?

Pensé consternado.

RE: UN MUNDO DESDE CERODonde viven las historias. Descúbrelo ahora