Profecía JK II. Salvación ( + 18 )

PROLOGO

JUNGKOOK

—Jungkook tienes que ayudarme —mi hermano andaba detrás de mí.

No quería escucharlo, seguro que quería algo de mí, siempre me buscaba para sus asuntos sucios. Él era el importante CEO y sin embargo yo era la rata de alcantarilla. Para mis padres siempre fue el impecable Jonsuk  mientras yo era el bueno para nada de Jungkook.

—¡¿Puedes parar un momento?! —cogió mi brazo con fuerza y me giró para que lo mirara a la cara.

¡Maldita sea! Verlo me incomodaba, era verme en un espejo pero con mi pelo engominado y con un traje de miles de dólares, odiaba ese mundo de tipos inseguros con pollas pequeñas y el ego demasiado grande.

—Jonsuk no quiero nada de tí así que tú tampoco quieres nada de mí —le dije de mala gana.

—Tienes que ayudarme, cuando lo hagas nunca te volveré a pedir nada más te lo prometo —dijo y puso su mano descansando en mi hombro, se la quité con un fuerte golpe.

Me volví y seguí andando hasta que llegué hasta mi moto, cogí el casco para ponerlo en mi cabeza. De nuevo se puso ante mí.

—Hoy quieres que te rompa la cara esa de gilipollas que tienes...¿No? —apreté mis dientes y le puse una mirada asesina.

—Si yo la tengo de gilipollas entonces tú la tienes igual —reía....al verlo burlarse de mí lo cogí de su chaqueta de diseño, lo agité con fuerza.

—No me jodas la vida porque sabes que puedo romperte en pedacitos con solo un
puñetazo — acerqué mi cara a la suya y mis ojos y mi rostro me decían que tenía miedo. Sólo ver que no tenía una pequeña cicatriz en su mejilla casi imperceptible me relajaba un poco. El haberme caído de pequeño y haber ganado esa cicatriz me hacía único.....y eso me gustaba.

— Solo tienes que hacerte pasar por mí un tiempo —dijo así de pronto.

Entrecerre mis ojos y lo empujé con fuerza y cayó al suelo.

—¡Estás loco!

—Jungkook solo será por unos meses, tengo algo importante que arreglar y tendré que estar en otro lugar muy lejos —dijo cómo si a mí me importara la mierda que decía.

—A mí no me importa tu vida de lujo y toda esa mierda de líos que tienes siempre — dije enfadado y pasé mi pierna por mi moto y subí deprisa.

—Voy a ser padre —lo miré sorprendido.

—¿Shayni está embarazada? —le dije y mi pecho se contrajo.

—No —puso su mirada al suelo— es de mi amante.

Quería matarlo, lo asesinaria.....