Naruto, quien había estado encerrado todo el día, estaba tirado en la cama, mientras las palabras de Hinata le daban vueltas en la cabeza, se sentía un imbécil total. Pero ¿cómo fue a pasar aquello con Shion? ¿En qué momento, si no recordaba nada? ¿Y por qué no se acordaba de nada?
—No entiendo... no entiendo nada... —se decía golpeando la cama débilmente con sus puños cerrados, en eso, escuchó que la puerta sonaba—. ¿Será Hinata? —pensó.
—Perdón, Naruto, soy yo, Shion —el rubio se decepcionó un poco al saber que no se trataba de quien esperaba, pero de igual manera, decidió contestar.
—Pasa, Shion —dijo sin ánimos, ni siquiera tenía ganas de levantarse, aunque alguien más estuviera ahí, él se quedó recostado.
La chica rubia entró a la habitación y al verlo tirado sobre la cama supuso, que las cosas habían ido muy mal con Hinata; eso era justo lo que quería, por fin esa Hinata y su Naruto se habían alejado, así que sonrió internamente al haber cumplido su cometido.
—Naruto... yo... siento mucho lo que pasó —fingió una mirada dolida y bajó la cabeza, como si realmente se sintiera terrible, aunque bien sabía que estaba disfrutando de esto como nunca.
—No te disculpes... —contestó Naruto, sentándose sobre la cama para verla, él pensaba que todo era su culpa, Shion siempre había sido una chica "inocente", era imposible que ella hubiese hecho las cosas con mala intención.
—Pero de verdad, no debí dejarme llevar... me puse tan feliz cuando me dijiste que querías estar conmigo que... que no me pude resistir —ella se sentó al lado de Naruto, sus ojos se llenaron de lágrimas, realmente era buena para fingir, no había otro modo de describir su actuar.
Naruto se llevó ambas manos a la cabeza, agarrándola con fuerza.
—¡¿Pero por qué mierda no me acuerdo de nada?! —exclamó, estaba furioso y desesperado, pero no podía culpar a Shion por sus acciones, creía que no era lo correcto.
—N-no lo sé, Naruto... —respondió Shion con una débil voz, haciéndose la víctima. A Naruto le sobrevino la culpa por haberle gritado, después de todo, ella sólo era una chica enamorada, nada más y nada menos.
—Perdóname, Shion —dijo el rubio—. No debí gritarte.
—No importa... —Shion negó con la cabeza—. Yo no estoy enfadada contigo —aseguró, tomando la mano de Naruto que estaba sobre el colchón, pero éste rápidamente la apartó, el contacto con ella lo hacía sentir realmente incómodo.
*· - _ - ·**· - _ - ·**· - _
Después de lo ocurrido con Sasuke, Sakura había corrido hasta su cuarto e Ino, tras ella, le dio por fin alcance cuando la primera atravesó la puerta y comenzó a derramar lágrimas.
—Sakura, ya cálmate, deja de llorar —decía la rubia mientras la abrazaba, sabía lo mal que debía estarla pasando ahora mismo su amiga.
—Pero Ino... es que... ya no lo volveré a ver... solo en un mes, tampoco los veré a todos ustedes, los voy a extrañar tanto... —decía entre sollozos la peli rosa, a lo que Ino suspiró, ya se temía que en cualquier momento Sakura se iba a poner así.
—Lo sé, Sakura, pero no estés triste, al menos disfruta este tiempo que aun te queda, no llores que me vas a hacer llorar —la rubia la abrazaba más fuerte, mientras algunas lágrimas caían por su rostro también.
En eso, Sasuke irrumpió en su cuarto abruptamente.
—¡Sakura! —exclamó, avergonzándose ligeramente cuando vio que la Haruno no estaba sola, así que carraspeó su garganta.
ESTÁS LEYENDO
Amores de Secundaria (Editada)
FanfictionEl amor verdadero puede llegar en cualquier etapa de la vida, no sólo cuando ya eres un adulto. Naruto y sus amigos aprenderán, a veces a golpes, cómo es amar y crecer al mismo tiempo. Madurar no es fácil, pero es parte de crecer. Historia re edita...