Una apuesta 2/2

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Nada más para aclarar, la historia NO es SasuHina, pero hay una escena de ellos y la imagen estaba linda xD

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Gaara y Sasuke se estaban dirigiendo hacia el estacionamiento de la escuela, ellos, como muchos de los alumnos más ricos del instituto, tenían automóvil propio y solían presumirlo ante los que no podían darse esos lujos.

—¿De verdad la invitase a salir? —preguntó el pelirrojo a su amigo, buscando las llaves de su auto en el bolsillo del pantalón.

—Sí, Gaara, pero no lo digas tan fuerte, no quiero que Neji se entere —respondió Sasuke, mirando para todos lados con nerviosismo.

—¿Y por qué no? Que yo me acuerde, él te dio su aprobación —comentó Gaara, encogiéndose de hombros.

El azabache frunció el ceño.

—Lo sé, pero ya sabes cómo es, lo más seguro es que quiera ir a espiarnos o incluso vaya con Hinata y así mi cita estaría arruinada.

—Ah, claro, es verdad —dijo Gaara, un poco perturbado al pensar en ello, pues era tremendamente probable.

—A propósito, ya me contó Neji sobre el escándalo que armaron tú y Matsuri en la cancha de fútbol, me hubiera gustado estar ahí para verlos.

Esta vez quien frunció el ceño fue Gaara, Sasuke parecía que se estaba burlando y aquello le hizo sentir avergonzado y molesto.

—No seas idiota, fue ella la que armó un escándalo, yo sólo le dije sus verdades, además, eso qué te importa —contestó de mala gana.

Había encontrado por fin las llaves, pero cuando iba a abrir la puerta de su auto rojo, notó que Matsuri y Sasori estaban saliendo juntos, tomados de la mano. Sus puños se apretaron y se mordió el labio inferior.

—Vaya, parece que ya te la ganaron, Gaara —se burló el Uchiha, le gustaba exasperar a su amigo, Gaara no tenía ni un poco de tolerancia.

—Deja de joderme o te mato... —le amenazó el de ojos aguamarina, pero Sasuke solamente se empezó a reír.

—Pero bueno, tranquilo, hombre, ¿tanto te afecta verla con otro? —Sasuke seguía con sus risitas, mientras Gaara lo miraba como si estuviera firmando su sentencia de muerte.

—Ya te lo dije, ella no me importa —respondió con frialdad.

Sasuke lo conocía, no por nada habían sido amigos tanto tiempo y, aunque Gaara fuese una persona usualmente pragmática y que dejaba ver poco de lo que sentía, ellos dos eran parecidos, por eso el azabache lo comprendía.

—Ya sé lo que pasa contigo —dijo, esbozando una sonrisa arrogante—. Estás frustrado porque ella no te hace caso y te maltrata, ¿no? Creíste que sería una chica débil y sumisa, pero fue todo lo contrario.

—¡Ya te dije que no es eso! —exclamó el furioso pelirrojo, agarrando a su amigo por el cuello de la camisa, ya estaba exasperándose demasiado, Sasuke lo había sacado de sus casillas.

En eso, otra voz lo distrajo.

—Vaya, hermanito, parece que al gran Gaara no le está yendo muy bien con una chica —oyó a Kankuro, quien se había quedado parado a un lado de ellos, había oído toda la conversación entre ambos y no se aguantó las ganas de molestar al menor—. Pero no te preocupes, porque el gran Kankuro atrapa chicas está aquí para ayudarte.

—Kankuro... —Gaara soltó a Sasuke y cerró sus ojos con fastidio—. ¿Qué rayos quieres? —cuestionó—. Además, ya les dije que NO me gusta esa chica —aseguró, recalcando el no, por si acaso no le entendían.

Amores de Secundaria (Editada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora