𝐈𝐍𝐒𝐀𝐍𝐄 ✅

06

La mujer omnipotente

Tras aquella cosa que no llegó a más,decidió no hacer y esperar que ella se calmase un poco porque él sabía lo que podía pasar si la hacían explotar.Si traspasaban ese límite auto impuesto por ella, realmente sería una catástrofe que pasara eso.No se retractaba de decirlo,hasta ella necesitaba oír eso de alguien de vez en cuando y hacer frente a la realidad,el cual no era su mundo de fantasía pero tenías que tener agallas y saber cuál el momento adecuado para hacerlo porque o sino perderías la cabeza de una.

—Joder...—se levantó de su cama con dolor de cuello,Seiko sí que se enfadó ayer y no creía que vendría a la práctica de hoy,digo,misión de hoy.

Fue al baño de su habitación y se miró en el espejo,viendo un moretón en donde ella ayer casi lo estrangulaba y dejaba sin aire.Una mujer del todo fantástica pero a la vez temible,una mujer que en la cama era una santa pero fuera un demonio.Eso era lo que le decía Kenzo,el único con el que se acostó.Amigos con derechos eran.Él y ella solo lo hicieron una vez y antes de que todo el incidente Juzoku ocurriera.

Tras ducharse,cogió una toalla pequeña que usaba para lavarse la cara y la mojo con agua muy fría y se la pasó por el moretón.

—Esto lo hará.—se vistió con su uniforme de hechicero y salió hacia la escuela de magia.

|•••|

—¡Gojo sensei,buenos días!—le saludó Itadori,estaba feliz por alguna razón.

—Buenos días chicos,¿nos vamos ya?—hizo una gesto para saludarlos.

—¿No va a venir Juzoku sensei?—preguntó esta vez la única mujer del grupo.

—No lo hará,iremos solamente nosotros cuatro porque está de baja hoy.

Respondió a sus alumnos,aunque no lo mostraran mucho le habían agarrado cariño a Seiko en el poco tiempo que se conocieron pero ella también pero lo hacía ver a su forma.

|•••|

Se vistió con un top que simulaba una camisa y era de manga larga,lo combinó con unos pantalones vaqueros negros y un bolso color blanco.

—Vámonos de compras Kenzo,llévame a donde siempre.—salió ella bien vestida y le dio la mano a su amigo.

—A tus órdenes.

Como hoy se dio de baja porque no soportaría ver a Satoru hoy y menos cuando tenían una misión,y no quería montar una escena delante de sus alumnos.Los únicos que se les asignaron en toda su vida porque además era su primera vez como profesora de primer año.Le encantaba ir de compras,era uno de sus pasatiempos además de hacer sufrir a la gente.

Pararon en un restaurante bastante pequeño,no había mucha gente y tenía buena pinta las fotos pero al estar rodeado de otros restaurantes más famosos y en los que la gente iba más antes de que uno que no conociera.

—Buenos días.—saludó al entrar,había una barra y también mesas.

—Buenas,¿qué desearían tomar?

—¿Tenéis Sake?

—Por supuesto,aquí tenéis la carta.Me alegra que hayáis venido por soy yo solo en el restaurante desde que mi hijo desapareció,ya no viene gente aquí.

—¿Enserio? Mira,comeremos lo que tú elijas.Lo que más te guste y que sean tres de eso.

Era un señor que ya se le notaba la edad,además se notaba que le tenían mucho aprecio a este local y por lo que dijo no vino gente en unas semanas y ella sabía que significaba que algún día no podría pagar l renta de este lugar.Y encima la ausencia de su hijo,supuso Seiko que fue una gran pérdida y tenía un instinto a que estaba relacionado con una maldición o algo.

Invitaron al señor a comer y descubrieron que su nombre era Okito,alguien que perdió a su mujer cuando su hijo nació y tuvo que criarlo solo.Le inculcó el arte de la cocina y le enseñó a preparar fideos hasta su reciente desaparición que fue cuando la gente dejó de venir.

—Fue un placer conocerlo señor,enserio y prometo que encontraré a su hijo.—dijo Seiko tomando las manos del anciano.

—Gracias,me alegra que en el mundo aún queden ángeles como tú,que dios te bendiga.—respondió.

—Y este es el dinero por esta deliciosa comida,tómelo.—era un cantidad mucho mayor de la que debí pagar.—Considérelo un acto de bondad de mi parte,su historia me conmovió.

—No puedo aceptar tanto.

—Okito san,está bien y úselo en usted y en mejorar este lugar para que así más gente descubra su cocina de los cielos.

—La recordaré y estaré agradecido eternamente, venga a visitarme con su pareja más veces.

Miró a Kenzo de reojo.

—Claro que sí,nos vemos Okito san.

|•••|

Kenzo empezó a hablar tras subirse al vehículo.

—¿Porqué hiciste eso? Digo darle dinero de más al señor e ir a ese restaurante,no es propio de ti siendo tan seria.Además podríamos haber ido a ese restaurante en vez de ese,que estaba todo sucio.

—¿Hay algún problema en querer ayudar ala gente de vez en cuando? Los abuelos como ellos son los que más me entristecen por tener hijos de mierda o simplemente que alguien les haya arrebatado a ese hijo y quiero hacerle un favor a ese viejo.

—Nunca haces nada sin pedir algo a cambio,te conozco desde que naciste y nunca hiciste cosas así ni cuando ellos habían muerto.

—Solo quiero hacerlo,¿vale?

—...

—Quiero investigar esa desaparición del hijo de ese señor,tráeme un informe lo antes posible y le traeré su hijo ya sea vivo o muerto para que sepa cómo acabo por lo menos.

A lo mejor todos teníamos un punto débil con alguien o algo,no todos los que eran demonios eran totalmente deleznables ni todos los ángeles eran completamente santos.Algunos se mantenían en esa fina línea que los separaba a los grandes grupos y Seiko definitivamente no era ángel era un demonio más bien angélico.