3: Una interesante despedida de soltera

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—¿Ya estás lista? —pregunta Alessa en llamada y yo apenas tenía puesto el corset.

—Ya casi, solo me falta peinarme —miento descaradamente.

—Voy llegando.

Luego de que les dijera que si iría a la dichosa despedida, las cuatro se emocionaron y Alessa junto con Lisa fueron a sus residencias para arreglarse. Kenzie me ayudó un poco con el maquillaje y supe que iría porque Alessa la invitó, ya que sintió que su presencia también me haría bien. Iris no dijo casi nada cuando estábamos juntos, la vi algo distraída y no me dio tiempo de preguntarle que pasaba, no con todas ellas allí.

Como puedo, busco un jean alto de cintura y unos tacones con una chaqueta de cuero. Pensé que me arreglaría en diez minutos pero fueron en realidad veinte, pobre de mis amigas esperando abajo porque les mentí pero jamás en la vida una persona tardaba pocos minutos en arreglarse. Espero unos minutos más a Kenzie y salimos para ir al ascensor donde nos encontramos a uno de seguridad, quien solo nos miró y luego nos ignoró.

Entramos al auto, saludo a mis chicas y le envío un mensaje a Iris diciéndole que la espero en la fiesta y aunque no me responde en los siguientes minutos, le envío otro mensaje preguntándole si todo estaba bien.

—¿Estas preparada para la súper fiesta de despedida que le preparé a mi hermana? —Alessa sonríe y sé que se trae algo entre manos.

—Vamos, dime ya cual es la sorpresa.

—No seas así, espera y verás.

—Dios mío, ¿tiene algo que ver con algo que sea desnudo?

—La paciencia es una virtud. Además, presiento que el imbécil de Daniel llegará con los perros falderos. Teme que lleve gente desnuda a la despedida de Amber y lo engañe.

—¿Y hay gente desnuda?

—Recuerda quien soy, mi reina.

Ella sonríe cuando dice eso y me rio porque sé que Alessa es capaz de todo. Pongo algo de música mientras vamos en camino. Reviso mi teléfono nuevamente a ver si Iris respondió pero hay varios mensajes de Kyle donde dice que quiere hablar conmigo, otros de mi papá preguntando cómo estoy, que cuando iré a visitarlo y aunque odiaba la idea de ir a verlo, obligatoriamente debía hacerlo. Le respondo con un cortante "pronto" y guardo el teléfono, no sin antes de responderle a Kyle que dejara de molestar.

—Mira, mira.

Dejo de pensar en algunas cosas y me enfoco en Alessa para mirar lo que dice, habíamos llegado al club que rentamos para esta noche porque por supuesto ayudé en todo esto en último momento, a pesar de que el dinero no era completamente mío sino de mi padre, no me arrepentía. Estacionamos el auto y cuando entramos, me rio de la decoración que escogió mi mejor amiga.

A donde sea que mires, hay un extraño adorno sexual de diferente color y tamaño con frases sexuales, el lugar fue ambientado con color rojo y negro y no habían tantos asientos, Alessa decía que lo mejor era pasar toda la noche bailando y que no iba a permitir que ninguna estuviera sentada. No sé cómo de verdad dejaron que ella hiciera esto. Suelto otra carcajada cuando Amber entra después de nosotras y mira con recelo a Alessa, algunas amigas de Amber e incluso su mamá y sus tías, se ríen ante tal escena. Hay unos anfitriones que nos piden las chaquetas para colgarlas en un perchero y soy la única que no la entrega. Las amigas de Amber me observan con burla pero mis amigas sonríen y entienden.

—¡Que la fiesta comience! —grita Kenzie para cambiar el ambiente y todas le seguimos.

Caminamos hasta la barra donde está un chico con máscara y en traje haciendo los tragos. Pedimos una ronda de shots y luego fuimos a la pista de baile. Amaba ser parte de esto, desde que mi hermana y yo conocimos a Alessa y nos incluyó en su familia, sentí que volvía a tener una después de perder la mía. Pero, no iba a pensar más sobre esto. No ahora.

En medio de la nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora