Domingo a la tarde noche - En el departamento -
¿Vieron sus caras? Estaban felices cuando les dijimos – la primera en entrar al departamento y tirarse al sillón fue Alexandra. Se habían levantado muy temprano para ir a despertar a los chicos del convento con un desayuno sorpresa cortesía de Lionel y Lillian Luthor y se quedaron durante todo el día hasta que la Hermana Ana las echó.
- Nia no lo podía creer, preguntó si era cierto como veinte veces y cuando la hermana Anna se lo confirmó saltaba en la cama – Lena siguió a su amiga en el sillón.
- Si ella y Kara ¿Cuál de las dos saltaba más alto? – preguntó Alex mirando a su amiga.
Lena sonrió sin darse cuenta recordando los saltos en la cama de Nia y de Kara – Es cierto... - La verdad era que, desde que Lionel Luthor consiguió por medio de sus contactos, el permiso para que tanto Nia como Ruby pasarán un fin de semana en el departamento que habitaban las cuatro chicas, lo único que la empresaria había hecho era imaginar la cara de Kara cuando lo supiera. Tanto Alex como ella, y hasta la misma Samantha habían decidido que lo mejor era decírselo a las tres juntas y así fue, antes de irse del hogar lo hicieron y el número de risas que soltó Lena fue incomparable con la cantidad de veces que Kara la abrazó en agradecimiento.
- Me gusta tu cara cuando piensas en Kara – soltó Alexandra.
Lena solo la miró - ¿Qué cara? – preguntó haciéndose la tonta.
- Cara de boba, es una cara que nunca antes te había visto poner – contestó.
Lejos de cambiar de tema, Lena decidió ser sincera – No se que me pasa con ella Alex...
- ¿Estás segura? – Le refutó la castaña – Yo creo que si lo sabes – le dijo.
La empresaria sacudió su cabeza – Samantha tiene razón, somos muy diferentes, tenemos vidas diferentes. Nosotras nos vamos en poco...
- ¿En serio Lena? – La bailarina la miraba seriamente - ¿De verdad vas a seguir los consejos de alguien que está tan aterrada de tener una relación que todas las noches se inventa una enfermedad distinta para que me quede con ella en vez de salir con Maxwell? – Lena rió cuando se acordó de la supuesta "clitoritis" que Samantha se había inventado la noche anterior para evitar que Alex saliera con el tatuador. La chica alegaba que su supuesta falta de sexo estaba ocasionando que su clítoris se apachurrara y perdiera vida. Cuando Alex le recordó que el día anterior la había visto salir del departamento de la vecina del primer piso Samantha tuvo que cerrar la boca y fumarse la salida de su ex amante.
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Sem soja para ti
FanfictionUna millonaria inversora llega a New York acompanhada de sua sociedade e sua melhor amiga com o propósito de arrasar com todo e agregar mais logros e milhões a sua vida perfeita e controlada. Que conocer a una persona a cambiar nunca sus pen de form...