Monarca (Yaoi/BL)

XXXVII

–Que tal me veo? –Preguntó Krestel tras probarse su traje oficialmente para pasado mañana.

Estaba precioso, había usado la misma tela que con el mío, pero el suyo era tan digno y elegante.

Una chaqueta con una tela vaporosa  bordada minuciosamente caía de su hombro derecho llegando hasta su rodilla, sus pantalones se ceñían a la perfección dejando ver que si le daba la luz se veían como reflejos de plumas. Su camisa de chorreras sin embargo era completamente de encaje dejando ver su piel a través de ella sólo teniendo la protección de la chaqueta.

–Te ves como un príncipe encantador –Respondí con cariño ilusionado por lo bien que se veía.

–Pues espera a ver a tu caballera –Comentó Keu haciendo que me girara al salir Ailish del probador.

Un precioso vestido sencillo de gala negro largo acentuaba sus curvas con elegancia mostrando su piel al tener una abertura en la pierna derecha y tener cuello barco cruzado.

Desde luego Ailish tenía cuerpo para llevarlo, y ella lo sabía subiéndose con elegancia al pedestal dejando que Keu le colocara los pendientes y el collar.

–Toda una bella dama sencilla y empoderada –Comentó Keu con orgullo.

Todos estaban tan guapos con su ropa... pero al final llegó el momento de ponerme la mía.

Una elegante y larga manga mariposa cruzada vaporosa era lo primero que llamaba la atención al ser el resto de la camiseta algo sencillo y ceñido que únicamente tenía una abertura en forma de lágrima en la espalda, los pantalones eran también largos y muy anchos teniendo una abertura a cada lado provocando que se vieran mis piernas al caminar y los zapatos debían tener algo de tacón precisamente para no pisar el pantalón.

Keu ni siquiera me dejó hablar colocándome las joyas antes de verme al espejo.

–Tal vez se ve demasiado, no crees? –Dudé viendo que si movía los brazos también se veían prácticamente hasta casi el hombro.

Aun estaba muy delgado, y el pantalón se ceñía sin miedo a mi cintura al igual que la camisa.

–Ya has recuperado suficiente peso, no es tan grotesco como antes, y eso la gente necesita verlo, que aunque en verano aún no podía por el estado delicado de su cuerpo ahora si, se esta recuperando y el pueblo necesita verlo –Respondió con seguridad.

El pueblo necesitaba ver mi recuperación, así que supongo que debía llevar con seguridad esta ropa.

–Estas más bello que un dios –Halagó Krestel ofreciéndome su mano para ayudarme a bajar.

–Fue a decir el príncipe encantador –Respondí bromeando dándole un beso antes de ir a cambiarme.

En nada sería realmente mi cumpleaños, solo dos días para todos los fotógrafos que desearan sacar fotos y todas las familias nobles que pretenderán conocerme con orgullo aunque no haya hablado nunca con ellos.

Que poco me gustaban los acontecimientos públicos, aunque Vega y Crux escribieron prometiendo asistir, así que al menos no sentía que fuera a estar completamente rodeado de desconocidos. Los tenía a ellos y a Krestel.
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Los días pasaron más rápido de lo que me gustaría siendo de repente ya mi cumpleaños.

Vega y Crux vendrían por la tarde y se quedarían a dormir en palacio preparándose con nosotros.

Estaba muy nervioso.

Ojalá mis padres tuvieran la seguridad suficiente para venir a estos bailes, me habría gustado que estuvieran también aquí.

–Caillech –Me llamó Krestel sacándome de mis pensamientos.