26. Herejia

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Apuesto a que me veo papucha, casi caigo, si no es por Hemlock, estoy parada mientras escucho a los chicos alegar, y aún más Ash

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Apuesto a que me veo papucha, casi caigo, si no es por Hemlock, estoy parada mientras escucho a los chicos alegar, y aún más Ash.

-No se por que la traen aquí, ella no pertenece a esto -siseo, lo mire de reojo y vi como lo estaban fulminando con la mirada, por otro lado el pelinegro que solo reviraba los ojos.

-Mejor cállate Gehenna que por tu culpa casi se cae – siseo Ash, estaba apretando las manos, tanto que sus venas se marcaban.

-Ella no pertenece a esto – repitió.

-Vamos Gehenna no seas odioso – su voz se me hacia conocida, pero me era imposible recordar, aunque en el fondo sabía que lo conocía – ignorarlo, yo soy Crisantemo – me tendió la mano, y confiada se la di – ignorarlo se paro con el pie izquierdo, siempre suele ser carismático.

-Lo soy pero con ella, no. – decidí ignorarlo segui caminando, sabia que estaba cerca del próximo circulo, algo me lo decía, ignore lo que acaba de pasar y me puse pendiente a mis alrededores, hay una... o bueno una, si no muchas tumbas en llamas, y hay alguien queriendo salir... pero no grita.

Me volteo a ver a los chicos: Auremio, Ash, Aleister, Hemlock, Gehenna y Crisantemo lo que significa que... estoy en el sexto círculo...

-y este es mi circulo la...

-Herejia - dije al mismo tiempo que él.
-Eres muy inteligente Flaca.

-Flaca -repetí - ¿Por qué Flaca?

-Por que si – me abrazo y quiero pensar que se dio cuenta de que estaba mirando a la persona – no me gusta el ruido – lo mire de reojo ya que tenia su cara en mi hombro – por eso no gritan.

Al ver que seguían peleando me aleje de Crisantemo y los mire - ¿puedo hacer una pregunta? – todos me miraron y asintieron - ¿Quién será el siguiente?

-Cassian – me quede perpleja, no quería verlo y mucho menos estar con él, simplemente no lo quiero ver, mi corazón ahora latía como loco y sentía que en cualquier momento vomitaria.

-Tranquila, iremos lo más rápido posible – susurro Ash, a lo que yo solo asentí y empecé a caminar.

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