Tear of my blood

Necesito pruebas

Salgo a toda prisa del salón, pero cuando recuerdo la amenaza del detective sobre que debo ser discreta reduzco mi velocidad. Se supone que debo actuar normal después de haber visto a un compañero muerto hace cinco minutos y todo para no manchar la reputación de esta prestigiosa escuela.

Veo la hora en el reloj que hay en mi muñeca. Son las once con quince minutos, eso significa que todos deberían de estar en la cafetería para un descanso que tenemos de treinta minutos así que me dirijo ahí intentando calmar el manejo de nervios que soy. Al llegar veo a mi única amiga, Clara, sentada en nuestra mesa de siempre.

Clara es la única que no me juzgo por mi posición económica, es una chica de dinero a la que le dio lo mismo que yo apenas y tengo para sobrevivir.

─ Hola, Ailén ─ saluda sonriente cuando me ve, pero una vez estoy mas cerca su ceño se frunce ─ ¿Por qué estas pálida? ¿te sientes mal?

─ Estoy bien ─ si, bien, solo soy la principal sospechosa de un asesinato que sucedió aquí ─ No te preocupes.

─Vale, la maestra de francés explico nuevo tema y dejo tarea así que deja te doy mis apuntes....

Ni si quiera la escucho o miro ya que estoy aturdida, tengo miedo de que no encuentren pistas y decidan seguir culpándome, miedo de la imagen de cuando encontré el cuerpo que no deja de reproducirse una y otra vez en mi mente causándome escalofríos, estoy asustada porqué un asesinato ocurrió aquí demostrando que no es un lugar seguro su prestigiado instituto.

Debo demostrar mi inocencia, pero ¿cómo rayos lo hago? La palabra de Jaime como testigo del porque llega tarde no será suficiente para el detective Huerta si hubiera evidencia como una foto, video o... ¡Las cámaras! El instituto tiene cámaras en los pasillos...pero ¿Cómo consigo los videos? Yo no soy experta en informática y tecnologías, en eso me gana Joshua.

Mi mirada recorre la cafetería buscando al rubio, lo encuentro sentado solo en una mesa al fondo.

Los tres puntuajes más altos de calificación los tenemos Joshua, Paula y yo, sin embargo, aunque sabemos de todo, nuestros fuertes son cosas distintas. Lo mío son los idiomas, la literatura, el arte mientras que lo de Paula es el análisis de datos e información, los negocios y la tecnología. Por último, como ya había mencionado, Joshua es experto en la informática, tecnologías, sistemas e ingenieres técnicas.

Sin despegar la mirada del rubio escuálido con gafas debato internamente si debo pedirle ayuda o no, tal vez le pueda inventar una excusa como que me pillaran robando las respuestas de un examen o algo por el estilo.

El timbre suena indicando que el receso ya acabo, Clara se despide de mi y aunque mi lógica me dice que vaya a clases y ya termino ignorándola y siguiendo al chico por el pasillo.

─Hola, Joshua─ me situó a su lado caminando a la par.

─Ailén─ reajusta sus gafas mirándome confundido a través de estas. Creo que nunca habíamos hablado.

─Necesito un favor─ suelto sin rodeos ─uno grande.

─Bien ─asiente─ ¿en qué puedo ayudarte?

Miro a nuestro alrededor, asegurándome de que nadie pueda escucharnos.

─Necesito que obtengas acceso a las cámaras de la escuela─ susurro y el abre los ojos denotando sorpresa a la vez que niega.

─No, no, claro que no ─responde asustado─ ¿te volviste loca o qué?

─Joshua es importante─ suplico.

─ ¿Mas que mi expediente académico limpio? No lo creo.

─Dependo de eso─ admito─ por favor...─ un estrepido ruido nos hace pegar un salto del susto. Nos giramos a de donde provino el sonido que fue un casillero cerrándose, encontrándonos a Paula con una sonrisa ladeada en el rostro.

─ ¿Qué pudiste haber hecho como para estar dispuesta a poner en riesgo tu beca aquí? ─ trago saliva al darme cuenta de que escucho nuestra conversación. Miro a todos lados viendo si hay alguien más, pero solo quedamos nosotros en el pasillo.

─ Nada─ murmuro nerviosa─ olvídenlo.

─¿Sabes?─ inquiere ella caminando alrededor de nosotros en circulo─ hoy paso algo de lo que no quieren que nos enteremos en el salón C-103 ─ se detiene detrás de mi poniendo sus manos sobre mis hombros ─ y te vi a ti salir de ahí hace rato.

Joshua me mira esperando que lo niegue, mientras ella se posa a mi lado observándome detalladamente.

─ ¿Por qué no están en clase?─ una prefecta aparece al inicio del pasillo mirándonos con una ceja arqueada. A mi el terror a que se enteren que estoy buscando respuestas me da miedo gracias a la amenaza y a Joshua se le pone el rostro de mil colores por el miedo a que no lleven a dirección.

─Organizaremos el evento de caridad del instituto─ miente Paula sonriendo─ así que nos poníamos de acuerdo.

─Pues háganlo en a la hora del almuerzo que ahorita deberían estar en clase ─ asiente hacia los salones─ Muévanse.

Joshua avanza hacia el final de ese pasillo junto con la Paula, me quedo observando la cabellera castaña que se mueve en el aire conforme camina.

No necesita decirlo dos veces ya que los tres salimos despavoridos hacia nuestras respectivas clases. Joshua avanza hacia el final de ese pasillo junto con la Paula, me quedo observando la cabellera castaña que se mueve en el aire conforme camina. Al llegar a mi salón me excuso con la maestra con la misma mentira que acaba de decir Paula, tomo asiento e intento centrarme, pero los sucesos de este día no dejan de atormentarme sumándole la platica de hace unos minutos.

Paula sospecha sobre lo que está pasando.