📅 LUNES
📅 DOS DÍAS DESPUÉS
Lucia removía el chocolate siguiendo las indicaciones de su tía. Era más difícil de lo que ella pensaba. Estaban haciendo una mousse y en su elaboración había que poner mucho cuidado. Tía Olga fue añadiendo el azúcar muy despacio mientras su sobrina seguía mezclando los ingredientes.
La puerta principal se abrió y se cerró con algo de violencia, sobresaltándolas a las dos. Segundos después, tío Fran entraba furioso en la cocina y se dirigía directamente a su sobrina.
- ¡Lucía!
La rubia se dio la vuelta con una sonrisa, la cual desapareció de su cara al ver la rabia en el semblante de su tío. Él nunca le había pegado una voz. Ni nunca la habia mirado asi.
- ¿Tú te crees que somos tontos o qué? -su tío se agarró a la encimera mientras miraba a una perpleja Lucía. Un ramalazo de pánico invadió su cuerpo pensando en la posibilidad de que su tío se hubiera enterado de lo del "paquete".
- ¿Porqué le gritas, Fran? - le preguntó tía Olga muy sorprendida por la reacción de su marido.
- Aquí, tu sobrina, que se ha liado con ese delincuente de Brahim...
Lucía sintió como se le secaba la boca y le temblaba todo el cuerpo. Lo que más temía que pasara, acaba de suceder. Estaba claro que el beso de anoche, tenía sus consecuencias, y éste, había tardado poco en llegar a oídos de su tío.
- Brahim no es un... - Lucía le habló despacio y con cuidado, pues no quería complicar las cosas más de lo que estaban.
- ¡No me vayas a decir que no es un delincuente, Lucía! Que no está en El Castillo por no hacer nada... Además que lo detuve yo, joder -le dijo él como si creyera que ella no sabía nada.
- Lo sé... - le dijo ella alzando su barbilla sin dejarse amedrentar por él.
- ¿Ah, si? ¿Sabes que vendía droga en su instituto? ¡Que es un puto camello!
- ¡Si! ¡Si que lo sé! - le respondió ella en el mismo tono- el que no lo sabe todo eres tú.
- ¡Válgame dios! No lo defiendas, Lucía. Te está comiendo la cabeza para verlo todo de una manera romántica y alejarte de la realidad... y es que él, es un delincuente...
- Pues mira, te equivocas. Me lo ha contado todo, TODO. Y tú sabes bien que él no debería estar en el Castillo. Su lugar debería estar ocupandolo otra persona... Y si, hasta eso lo sé...
Lucía cruzó sus brazos desafiando a su tío. Lo que acababa de soltar su sobrina le había hecho pensar. En la comisaría, siempre habían sospechado que Brahim se estaba comiendo el marrón de su madre por ser menor. Y las palabras de su sobrina se lo confirmaban.
- ¿Qué hay entre tú y él? - le preguntó su tío intentando mantener un calma que no podía tener.
- Lo que haya. Es asunto mío, no tuyo -le respondió ella de una manera algo altiva.
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El Castillo - Brahim Díaz
Teen FictionBrahim llevaba la palabra peligro tatuada en su piel. A sus 18 años era un conflicto andante. Después de este verano por fin sería libre y nada ni nadie lo podría parar. Lucía no quería pasar su último verano antes de ir a la Universidad en el puebl...