Depresso

XVIII

Amargo reencuentro

Menuda reunión familiar, ¿no?

Imagina reencontrarte después de mas de 20 años con tu padre que te abandono a los 6,  darte cuenta de que siempre lo tuviste enfrente y encima tu madre esta muerta, enterandote de esto ya estando parado frente a su tumba junto con tu padre ausente.

Bueno, esto le sucedió a Gustabo García.
Que resulto no llamarse Gustabo García si no "Matthew Conway"
Sinceramente no me gusta tanto, pero para gustos colores.

Y todos nos preguntamos lo mismo, ¿como es que Matthew, decidió llamarse Gustabo García?

Yo te lo explico.

Gustabo García, digo, Matthew Conway, luego de ser abandonado por sus padres, tuvo que vagar por las calles completamente solo.

Sin contacto físico.
Sin relaciones sociales.
Y sin amigos.

Matthew Conway termino por olvidar su nombre pues, ¡no lo necesitaba!

Así fue como un niño cuyo nombre fue olvidado intento sobrevivir durante unos años mas.

Hasta que a la edad de los 12 años, luego de pasar por increíbles y no tan increíbles aventuras, conoció a un niño de 11 años de nombre Horacio Pérez, que si tenía bastante claro su nombre.

¡Se hicieron prácticamente inseparables!

Pero grave fue el problema del rubio al tener que responder a "¿Como te llamas?"

No lo sabía, pero si había visto una serie bastante famosa de origen español, en la cual cayo prácticamente rendido por el protagonista llamado "Gustavo".

- ¡Me llamo Gustavo!

Claro que para un niño que no había recibido prácticamente ningún tipo de educación, las B y las V, junto con las H, las Y y las S C, no eran muy sencillas para Matthew.

- ¿Gustavo es con B o con V? —El niño cubierto de barro se quedó en blanco.

- Hum. . . ¡Con B! De Velero.

- ¡Ohh! Eres muy inteligente.

Bueno, ese es un breve resumen, ¿que les parece si volvemos al presente?
¿No les parece?
Me da igual, volvamos.

- ¿Papá?

Su voz estaba entrecortada, Conway solo dejo su boca entreabierta.

Ambos dejaban brotar sus lágrimas, sin tocarse ni dirigirse la palabra.

Gustabo miró al árbol detrás de Jack y comenzó a llorar desesperadamente.
Salio corriendo, apunto de tropezar en una seguidilla de piedras.

«"¿Por que esto me sucede a mi?"»

Se reclamaba con los ojos nublados, se subió al patrulla y miró hacia atrás.
Conway seguía en el mismo tronco, cabizbajo.

- Trozo de mierda. —Renegó el de ojos azules en voz alta y arrancó el auto.

Tenía las orbes inundadas, no veía el camino y menos le importaba.
A mitad de camino el sonido de llamada retumbó en sus oídos, pero el ruido del auto a gran velocidad lo amortiguaba.
Conway lo llamó al menos 4 veces antes de que Gustabo decidiera tirar el teléfono por la ventanilla.

Llegó a comisaria únicamente a salir de servicio y quitarse el uniforme pero se vio limitado en la salida ya que se volvio a encontrar a Horacio, este estaba robando unas papas de la máquina exprendedora.

Al verlo, con las mejillas rojizas y el sollozo de su voz, se acerco rápidamente.

- ¿Gustabo? ¿Que pasa? ¿Estas bien?

Apoyó la mano en el hombro de su compañero. Pero no tuvo respuesta.
Tenía un nudo en la garganta que le impedía contestar, uno que le cortaba la respiración y le daba malestar en el corazon.
Una avalancha de personas, recuerdos, memorias de muchos años atrás que no estaba preparado para recordar tan de pronto.

No sabía nada y de la nada sabía todo muy rápido.

- ¡Fue el! Todo ha sido culpa de el. —Se lamentaba, cubriendose los ojos, creyendo que así no vería mas el rostro de aquel hombre.

- ¿El? ¿De que hablas Gustabo?

- Dejame en paz, quiero irme.

Se quitó de encima la mano de Horacio con rapidez y volvio a correr.

- ¡Joder! —Gritó molesto al recordar que no tenía auto propio.
No le apetecía robar uno ahora.
Tocaba caminar.
Anduvo con torpeza hasta la puerta de su casa, llegó a tiempo antes de que se pusiera a llover.

¿Las nubes se sentirán compadecidas con Gustabo García o simplemente se reían burlescas de la pena ajena?

Hundió su rostro en la almohada, jalo de sus cabellos con desesperación, su cuerpo tembló agitado y grito.
Grito mil barbaridades y grito suplicante que esos últimos meses hayan sido tan solo un muy mal sueño.

TW/// A U T O L E S I O N----

Rascó con fuerza sus brazos, pellizcó sus piernas y mordió sus labios. Tallo sus ojos con dureza causándole dolor.
El llanto y el pánico lo volvía loco, su piel se tornaba rosa, luego rojiza, luego pequeñas comisuras de carmesí.
Daba pequeños golpes a su frente.
Se detuvo cabizbajo, miro sus dedos y lagrimeo, pequeños espasmos que subían desde el pecho hasta su garganta.

Se paró de manera lenta y se dirigió hasta el baño, donde abrió la canilla y al ver el agua helada, metió sus brazos bajo el chorro.
Gimió por el ardor y suspiró agotado.

Un suspiro entrecortado por la vergüenza, se daba vergüenza el mismo.
Le daba vergüenza lo que había hecho, lo que pasó y lo que pasaría en los próximos días.
Se sacó los zapatos cuidadosamente y se desprendió de su camisa y pantalones, quedándose solo con su ropa interior y rayones en su cuerpo.

Todo se estaba yendo a la mierda. No quería volver a trabajar, ver a Horacio con su falso interés, a Conway y su falsa paternidad y compañerismo.
Todo se le fue de las manos y se puso en su contra. Todos contra uno y con todo lo que tienen y todo el rencor guardado contra el.

Esa noche no durmió ni un poco, para no tener esas pesadillas, y menos unas nuevas.
No durmió para así tal vez dormir mucho mas al otro día, para dormir durante horas y horas.
Para no despertar.

End
Episode XVIII