Lo que nunca te dije

Capítulo: 4

—¡CORRAN!— Los gritos de la gente nos sacaron de la discusión en la que estábamos

—¿Que está pasando?— miré a Jonathan preocupada

—Mierda— fue lo único que susurró —La policía

—¿Que?— abrí los ojos como platos

Ok, repasemos las circunstancias. Hace unos minutos me estaba divirtiendo, me pasé de copas, lo admito, luego de ver cómo Claudia y Harry se drogaban tuvimos una pequeña discusión y ahora nos encontramos corriendo tratando de huir de la policía. Jonathan nos guiaba, Lili le seguía, Max estaba detrás de ella, le seguía yo, y luego Harry y Claudia.

—Rapido— Jonathan apresuró.

—Mierda...mierda...no puedo más— Harry se detuvo y yo me detuve a mirarlo, Claudia me empujó y comenzó a correr

—Harry— tomé su mano —vamos

—Oh no, no puedo más— solo bastó pestañear para que los chicos desaparecieran y nos dejaran en el callejón

—Dios, Harry, camina— comencé a jalarlo pero era inútil —¡¡Harry por favor!!— grité

—Oye— me susurró —Naty...¿Te han dicho alguna ves que eres hermosa?

—Harry, no es el momento, por favor

—Digo la verdad, joder, eres preciosa...no me extraña que le gustes a Jonathan, el se ve atraído a las mujeres así de hermosas

—No creo que sea tan hermosas, además, no le gusto a Jonathan

—No lo conoces tan bien como yo

—Por fa, Harry, preocúpate por caminar, anda, luego hablamos de ello 

—No quiero caminar— negó

—Debes hacerlo— Me coloqué delante de él y pase uno de sus brazos por mi hombro —Te voy a ayudar, ven— Harry se tambaleó, ambos perdimos el equilibrio y caímos, más bien, Harry calló y me arrastró con el. El cayó y goleó su cabeza con una roca, yo caí sobre el y tuve una mejor suerte al golpearme con su pecho

—Ah... mierda— Harry se quejó

—¿Estás bien?— Me senté a horcajadas sobre el por inercia

—No...me eh golpeado la cabeza

—¿Donde? ¿Con qué?— pregunté tomando su cabeza en mi mano, había algo caliente y húmedo, no tarde en darme cuenta de que la cabeza de Harry sangraba —¡Oh Dios mío Harry!— me desespere —Estas sangrando— susurré

—Nathalia

—¡Jonathan!— grité desesperada

—Perdon, no quería interrumpir

—No seas estúpido— me levanté rápido —Tienes que ayudarlo, está sangrando

—¿Sangrando? ¿Que paso?

—Se cayó, no puede caminar, se golpeó la cabeza, y está sangrando

—Jony— Harry hablo con cierto enredo —Hola

—Hola Harry, hola..— lo ayudó a levantarse

—!OIGAN USTEDES! ¡ALTO AHI!— la voz de un policía y la luz de la linterna nos hicieron salir corriendo, logramos salir de el callejón e ir a la carretera, despidamos a los guardias y ahora estábamos como tontos en la calle, Harry venía hablando puras porquerías mientras Jonathan solo se quejaba, yo me reía de ambos solo para no echarme a llorar allí. A duras penas llegamos a la Universidad, allá nos esperaban Lili y Max sujetando a Claudia la cual se caía de la borrachera, además de llevar en sima a sus buenas sustancias tóxicas.