C A P Í T U L O V E I N T I D O S 💘

8 3 0
                                    

La chica morena estiró su mano hasta mí y yo la estreché dudosa. Su rostro me sonaba... pero no tenía ni la menor idea de que lugar, al igual que su nombre, inusual, pero lo conocía, estaba segura. Quizás no lo recuerde debido al accidente de las escaleras, los médicos siempre han dicho que podría terminar con lagunas mentales o con pérdida de memoria. El hecho de que no recuerde de donde conozco a esta chica es una bobería, así que no debo de preocuparme.

Mi deber era presentarme, pero no podía decir mi verdadero apellido ya que sería muy fácil para mis padres encontrarme y yo no deseaba volver nunca más a la mansión. Debía de pensar rápido en que decirle para que no fuese raro el hecho de que aún no dijese mi nombre a la chica que ha sido muy amable conmigo en este momento. No lo pensé siquiera dos veces antes de decir:

—Hola, soy Jade Scott. Mucho gusto.

Sí, de verdad usé el nombre de mi novio. Pronto estaríamos casados y ese pasaría a ser mi apellido de por vida, me encantaba como se escuchaba al pronunciarlo. Solamente esperaba que a Joyce no le molestase que hiciese uso de su apellido sin siquiera habernos casado aún, aunque no era nuestra culpa, sino de los que se han opuesto a nuestra unión —mis padres—. Es duro admitirlo pero eso es lo más cierto que hay en nuestras vidas ahora.

Estuve charlando con la chica por aproximadamente media hora hasta que ella dijo que debía de marcharse a cuidar de sus abuelos. Minutos después Joyce entró en la casa demasiado exaltado, no sabía el porqué, pero sea cual sea la razón debió de ser algo serio. Quizás tuviese que ver con mis padres, quizás me encontraron ya y vienen por mí. De sólo imaginarlo mi cuerpo comienza a temblar.

—¿Sucede algo? —pregunto con voz temblorosa.

—¿Quién era esa chica con la que hablabas hasta hace unos minutos?

—Ella es Candy, la vecina. Vino a presentarse. —respondo encogiéndome de hombros.

—Jade, mantente alejada de ella lo más que puedas. —se limita a decir.

—¿Por qué, Joyce? —pregunto curiosa.

La curiosidad es algo que siempre ha estado en mí y que no me dejará en paz hasta el día en que muera. Es por esta curiosidad por la que me entero cosas que no debería de saber y que duelen mucho más de lo que aparenta.

—No cuestiones, Jade. Solamente hazlo.

Luego de decir esto subió a la segunda planta, yo debía de averiguar lo que me está ocultando y descubrir quién es Candy en nuestras vidas. Se que me está ocultando muchas cosas y eso no es nada bueno para una relación en la cual se supone que lo que debe de abundar es la confianza entre ambos. No quiero perder a Joyce por esta pequeñez, pero algo me dice que aquí hay mucho más de lo que aparenta.

Suelto un suspiro y sigo preparando la cena. Es una suerte de que sepa cocinar en estos momentos. Desde pequeña a escondidas de mis padres iba a la cocina a ayudar a Dede, y años más tarde esta me enseñó a cocinar alegando que llegado un día lo necesitaría porque no siempre tendría a los criados cerca de mí para que hiciesen las cosas por mí. Esta es una de las tantas cosas que le agradezco a esa mujer que es para mí como una segunda madre, y la amo mucho por todo.

Al terminar de cocinar llamo a mi novio para que venga a cenar; él baja con una sonrisa de oreja a oreja, como la pequeña discusión que tuvimos hace un rato no hubiese sucedido jamás. Supongo que era mucho mejor así, comeríamos tranquilos como si fuésemos ya un matrimonio feliz. Nos sentamos a la mesa y degustamos lo que yo había preparado con esfuerzo, él halagó la cena y yo sonreí complacida.

—He conseguido empleo, amor. —dijo entonces.

Yo me levanté de mi asiento con una sonrisa en el rostro mientras me dirigía hacia donde se encontraba él para abrazarle y besarle en las mejillas. Durante el resto de la cena charlamos, reímos y en verdad deseé que esto nunca terminara y que si se trataba de un sueño no querría despertar jamás. Mi deseo era pasar toda mi vida junto a él y ser así de feliz como lo era en estos momentos, no quería imaginar la alegría que nos inundaría el día en el que fuésemos padres.

La Chica de París (LCF #1) [Terminada] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora