♫Running home to you♫

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Tn despertó con un dolor de cabeza que solo empeoraba por el martillarte sonido de la puerta siendo tocada con insistencia, se deshizo de las sabanas que rodeaban su cuerpo y bostezó perezosamente mientras caminaba para gritar a quien sea que tocaba a esas horas de la mañana. 

—¡Ya basta, estoy abriendo! —refunfuñó de mal humor tomando el puente de su nariz para alivianar el dolor, al abrir no esperaba ver a Aidan sonriéndole del otro lado con una maleta en su mano.— ¡Aidan! ¿No deberías estar en Toronto? 

La chica intento acomodar un poco su cabello que estaba revuelto, el peinado elegante que lucia anoche ahora eran mechones desacomodados que le daban el aspecto de una bola de pelos, sentía sus ojos hinchados causados por el llanto y el sueño, ni hablar de su vestido que estaba arrugado y ahora no se mostraba nada fino como anoche. 

Solo al ver los intentos nada efectivos de Tn por arreglarse, Aidan fue consiente de su propia apariencia: Usaba unos jeans azules con botas estilo militar y un abrigo largo negro que cubría desde su camisa blanca hasta la mitad de sus muslos. Debía parecer un loco con el cabello despeinado y su atuendo, era un loco, uno enamorado. 

—Bueno, estaba algo aburrido ahí y lo único que pasaban en la televisión era basura... así que pensé en venir a ver a mi talentosa novia para pasar un lindo día. —miraba a su novia mientras sonreía, Tn estaba aguantando mucho las ganas de abrazarlo y llorar por ese lindo detalle.

—En ese caso, adelante los novios románticos siempre son bienvenidos —él entró al departamento no sin antes dejar un cálido beso en la frente de Tn que sonrió ante el detalle.— puedes dejar tu maleta en la habitación, es la ultima puerta del pasillo. 

Aidan asintió y fue hasta el lugar, Tn aprovecho para llenar una tetera con agua y ponerla a hervir, ella moría de hambre y no dudaba de que su novio también lo hacia. Revisó en la alacena y agradeció mentalmente a Lauren, la madre de Aidan, por enviarle una canasta con varios productos veganos a modo de regalo, tomó las rebanadas de pan y puso algo de margarina vegetal antes de ponerlas en el sartén. 

—¿Puedo ayudarte en algo? —preguntó el chico que fue atraído a la cocina por el olor de la margarina derretida. 

—Podrías ayudarme cortando el tofu y un poco de queso para mi.

El pelinegro asintió y empezó su tarea, si los dos cocinaban la comida estaría más rápido, eso era algo que su padre siempre decía antes de meterse en la cocina para ayudar a su madre. Ahora el quería probarlo con Tn. 

Terminaron preparando café, tostadas con tofu o queso, y unas cuantas galletas de arroz para completar. Durante los 20 minutos que estuvieron cocinando hablaban de que posiblemente terminarían con alguna disentería por la cantidad excesiva de café que el azabache colocaba a las tazas, además de conocer que a Tn le gustaban más las tostadas hechas en un sartén que en la tostadora porque según ella así podía regular cuan crocantes eran. 

— ...es mucho mejor porque el sabor de la margarina no se pierde —argumentó ella.  

—Les untas una cantidad industrial de margarina, obviamente van a saber a eso.

Tn se limitó a sacarle la lengua antes de volver a beber de su café, hizo una cara graciosa y su nariz se arrugo.—Le falta azúcar.

—Para mi esta delicioso, —ella me miró mal— supongo que tengo tiempo para mejorarlo.  

—¿Cuánto te quedaras? 

—Una semana, no puedo ausentarme mucho aun estamos grabando y faltan demasiadas escenas. 

—Aidan no debiste venir, tienes mucho trabajo...

—Tengo mucho trabajo pero tú estas mal y no creo tener que decirte quien es más importante. 

↫Hate↬ [Aidan Gallagher]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora